Raven y Starfire estaban en la sala de descanso usada mayormente por todos los titanes excepto por Robin.
Ambas tenían un jugo de naranja el de Raven ya estaba a la mitad, mientras que el de Starfire estaba intacto.
A Raven ya le estaba cansando esa situación, ella sabía lo difícil que era decir la verdad, pero quería saber que es lo que pensaba exactamente Starfire acerca de todo ese asunto.
- Bien, he tratado de ser paciente - hablo irritada, mientras Starfire dirigía sus atención a ella - ¿me lo dirás o piensas guardarlo hasta que sea obvio?
- ¿De qué hablas? - Raven resoplo molesta al ver la cara de confusión de su única amiga.
- El otro día me tocó tirar la basura, algo que normalmente hago rápido y seguro, pero esta vez fue diferente ya que un extraño paquete de color amarillo llamó mi atención, era una prueba de embarazo.
- No tengo idea de que estas..
- En este edificio viven 5 personas, las cuales sólo 4 entran a esta sala, si es que Cyborg no empezó a hacerse pruebas de fecundación o chico bestia hizo alguna estupidez con su cuerpo, sólo quedarían 2 opciones, y yo no tengo ninguna clase de actividad extraña con mi cuerpo.
- Yo tampoco las tengo - Starfire parecía aterrada y confundida al mismo tiempo - Ya no más.
- Entonces tendré que preguntarle a Cyborg - Raven se paro inmediatamente y Starfire la miró aterrada - y si el no sabe nada, me imagino que tendremos que hacerle una prueba física a Chico bestia.
- ¡No!, no le digas a Cyborg, por favor creo que el sospecha... - Tras esa confesión la chica Tamareana se llevó ambas manos a la boca, como si fuera posible evitar decir la verdad.
Por vergüenza, ya que había mentido, se tapó la cara.
- Me imagino que salió positivo - Raven volvió a sentarse a su lado. Y espero paciente una respuesta que no llegó - Starfire confía en mi - la paciencia se le estaba acabando.
La pelirroja se quito ambas manos de la cara para mostrar unos ojos llorosos.
- ¿ Es algo malo? - Raven no entendía muy bien que digamos a la chica - Creí que los niños te gustaban.
- Estoy feliz - dijo sincera mientras una lágrima caía - pero...
Raven decidió esta vez si esperar su respuesta.
- No sé que hacer - y más lágrimas empezaron a caer.
Por instinto Raven la atrajo hacia ella y decidió tratar de consolarla.
- Shh - no era buena en esto para nada - Star cálmate, estoy aquí ok, no te voy a dejar.
- Él ya me dejó - Raven pensó lo peor de su amigo en ese momento.
- ¿Robin lo sabe?.
-No, tuve síntomas después del mes que nos separamos.
- Eso fue en Octubre - Starfire solo asintió - Starfire eso fue hace tres meses.
- Si bueno el cuerpo de los Tamaraneanos es diferente para estos casos, mientras que los humanos están en el vientre de sus madres 9 meses, en mi cuerpo estará 12 meses y su crecimiento será faltando 5 meses.
- Tienes que decirles.
Su conversación se detuvo ya que la alarma de alerta sonó. Mientras iban hacia la sala para unirse al equipo Satrfire se metió en su camino.
- No puedes decirles.
-¿ Piensas que no lo notará con el tiempo?
-Sé que lo hará, pero también no puedo obligarlo a estar conmigo - Raven quiso darle un golpe por pensar de esa manera.
Quizás lo hubiera hecho si Chico Bestia no se aparecía en se instante.
-¿ Sucede algo? - preguntó la pelijorra al ver la cara de su amigo.
- Algo muy malo - dijo completamente serio, lo que realmente asustó, preocupo a Raven.
...
Decidí actualizar los viernes, solo que mañana estaré ocupada y bueno decidí adelantarme.
Lo del embarazo Tamareano es de mi completa imaginación. No me base en nada más que en el desarrollo de la historia para crearlo.
Gracias a los que leen la historia. Me anima mucho.