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Éramos Ruby, Diana, Tillie, Jane, Anne y yo sentadas sobre el piso de una de las habitaciones de la casa de Anne. Todas hablábamos sobre nuestros labios y sobre besar a alguien. Ruby preguntó si Prissy y el Sr Phillips ya se habían besado, por lo cual Jane respondió que no, pero que sucedería pronto y todas reímos. Diana se preocupó porque no sabía que debía hacer cuando la besasen por primera vez entonces Anne, con su enorme imaginación, hizo que ella bese a Tillie (en las mejillas) mientras interpretaban una historia. Cuando terminaron, una pregunta rondó por mis pensamientos y decidí hacérsela a las chicas.

-¿Por qué la chica debe esperar al chico?- ellas me regañaron -Si quisiera besar a un chico, ¿no podría besarlo y ya?- pero ellas seguían en desacuerdo conmigo.

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Gilbert:

Estaba observando el mar... me transmitía mucha tranquilidad luego de haber tomado mi decisión.

-Qué vista. Me gusta nuestro cambio de planes, doc. -apareció Bash a mi lado. Si, me llamó doc porque había decidido que quería estudiar medicina luego de que ayude a una mujer con su parto, larga historia. -Canadá. Estoy emocionado por ir-.

-Eres audaz al venir a este nivel de la cubierta- le dije -Si el fogonero sabe que subiste, vas a tener problemas- ese hombre no le agradaba para nada mi amigo y no quería que el tuviese problemas.

-Puedo aguantar eso. Quiero ver adónde voy, para variar- solté una risita -Sentir el viento en la cara. Avonlea me espera- respondió Bash.
-Diez años en este barco cargando carbón. Me gané esto- continuó -Además, ¿qué van a hacer? ¿Echarme? ¿Tirarme por la borda?- ambos reímos -En el peor de los casos, me dan la letrina-.

-Me arriesgaría con el Atlántico, si debiera elegir entre eso y la letrina- hablé.

-Elegir... Me gusta esa palabra- dijo Bash con esperanza en su voz -Las cosas van a cambiar a partir de ahora-

-Si-...

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Juliette:

Llegué junto a las chicas a la escuela y mientras reíamos, colocamos nuestros frascos con leche en el arroyo. De repente sentí que alguien levantaba la parte trasera de mi pollera y pegué un grito, al igual que las chicas.

-¡Bombachos! ¡Calzones!- era el cretino de Billy junto a dos de sus amigos.

-¡No nos toquen!- les grité súper enojada.

-No les prestes atención. Los chicos son así- me dijo Diana -Les encanta atormentarnos-.

-Si me importa. Me importa mucho- le respondí ya que me sentía súper incómoda.

-Una falda no es una invitación- gritó esta vez Anne. Los chicos rieron como si esto no les importase.

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Una vez que terminaron las clases del día, Josie nos obligó a todos que nos quedásemos para jugar al juego de la botella.
Todos estábamos sentados en una ronda, mi hermano Harry estaba a mi lado y del otro tenía a mi amigo Cole.

-Pueden besar a la persona a la que apunte la botella- decía Josie -Debe ser chico, chica, chico, chica-.

-¿Donde está Cole?- preguntó Billy y yo rodé mis ojos.

~La Melodía Perfecta~ (Gilbert Blythe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora