Me he convertido en ti

Capítulo 4

Un año después

Hellen

Estudio su postura, afianzando mis pies sobre el suelo y empuñando con fuerza el mango de la espada. Jahan sonríe, seguro de que podrá derrotarme. Eso esta por verse.

Tomando impulso me adelanto una fracción antes que él lo haga, no espero tomarlo por sorpresa, si lo hiciera no sería uno de los caballeros oscuros. Él espera sin moverse que acorte la distancia, así que giro asegurándome de dejarle ver el movimiento que deseo hacer y que no ejecutare. Las hojas de las espadas se encuentran dejando escapar un sonido pesado que ignoro. Doy un salto atrás, fingiendo poner distancia, pero tal como predije, Jahan viene detrás de mí y aprovechando el impulso de su cuerpo y la fuerza de sus brazos, voy al encuentro.

El impacto sacude mis manos, pero no importa, su arma escapa de sus manos y la punta de mi espada va a su garganta. Es un movimiento no tan sencillo de ejecutar, pero bastante efectivo. Nadie esperaría que utilices su propio impulso para arrebatarle su espada.

¡Lo hice!

―Gane ―susurro permitiéndome una ligera sonrisa, dando un paso atrás y bajando la espada.

―Maldición. ¡¿Cómo demonios...?!

―Cuidado con tus palabras. ―Vader le da un golpe en la cabeza, que lo hace quejarse y gritar, pero me dedica una sonrisa―. Buen trabajo, príncipe. Ha perfeccionado ese movimiento y no solo eso, su velocidad a aumentado desde la última vez que enfrentó a Riyan.

No puedo evitar sonrojarme, aunque rápidamente me recuerdo que no soy una chica que debería avergonzarse con los elogios de un hombre como él. Además, Viran no lo haría, se pavonearía.

―Es bueno saberlo, aunque aun no puedo alcanzarte. ―Ser tan bueno como lo es ahora Vader es mi meta.

Le entrego la espada a uno de los caballos y salgo del espacio de entrenamiento.

―Es posible que no demore mucho en hacerlo.

―Eso es cierto, a mí me pateó el trasero, pero no tanto como a Jahan.

―¿Qué demonios estás diciendo, Riyan?

Mientras escucho su pelea y sonrío de su actitud relajada, pienso en todo lo que ha cambiado en el último año, desde que me convertí en Viran.

Comenzando por mi relación con ellos. Viran nunca los vio como camaradas o compañeros, siempre pedía lo trataran con extremo respeto y nunca lo vi agradecer por su cuidado. Llevo algo de tiempo, pero ahora puedo asegurar que no simplemente el príncipe y una carga para ellos.

El sonido metálico de las espadas chocando se ha vuelto tan familiar. He dejado de estremecerme o cerrar los ojos cuando viene hacia mí. También he dejado de temer cuando alguien más se enfrenta. Todo eso fue vergonzoso en los primeros entrenamientos, por fortuna, Viran era similar en ese aspecto y nadie se sorprendió de mis ataques.

Mis clases para la sucesión han avanzado sin problemas, al grado que los tutores aseguran que he conseguido avanzar lo que Viran no consiguió en 3 años. Algo bueno de él y que parece ser una de las cosas que conservo de su personalidad, es su excelente memoria, lo que ha facilitado el aprendizaje. ¿Por qué no hizo uso de ella para buenas cosas? Recuerdo que su memoria la utilizaba para grabar los nombres de mujeres hermosas o de familias que organizaban buenas fiestas.

También mi aspecto ha cambiado. Soy más alto y fuerte, los entrenamientos me han hecho ganar un poco de complexión. Y lo mejor de todo, ahora soy capaz de manejar la espada. Son pequeños logros que han requerido un enorme esfuerzo, contaba con la fuerza, pero no lo habilidad.