Lazos Rotos (Kimetsu no Yaiba x lectora)

8. Aquella trágica noche...

—¿Qué es lo que sucede? Kokitsune... —En medio de aquel silencio, una suave voz se escuchó del lado contrario del tronco del árbol. Al escuchar aquellas palabras, el joven levanta su rostro para buscar al dueño de aquella voz y una vez que logró reconocer a aquella persona, una leve sorpresa apareció en su rostro.

—¿Akira-san? —murmuró confundido el joven al ver al joven parado del otro lado.

Esa persona llevaba un típico traje de shinobi completamente negro y sobre sus hombros llevaba un haori blanco con un peculiar estampado de mariposas plateadas y doradas al final de las orillas. Su tachi y funda estaba sujetada a su espalda con un pedazo de tela de color rojo mientras que en su cintura y sujeto por el obi, se encontraba una pequeña wakizashi.

Llevaba una máscara de zorro blanca que cubría la mayor parte de su rostro mientras que el resto de su cabeza y cabello se encontraba cubierto por largo pelo blanco, pero que levemente dejaban ver unos mechones de cabello rubio con las puntas de color rojo.

—No pasa nada, solo estoy un poco molesto... eso es todo... —respondió al intentar encontrar una razón para aquella sensación tan extraña que sentía en ese momento. El tan solo recordar el rostro de Rengoku una gran ira parecía despertar en su interior y de solo pensar que mañana (Y/N) volvería a depender de esa persona era más que suficiente como para hacer que perdiera la calma—. Simplemente no logro entenderlo... ¿Cómo es que Rengoku logró que ella se abriera tan rápidamente a él cuando a nosotros nos tomó años ganarnos su confianza?

—Porque (Y/N) simplemente no puede evitarlo, a sus ojos, Kyojuro Rengoku es la viva imagen del Rengoku con la que ella estuvo comprometida en el pasado... —contestó Akira fríamente mientras se sentaba sobre aquella rama y levantaba su cabeza para mirar hacia el oscuro cielo nocturno—. A pesar de que ella no debería tener ningún recuerdo de sus vidas pasadas cuando vuelve a renacer, es imposible borrar todos los sentimientos que ella una vez tuvo hacia esas personas. En circunstancias normales, eso realmente no es importante ya que siempre hay al menos 100 años de diferencia entre cada una de sus reencarnaciones pero las cosas son completamente diferentes cuando esas personas se convierten en demonios o cuando estas realmente se parecen demasiado.

La conversación parecía haber tomado un giro inesperado cuando Akira mencionó el tema de la reencarnación, pero sin importar lo raro que eso sonaba, el pequeño zorro no era capaz de desconfiar de aquellas palabras ya que el simple hecho de que él estuviera vivo en ese mismo instante era más que prueba suficiente para saber que los miembros del clan Shiranui no eran normales en lo absoluto.

—Aquella aura alrededor de Kyojuro, así como su determinación y su convicción son similares a las de aquel Rengoku... pero al mismo tiempo difieren... por eso mismo es que ella suele actuar de manera extraña cuando está cerca de él... y aún si ella no es capaz recordar su rostro o nombre, (Y/N) inconscientemente piensa que son la misma persona por lo que baja su guardia alrededor de él...

El joven volteó a mirar a Akira con total atención e interés en sus palabras. El shinobi en ese momento bajó su rostro y al mirar en dirección a donde estaba (Y/N), una sonrisa forzada se formó en sus labios lentamente. Kokitsune no pudo evitar preguntarse qué clase de expresión tendría Akira en ese momento o qué es lo que pasaba por su mente cada vez que hablaba sobre el pasado.

"Para saber tanto sobre el clan Shiranui... ¿Cuánto tiempo es que ha estado Akira-san sirviéndoles?" se preguntó antes de finalmente asentir levemente con su cabeza.

—Entonces... ¿habrá alguna forma de hacer que ella se aleje de él?

—La hay... supongo... basta con que le abras los ojos y le hagas ver que Kyojuro no es la misma persona de la que se enamoró en el pasado...