¿Qué harías si el amor de tu vida desaparece de un día para otro? Sin dar alguna explicación de lo que sucedió.
Eso mismo se preguntaba J-Hope, al ver como el amor de su vida se fue de su lado sin darle algún motivo para poder dejarla irse.
Tal vez...
Sentía que el tiempo para mi se había detenido de nuevo, tenia a J-hope en mis pensamientos constantemente, no me podía olvidar de aquel día, aquel maldito día.
-Jade ¿Estas bien? -la voz de Alice me saco de mis pensamientos.
-¿He? A...si, si, estoy bien - sonreí evitando dar a conocer mi preocupación.
-Ya tienes varias semanas muy rara, bueno, desde que escogimos bailar We are Bulletboof -se sentó alado de mi y solo le regale una sonrisa.
-Estoy bien, solo que estoy algo cansada, esa canción es muy pesada -trate de aparentar y no mostrar mi verdadera preocupación.
-¿Pesada? -levanto una ceja- Jade Park ¿Desde cuando se te hace pesada una coreografía? -su mirada se volvió algo fría y pesada- dime la verdad ¿Qué está pasando?
Trate de tragar saliva pero no podía sacar a J-Hope de mis pensamientos, pero tampoco podía decirle a Alice que es lo que me pasaba.
-Si te dijera la verdad no lo creerías -abrace mis piernas.
-Solo dilo Jade, siempre te voy a creer, no importa que tan loca este la idea -la mire seria y suspire.
-Deje salir una pequeña risa de nervios y la mire seria- No lo entenderías.
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-solo dime qué no quieres hablar sobre eso y te dejo en paz ¿O acaso es que no me tienes confianza? -sabía dar en el clavo.
-No es solo, solo que es demasiado complicado.
-¿Son temas de romance quizá? - se pego más a mi, esperando a que hablara y le contará algo, pero no quería, sabía que no debía, no por ella, si no por mi. Sin embargo quizá hablar con alguien sobre ello me ayudaría a sacarlo de mi cabeza pero no debía.
Suspire y la mire nuevamente, sabía que si le contaba había un cincuenta por ciento de posibilidades de que me tomara esa historia en mi contra y había otro cincuenta por ciento que me crea.
-Si te lo digo tendrás que prometerme que nunca se lo contaras a nadie - la mire seria y directo a los ojos.
-Lo prometo, lo prometo, pero dime, nunca te haz comportado así -me tomo de las manos.
-Lo que pasa es que soy aquella chica que le... - no pude terminar de decirle porque en ese momento llego Camille, sabía que aunque fueran mis mejores amigas no podían decirles la verdad sobre J-Hope.
-Hola Camille, perdón ¿Qué decías Jade?
-Eh... Yo... - tome aire y mire a Camille, no confiaba en ella.
-Alcance a escuchar un poco ¿Qué eres la chica de que? -pregunto mientras se acercaba a nosotras aún más.
Comencé a sudar por los nervios, verlas cuestionarme y tratando de hacerme hablar, y dije lo primero que se me vino a la mente.
