Cap 5. Falsa flor

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Steve, ¿Cómo has esta..... ¡Woah!- justo cuando estaba a punto de entrar a la habitación de Steve, Tony, con su característica torpeza a la hora de usar tacones, termino con la cara en el suelo. Al momento de levantarse alcanzo a escuchar como el peli rubio trataba de ahogar unas cuantas risitas sin éxito alguno.

Durante las últimas dos semanas el castaño había estado yendo y viniendo de su departamento a la casa de Steve, él se había negado a mudarse a casa de sus padres, siempre había odiado sentirse una carga para los demás.

Sus padres solamente pudieron aceptar su decisión y contratar a una joven para realizar algunas tareas básicas debido a que Tony siempre se ofrecía a preparar sus comidas y asear un poco la casa. En este lapso de tiempo el rubio había aprendido a hacerse más independiente, al grado de poder asearse y vestirse por su propia cuenta, así como también el calentar sus alimentos en el microondas y servirlos como correspondían.

¿Qué crees que es tan gracioso?- sus mejillas estaban realmente sonrojadas, su Steve no pudo evitar romper en carcajadas.

Jajá... es que...jajá... Tu...jajajajaj.... Nunca habías sido tan... tan torpe- si la situación anterior había hecho sonrojar a Tony, está definitivamente le provoco un enrojecimiento aun mayor que el color de los tomates maduros.

Bueno, yo solo venía a ver si querías dar un paseo- La idea del joven peli castaño era, sin duda, cambiar rápidamente de tema. Al parecer su Steve lo capto y con una ligera sonrisa acepto la propuesta.

Está bien pero, esta vez yo elijo el lugar- antes de salir, Tony, colgó en el pomo de la puerta una cadena, en forma acampanada, de grullas de origami *.

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¿Estás seguro de querer ir allí?- el pequeño Tony caminaba con cierta resistencia hacia el lugar que le había indicado por sí mismo su Steve, llevaba una funda blanca en su espalda. El peli rubio simplemente le regalo una sonrisa y asintió, iban tomados de la mano y se dirigían hacia una sección específica de un hermoso parque, al parecer la idea incomodaba demasiado al joven peli castaño.

Siguieron caminando por algunos minutos más, hasta que llegaron a la base de una pequeña escalinata, esta conducía a la cima de una pequeña colina que, en su mayoría, era ocupada por una explanada; cuatro postes se elevaban a su alrededor, cada uno en una esquina, uniéndose por una serie de maderas que dejaban la ilusión de un techo conformado por las diversas clases de enredaderas y plantas q se habían abierto paso a través de él.

Al llegar a la cima de la escalinata, el joven rubio, le indico que se sentara; el joven castaño trago un poco de saliva, sabía que esto pasaría, Rogers saco el violín de su estuche y con gráciles movimientos lo acomodo en el hueco de su cuello. Las finas notas bailaban con el viento, transportando una alegre y melancólica melodía, una esperanza vuelta música, una promesa convertida en sonido.

La belleza de la canción era tal que Tony, tuvo que hacer grandes esfuerzos por no cantar; en su lugar empezó a tararear la misma tonada que en su infancia había compartido con Nat y Steve.

Este sitio traía recuerdos nostálgicos a su mente, desde muy pequeños habían estado siempre juntos, esta explanada había fungido como su centro de reunión en muchas ocasiones. Nat y el siempre cantaban al ritmo del violín de Steve, hacia tanto tiempo que no había vuelto a este lugar.

Podría decirse que habían pasado años desde su última visita, más específicamente, el, había dejado de asistir desde que su hermana y su Steve habían formalizado su relación tenía entendido que, tanto su hermana como Steve solían venir cada día después de clases, para pasar tiempo juntos definitivamente el joven Lee no los interrumpiría ni soportaría tal escena día a día.

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