serim organizaba las mejores fiestas, pero por lo general, odiaba las típicas fiestas, toda esa música ruidosa y atuendos obscenos, sin mencionar las copiosas cantidades de alcohol involucradas y los juegos estúpidos. pero las suyas eran diferentes, la música siempre era baja y relajada, nunca había demasiada gente allí, la suficiente como para alejarse de una "reunión social", pero no demasiada. beber alcohol siempre era opcional, nunca hubo presión para beber o participar en los juegos. por lo general, tú y serim se sentaban a charlar, él también odiaba los juegos, según él, estaban "anticuados y encogidos", con lo que tu estabas de acuerdo.
habías recibido su invitación el fin de semana pasado y esperabas que nada hubiera cambiado. serim te había ayudado a elegir un atuendo esa noche, te costó elegir entre dos opciones, así que lo llamaste y él te hizo saber en cuál creía que te verías mejor. al llegar, se aseguró de hacer un comentario sarcástico sobre tu " fantástico sentido de la moda " y un verdadero cumplido a seguir. entraste a la fiesta, siempre fuiste la primera en llegar a cualquier lugar, por lo que la falta de gente no te sorprendió. "siéntate", te dijo serim, señalando su nuevo sofá, audaz de su parte para poner eso en una fiesta.
— ¿quiero una bebida? ¿una cola-cola tal vez?— te preguntaste.
realmente no tenías elección, serim estaba parado allí con dos bebidas de color fresa en sus manos, listo para entregarte una. preguntaste si deberías esperar hasta que llegaran los demás, pero fue entonces cuando él te hizo saber de su pequeño y astuto plan.
— ha pasado tanto tiempo desde que éramos solo nosotros, quería relajarme solo contigo, pero tal vez te hubiera resultado extraño si sólo te hubiese invitado a ti, sin embargo, sabía que no pensarías que era extrañoinvitarte a una fiesta común, así que aquíestamos.
no te diste cuenta, durante su explicación que su brazo había encontrado su camino sobre tus hombros.
— también he estado ocupado, lohabríahecho antes, pero ya sabes, ídolo y todo— se jactaba bromeando. tus mejillas se volvían de un tono rojo brillante.
pasaste la mayor parte de la noche en esa posición cómoda, tus mejillas ya no estaban rojas y comenzaste a sentirte como en casa con su brazo sobre ti. había puesto una película, era una de sus favoritas. cada vez que serim sentía que estabas sonriendo, se animaba un poco por dentro, te hacía feliz y eso lo hacía feliz. sin embargo, se dejó llevar un poco, besando tus labios en respuesta a tu sonrisa en la película. tu sonrisa no desapareció después del beso, tus ojos no salieron de la pantalla, honestamente no sabías cómo actuar, por lo que estabas tratando de hacerlo bien. mientras tanto, serim balbuceaba algunas tonterías a tu lado
