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TRES AÑOS ATRÁS
La monarca de la família Alier observo a su nieta detenidamente, la rubia iba por la 3er copa de champan y no parecía querer parar.
-comportate Alessia - ordenó Margot en voz baja pero firme, la mirada retadora de Alessia se poso en su nonna - Es la boda de tu primo.
- pues mi más sentido pesame por él- levanto la copa de champan y la bebió de un trago - lamento mucho que Lucca se haya tenido que casar con esa vibora nada más para complacer tus berrinches
- respetame, Alessia- pidió su abuela con los nervios de punta, la rubia sacaba de quicio a mas de uno en aquella familia
- el respeto se gana, Nonna - Margot la miro seriamente, aquella ragazza era tan terca y altanera como su padre - no puedes implorar respeto cuando no te lo has ganado
- lo que eh hecho a sido por el bien de esta familia, Lessi - murmuró Margot agarrando una copa de vino, necesitaba algo que le bajara los corajes que aquella niña maleducada le habia creado.
-¿que familia, nonna? Mira a tu alrededor, tus hijos son tan infelices como tu, pero fingen ser felices y tener la vida perfecta por ti, ve a Lucca, el pobre tiene cara de espanto, Amelia era tan infeliz aquí que prefirio casarse con un hombre 14 años mayor que ella que quedarse bajo tu mando - Alessia se levanto de la silla arreglando el vestido rojo, que nonna odiaba, aquel pedazo de tela ni siquiera se podía considerar vestido - felicidades, has hecho de esta familia una mierda.
A pesar de los llamados de su abuela, no se detuvo, camino por el césped tan sexi como aquellos tacones se lo permitieran y salió.
Alfred estaba esperando pacientemente al lado del auto, aquel hombre la conocía desde que era aquella niña hiperactiva que corria por el jardín escondiéndose de las maestras privadas que nonna traía.
Jamás le habian gustado las órdenes y eso era un problema porque era el pasatiempo favorito de Margot
- todo bien ragazza? - preguntó Alfred
- todo Correcto, Alfred.
El blu era el lugar perfecto para olvidar sus penares, según las palabras de Natalie, su amiga se habia pegado a ella en cuanto le mencionó algo de viajar a Sicilia para la boda de Lucca.
Alessia camino entre las personas que bebian y bailaban en la pista, tratando de encontrar a la loca de su amiga, se acerco a la barra, pensando que así sería mas fácil de encontrar.
Leonardo estaba harto de aquel tema en particular, jamas aceptaría tratos que incluían niñas de 14 años y burdeles, eso era muy bajo incluso para las ratas que estaban bebiendo frente a él.
