capítulo 2

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Ya casi había pasado media hora a la que acordó con Sarada y ella aún no hacia presencia en el lugar. Tal vez se había arrepentido y decidió no ir. Miró la pequeña poza que tenía en frente la cual reflejaba la gran luna de esa noche. El lugar estaba muy bien decorado, tenía unas cuantas linternas que iluminaban mínimamente el lugar. Cuando escuchó los pasos de alguien sabía que era Sarada ya que era un lugar muy escondido y era imposible que alguien estuviera por ahí.

— Hasta que llegas.— La chica se asomó un poco para poder ver al chico ya que estaba dentro de la tienda de campaña. — Pensé que te habías arrepentido.

— Tuve que esperar a que mamá se durmiera.— Se quedó ahí de pie mirando el hermoso lugar. Era obvio que Boruto conocía ese lugar desde hace mucho, estaba muy bien decorado e inclusó tenía mesa y sillas ¿Porqué jamás le habrá contado de ese lugar?

— ¿Te impresiona mi buen gusto? — Había notado como la chica miraba todo el lugar con asombro.

— Tienes razón, estoy impresionada.— Estaba algo nerviosa y quería que esta noche pasara rápido. Boruto observaba el atuendo de la chica, el cual ya la había mirado antes; era un simple vestido corto de color rojo que estaba pegado al cuerpo y una chaqueta negra.

La chica se quitó sus zapatos y posteriormente entró a la tienda, sentandose al lado de Boruto.

— Entonces ¿Quieres qué discutamos el acuerdo?— Intentaba sonar lo mas natural posible pero la forma en como la estaba mirando Boruto la ponía nerviosa y se puso aún mas cuando vió al chico acercarse peligrosamente a ella.

— Eso ya lo discutimos y quedó muy claro para mi, así que es mejor iniciar.— Le quitó la chaqueta a la chica y la tiró a un lado.

Cuando empezó a besar el cuello de Sarada podía sentir su incomodidad pero poco le importó y siguió. No era la primera vez que sentía ese nerviosismo en alguien. Recostó a la chica y luego metió sus manos debajo del vestido de la misma.

— Ayúdame a quitarme la ropa.— No iba a dejar que Sarada se quedara como una estrellita de mar y no hiciera nada.

Ella asintió. Desabrochó torpemente el pantalon del chico y se lo quitó, tambien le quitó la camisa para luego no saber que mas hacer. No quería quitarle la ropa interior al chico.

Boruto entendió a la chica y él mismo se quitó su ropa interior. Buscó en los bolsillos del pantalón y sacó un pequeño paquete. La chica que en todo ese lapso de tiempo solo estuvo mirando a la nada, fue sorprendida por el chico cuando le puso el pequeño paquete en frente.

— ¿Me haces lo honores?— Ni le dió tiempo de negarse cuando le puso el paquete en la mano a Sarada y se sentó esperando a la chica.

Intentó abrir el paquete varias veces hasta que lo logró, no era la primera vez que ponía uno pero tampoco tenía mucha experiencia. La peor parte, para ella, vino despues. Agarró el miembro del chico, el cual estaba ya erecto, y con cuidado le puso el condon.

Boruto estaba a punto de estallar de risa por la torpesa de la chica, le pareció incluso tierno.

Agarró las tiras del vestido de Sarada y lo bajó lentamente hasta quitarselo por completo. No se sorprendió al verla sin bra, era obvio que hoy no lo necesitaría. La recostó y nuevamente empezó a besar su cuello mientras acariciaba sus pechos.

Sarada podía sentir la erección del chico cerca de su pierna cada vez que se movia. Bajó la mirada asustada cuando él le empezó a quitar las bragas y abrir sus piernas. Por muchos minutos él solo se dedico a besar su cuello y rozarce un poco contra ella hasta que por fin, y sin previo aviso, la penetró.

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