Conociendose II

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Los días pasaban, la química era inevitable aunque ellos no lo notaban tanto. Seguían con su rutina diaria y sus escapes por café donde todo era solo entre ellos. Aunque el mundo afuera explotara.

Entre risas y cuchicheos hablaban de todo. Era fácil ir de un tema al otro y nunca perder el hilo. Había mucha afinidad. Alberto sonreía y ella se sonrojaba de todo, eran el dúo perfecto como amigos.

Ella llevaba una vida rápida, salía todos los días, fiestas tras fiestas. Personas entran y salen de su vida y ella como si nada. Su vida con Erick era un tanto difícil, él era de fiestas y algo más, ella solo era diversión sana y tratar de encajar entre mundo distintos y países desconocidos.

Conoció varias nacionalidades, hizo amigos y conocidos mientras el transcurrir del tiempo. Una mañana, su tutor a cargo del departamento del campo supervisado donde le tocó ese momento, le ofrece trabajo fijo en la empresa por su excelente desempeño en cada una de las tareas realizadas. Arienay no se lo cree, está contenta pero también muerta de miedo. Lo que sería un amor de 3 meses con Eric podría extenderse un tiempo más.

Le comenta a su familia lo ocurrido, todos están felices pues saben que ella es excelente y aplicada en lo que se propone, bien portada, educada y con principios, pocas chicas como ella.

Decide quedarse en la empresa y conocer más sobre su carrera, los medios y las posibilidades de crecer. Decide darle la buena noticia a Alberto, pero esta vez va ella a su oficina, nada de textos ni llamadas.
— Hola!! 😊
Adivina? Tengo una buena noticia que darte!! - Mientras se queda en la puerta sin pasar.
— Hola Belleza!! Pasa y cuéntame porque andamos tan feliz?!
— Me ofrecieron quedarme, y después de mi familia eres el primero a quien se lo cuento.
— Felicidades! En hora buena!
Ya podremos tomar café todos días, sin tener que preguntarte cuando te vas? - Le dice con una sonrisa pícara.
— Si, estoy contenta!!
Ya podré beber café sin esperar a que ese sea el ultimo, así como podré verte más a menudo. -Mientras deja escapar una sonrisa.

Se quedan unos 5 minutos platicando, cuando de repente ella le dice que toca irse a la oficina para que no le pregunten donde estaba?! Se despiden por un rato y cada cual vuelve a lo suyo mientras toque terminar sus turnos.

Cada día era algo nuevo y excitante para ella, realizar nuevas tareas, liderar con nuevos retos. Eso le encantaba, sabía que podía con todo.
Las responsabilidades fueron creciendo al pasar de los meses, pero ella cada vez más puesta en lo que hacía. Sentía que se comía el mundo en esos momentos. Todo iba bien, tenía amigas, conocidos, fiestas por la moches y resacas en las mañanas.

Amor de Una Noche y Toda la Vida!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora