Más allá de la novela

Castigo (Lan XiChen x Jiang Cheng. Parte dos. Explícito)

Advertencia:
El mismo título dice de que va el capítulo, se recomienda discreción.
Esta es una continuación de "Castigo" y tiene pequeñas referencias al capítulo "Invitación". Es necesario que los lea para entender cómo se llegó a esta situación, sobre todo el capítulo "castigo". 
Créditos de la portada: Mei_woojin
Dicho esto, disfrute la lectura.

Lan XiChen tomó una de las rodillas del líder Jiang Cheng y la levantó, de manera que su muslo quedara sobre su pecho, exhibiendo más esa cálida entrada rosa que tentaba a ser invadida.

-Jiang Cheng...-susurró Lan XiChen. No podía esperar más, así que lo invadió con uno de esos dedos húmedos.

-¡Ngh!- protestó el líder de Yunmeng, apretó los dientes con fuerza y cerró los ojos. Estaba lleno de furia. Nunca pensó que alguien podría humillarlo de esta manera.

Lan XiChen sintió un poco de lástima y pensó en detenerse, pero esa voz en su interior insistió en continuar.

¿? "Continúa, no tendrás otra oportunidad...disfrútalo y hazlo sentir bien. Permítete sentirte bien"

Esa voz era como un hechizo. Obedeció.

Aunque Lan XiChen siempre ha sido un caballero de alta etiqueta y educación, no era diferente a los carnívoros cuando se trataba de deseo y sexo. No era tan diferente a su hermano Lan Zhan.

Pellizcó la barbilla de Jiang Cheng y giró su rostro para encontrarse con esos ojos amatistas que parecían estar en llamas.

-Lo siento...- Lan XiChen se disculpó con sinceridad mientras su segundo dedo entraba.

¿Realmente lo sentía?

-Ugh...- Jiang Cheng arqueó su espalda, la sensación era desagradable –tú...si realmente lo sientes, no sigas- su voz estaba llena de resentimiento y enojo.

-...no puedo- sonrió –nunca tendré otra oportunidad como esta- el movimiento de sus dedos fue cambiando según sintiera la suave carne, de adelante hacia atrás, abriendo y cerrando en forma de "v", palpando aquí y allá –dime dónde te haga cosquillas- siguió moviendo sus dedos con insistencia, buscando algo dentro.

-...- el líder de Yunmeng tenía los dientes tan apretados que casi podían hacer sangrar sus encías. Estaba temblando, no de miedo, no por placer, ni por el dolor de ser invadido, sino por la gran humillación que estaba sufriendo.

Antes de que Jiang Cheng pudiera abrir su boca para insultar a Lan XiChen...

-Aaaah...- soltó un pequeño gemido ahogado, abrió sus ojos de par en par sorprendido por su propio sonido -...- algo dentro de él había sido estimulado, incluso su cintura pareció entumecerse por un breve momento.

-Aquí...- susurró Lan XiChen, su sonrisa amable estaba mezclada con un brillo lujurioso. Sin perder tiempo, sus dos delgados dedos empezaron a palpar y estimular ese punto que provocó que la persona bajo él gimiera.

-¡Ah!- A-Cheng estaba atónito, mordió sus labios para no soltar sonidos mientras era atormentado. Sentía que los dedos de sus pies se abrían y cerraban con cada movimiento de XiChen.

-¿Se siente bien?- preguntó el líder de Gusu, sonriendo. Realmente parecía estar disfrutándolo y sobre todo, parecía estar feliz.

Si bien, Jiang Cheng vio a Lan XiChen relajarse cuando fue al muelle de loto y lo había visto sonreír innumerables veces cuando conversaban, nunca lo había visto realmente feliz hasta ahora. Sus ojos azules como el cristal habían adquirido cierto brillo, ya no estaban tan opacos como antes.