Vislumbre el edificio desde unas dos calles atrás y al llegar a él, baje del auto con tanta rapidez que incluso olvidé cerrar la puerta. Pero eso era una de las muchas cosas que ya no me importaban en ese momento.
El auto podía irse a la mierda.
Entré al edificio casi con desesperación. No podía darme el lujo de esperar un ascensor que se encontraba aún a 6 pisos por encima del que yo necesitaba llegar, así que corrí por las escaleras como llevaba años sin hacerlo. Como si el mismísimo lucifer viniese detrás de mi.
Primero, segundo, tercer piso...
Me paré frente a la puerta que buscaba y traté de normalizar mi respiración. Debía hacer aquello con calma, tranquilizarme.
Respire profundo, y entonces, llamé a la puerta tocando tres veces sobre ella. Escuche pasos del otro lado antes de ver a Seolhyun abrirla.
Me miró impresionada. -¡Oh, Jennie! Que sorpresa, estaba de hecho a punto de llamarte. Como estos últimos días no habías venido yo pensé...
-Seolhyun- la detuve al ver su además de acercarse a mi, poniendo una de mis manos entre nosotras. -Disculpame, y de verdad lo siento pero... No quiero divorciarme de Lisa.
Seolhyun me miró incrédula ante mis palabras, incapaz de creerme. -¿Acaso tienes fiebre o algo así?
-No, no la tengo.- la miré directo a los ojos, firme. -Seolhyun, no puedo seguir con esto, engañarme que todo saldrá bien de esta manera.
-Yo amo a Lisa y ella me ama a mi. Solo que con el tiempo, la rutina se encargó de aparecer en nuestra vida, volviéndola aburrida. Comenzamos a dejar de lado todos aquellos bellos detalles que hacían de nuestra vida algo diferente.- con unas de mis manos roce mi cuello. -Y desde que comencé a cargarla desde la habitación a la salida, no he podido evitar pensar, que así es como quiero pasar el resto de mi vida. Con ella en mis brazos. Hasta la muerte si es posible.
Seolhyun me miraba con los ojos llenos de lágrimas, destrozada por las palabras que habían salido de mi boca, impregnadas por el deseo de mi corazón.
Y entonces me abofeteo.
Tan fuerte, que incluso me sentí desconectada por unos segundos.
-No puedo creer... Que después de todo este tiempo, que te di... Me hagas esto.- ella miraba a sus pies, y temblaba a causa del llanto y el enojo. -¿Cómo es posible que aún tengas... El maldito descaro de estar parada frente a mi puerta? Dimelo, Jennie...
Una de mis manos se encontraba sobre mi mejilla adolorida. -Se que parezco una idiota en estos momentos...
-Lo eres...
Suspiré rendida. -Bueno, sí, soy la mayor idiota de este maldito planeta ¿De acuerdo? Incluso yo me detesto, me horroriza verme en el espejo y saber que e sido capaz de hacer lo que hice, lastimando personas que no tenían la necesidad de tener que estar de... de ese modo. Y menos por alguien como yo.
Traté de encontrar sus ojos, pero me fue imposible.
-Seolhyun, de verdad lo siento. Y sé que eso jamás será suficiente para enmendar el error que he cometido. Pero, tú mereces más que esto, eres una gran mujer con una personalidad increíble. Eres fuerte, divertida... Mereces algo mejor.
-Tú no eres nadie para decir que es lo que merezco.- levantó la mirada y sentí un frío recorrerme el cuerpo, su mirada era glacial. -No te quiero aquí, Jennie. Quiero que te largues... Ahora.
-Seolhyun...
-Si un día llegas a encontrarme...- ella volvió su rostro hacia abajo y comenzó a caminar hacia atrás. -No importa dónde... No vuelvas a mirarme a los ojos.
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No Sabemos Lo Que Tenemos. [Jenlisa; adaptación]
FanfictionJennie toma el valor de cambiar su vida con la "sencillez" del divorcio, a cuestas de quien alguna vez abarcó su corazón. Por eso, Lisa no está preparada para un cambio que es ajeno a su lucha. En cuerpo y alma. esta historia no me pertenece, todo...