UNA CANCIÓN

CAPITULO 12

Medicine suena por todo el lugar, mientras me encargo de recoger todo lo que utilizamos, así como los regalos de las fans hacia los chicos. Al cabo de unos minutos de gritos, palabras y locura comienza a sonar Paycheck, la penúltima canción que van a tocar, así que me apresuro a recoger lo que falta y guardarlo en cajas, todo el equipo está disfrutando del concierto detrás de el escenario y por primera vez en todos los años en lo que han dados sus conciertos, no estoy ahí, viéndolos cantar y disfrutar de lo que aman hacer. Después del enfrentamiento de George con Tristan no volvieron a llamarme la atención, ni siquiera me dirigieron la palabra y cuando le dijeron a Estela que la necesitaban cerca del escenario fue la señal que necesite para entender que no me querían ahí.

Tomo uno de los cables y comienzo a enrredarlo para guardarlo en una caja, es lo último que me falta, así que comienzo a apilar los obsequios de las fans en cajas para llevarlas a las camionetas, es una suerte que Brad se haya ofrecido a llevarme a casa porque en la camioneta de Joshua no íbamos a caber con tantas cajas.

—¿Alguien llamo a refuerzos?— casi suelto las caja que sostenía, pero unas manos firmes me ayudan a evitar que caiga — Comienzo a creer que tu torpeza es parte de tu encanto.

—Brad deja a la señorita en paz y ayudemos a llevar todas estas cajas— James quita la caja de mis manos y me pide las llaves de la camioneta.— ¡Apresúrense señoritas, ayudemos a la princesa, para ir a cenar!— le grita al resto de la banda que amablemente comienzan a ayudarme con las cajas.

—¿Cómo estas?— Brad me atrae a su pecho para un abrazo y es lo que necesito para romperme.

—Bien— apenas puedo decir cuando mi cuerpo comienza a sacudirse en pequeños espasmos y lagrimas calientes que mojan su camisa negra.

—Ally... Lo siento— me estrecha más en sus brazos mientras me estremezco. Sabe que durante este tiempo estuve reprimiendo y su abrazo fue el detonante para hacerme explotar.

—No se que pasa Brad— sollozo y lo abrazo con fuerza — Ellos nunca me habían tratado así, no se que hice mal.

—No hiciste nada mal princesa— escucho las voces de James y Connor acercarse. Intento alejarme de Brad pero no me lo permite— esta bien Ally, solo son los chicos.

—Tengo que seguir guardando esto, ellos van a molestarse si no llevo todo a la camioneta— me separo Brad y cuando volteo Tristan se está llevando la ultima caja.

—The Vamps al rescate— dice James antes de tirar de mi para abrazarme. No puedo evitar soltar más sollozos— Vamos Ally, el trabajo está hecho. Connor invita la cena

—¡Oye, yo nunca dije eso!— el teñido se queja.

—Ally está triste, debes invitar la cena tacaño— dice James sin soltarme, haciéndome reír entre lágrimas.

—Eso es un chantaje, pero no puedo negarme si eso hace feliz a la princesa— me separo de Connor viendo a Tristan acercarse mientras silva.

—¿Qué le hicieron salvajes?— frunce el ceño cuando me ve, seguramente tengo los ojos irritados.

—No fueron ellos, yo solo... — me detengo cuando los gritos de las fans son más eufóricos, volteo y veo al trío aparecer con las mejillas sonrojadas, sudados y agitados. Regreso mi vista hacia Tristan y asiente entendiendo a que se deben mis lagrimas.—Yo invito la cena— digo con la voz aun afectada por las lágrimas, pero intento sonreír.

—¡De ninguna manera!— interviene Connor—¡Bradley invita!— alza las manos victorioso, mientras el ruloso frunce el ceño.

—Creí que James iba a invitar la cena— se queja.