𝐈 𝐍𝐄𝐄𝐃 𝐔 ━ nosaka yuuma ¡Editando!

VII

ES TAN CORTO EL AMOR Y TAN LARGO EL OLVIDO.

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Dolor por algo
que no puede ser y un beso

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CAPÍTULO 7.

—UN SILENCIO VAGANDO EN ESAS BLANCAS PAREDES DE ESA HABITACIÓN, y sólo asfixiando a una sola persona, otras dos mirando ese espectáculo sin entender nada y otra más feliz por conseguir a alguien que significó alguien muy importante en su vida.

Lástima que esa persona estaba en esos momentos confundido, y aún peor, su destino ya no era con esa oji-azul.

El destino ya había tirado las cartas en la mesa y había decidido quién iba a estar en la vida de quién, desgraciadamente a Nosaka no le tocaba con esa chica, –ya convertida en mujer–, que volvía a ver después de tanto tiempo.

—¿Quién eres tú? —preguntó la chica de cabellos extraños viendo al chico que se encontraba en silla de ruedas, no entendía nada, no sabía quién era la chica que decía ser su prima lejana y tampoco al chico que estaba con ellas, desconocía del como era posible que estuviera en un hospital y odiaba no conocerlos.

Por un momento pensó que sería bueno darse un fuerte cabezazo con la cama para ver si volvía su memoria, pero estaba segura que eso no funcionaría. Pero por lo menos quería intentarlo.

—¿Y-yo? Bueno..—tartamudeo el chico prestándole atención a ella. Cuando la vió sintió como si está clavaba dagas en él, la chica se mostraba con un semblante entre molesto y a la vez triste, y por esos segundos quiso con todo su ser estar cerca de ella, abrazarla, o por lo menos darle consuelo.

Sacudió un poco su cabeza eliminando rastros de ese pensamiento estúpido, no sabía porque había pensando aquello que hasta sonaba tan absurdo.

No la conocía, o bueno.. Si la conoció algunas veces cuando tropezaban, y también por lo del incendio, pero del resto nada, no sabía de su vida y eso no significaba que ella iba a contárselo, y menos en esas condiciones. Se notaba desde lejos que a la chica de cabellos extraños no le agradaba su presencia.

—Pues yo...

—¿Qué hace este idiota aquí? —los tres presentes al escuchar el tono de voz de la chica se sorprendieron. ¿Era bueno que respondiera así? Absolutamente no.

—¡Heléne!—reprochó la oji-azul.

—¿Eres mi prima lejana no? —preguntó a la oji-azul. Esta un poco nerviosa por la actitud de la otra asintió lentamente. —Pues échalo, no quiero a nadie en la habitación. Y eso te incluye a ti también. —Estaba molesta.

—Pero Heléne..—Intentó Anna.

—Largo. —habló en voz alta.

La chica no le quedó más remedio que suspirar negando con su cabeza.

Desde que la conocía sabía que la chica era una persona con un carácter difícil, no tenía amigos y era antisocial.

O bueno.. eso recordaba cuando la conoció por primera vez, era imposible ser su amiga.

A paso lento susurró a la mujer que traía consigo a Nosaka que mejor era salir de aquella habitación.