—Wooyoung... Estoy confundido.
—¿De qué manera? — preguntó Wooyoung confundido.
—Es que... Desde que tu llegaste... Bueno, desde que te conocí comenzé a sentir algo extraño, algo que nunca había sentido con nadie, y eso es hermoso, sentir el cosquilleo en mi estómago cada vez que dices mi nombre o cada vez que me sonríes — suspira y comienza a hablar mejor mientras el contrario sonreía y le seguía observando — Además, no solo eso... Gracias a tí y por estar siempre conmigo incluso cuando no te quería ni tener cerca — ambos rieron — has estado en mis pensamientos, he logrado dejar de tener pesadillas, o almenos no todos los días, he logrado relajarme más y sobre todo he logrado darme cuenta que el amor si existe, no en todas las personas, pero si en las que son destinadas para uno, te debo confesar que el día que te ví con aquella chica me dieron celos, por suerte era tu heramana o ubiera explotado— San nisiquiera sintió en que momento Wooyoung se había acercado más a él teniendolo ahora más cerca y enfrente suya — tarde mucho en darme cuenta de que te he hecho daño pero...
—¿No sería más fácil solo decir que te gusto? — bromeó Wooyoung riendo.
—Tienes razón — rió — En fin, me gustas mucho.
—Entonces... ¿Te gustaría ser mi novio? — pregunta Wooyoung felíz.
—No — responde San sin rodeos y sin sonreír, solo con un semblante triste.
—Pero... Tú dijiste que yo te gusto, y tú me gustas a mí.
—Lo sé, dije que me gustabas pero no que podíamos ser algo, yo no quiero arruinar tu vida Wooyoung, no quiero ser el chico al que todos miren y digan, "uy y ese chico fóbico es el novio del popular Jung Wooyoung" — Simuló su voz como si fuera otra persona.
—Pero no me importa lo que digan los demás.
—Pero no solo es lo que digan Wooyoung, tú tienes la oportunidad de conocer a mejores personas que yo, a alguien sano, alguien a quien puedas tocar y acariciar cuando quieras, pero yo no, yo soy una persona con una fobia al tacto, y no podrías ser felíz conmigo — Sin siquiera sentirlo una lágrima se había ya escapado de su ojo resbalando con lentitud por su mejílla.
—San... Si tú me gustas es por eso, porque no eres como los demás, porque eres diferente y eso te hace sobresaltar sobre todos, te daré el tiempo que sea necesario, te esperaré el tiempo que quieras porque si hay algo de lo que estoy seguro es que no quiero a nadie más en mi vida si no eres tú — Levantó su mano en forma de querer limpiar las lágrimas de San. San lo observó y al notarlo lloro más, lloro por que por más que quisiera el tacto de Wooyoung aún temía.
—Perdón, Wooyoung — Susurro limpiando sus lágrimas y sorbiendo su naríz.
—No tienes que pedirme perdón, no has hecho nada — negó leve y bajó su mano sonriendole.
San lo observó con atención al momento de verlo abrir sus labios en forma de hablar pero de ellos salieron el hermoso canto, su hermosa voz, aquella hermosa canción que reconocía con facilidad y sabía que era solo para él.
—Así, te pedí no cambies, así, te soñé a detalle, tus complejos para mi son el reflejo de lo más perfecto que conocí, así, te pedí, no quiero a nadie más — su voz salió dulce y suave como queriendo tranquilizar a San, cosa que consiguió, San ya no lloraba ni sollozaba, ahora sonreía y acompañaba a Wooyoung, una hermosa melodía de dos voces unidas.
— Así, te pedí no cambies, así, te soñé a detalle, tus complejos para mi son el reflejo de lo más perfecto que conocí, así, te pedí, no quiero a nadie más — ahora ambos habían hecho sonar sus voces deleitandose en ellos mismos, solo ellos dos en esa habitación, se sentían bien el poder estar así, libres de saber sus sentimientos, simplemente perfecto.
