Las cosas han cambiado; las manecillas del reloj pesan menos sobre mi espalda, los cigarros arden menos en mi pecho y la cajetilla deja de sentirse tan liviana, y las noches me incitan menos a quebrarme en lágrimas.
Desde la ultima vez que te vi, me he torturado cada vez menos, las canciones lastiman un poco menos, mi almohada es un poco menos incomoda.
Pero aun estás presente. Aun pierdes tiempo rondando entre mis recuerdos, aun están tus fotos burlándose en mi cara, aun está el sabor de tus labios cada que muerdo los míos, aun está la nota en mi escritorio recordándome lo feliz que me sentí a tu lado, aun está esa presión en mi pecho cada que miro ese punto verde en nuestro chat esperanzándome a recibir un "hola" de tu parte.
¿Pero sabes qué?, déjalo así; es más, llévate todo. Llévate el perfume que dejaste en todas mis sudaderas, llévate las lagrimas que tire cuando no estabas conmigo, llévate las risas que provocaron tus cosquillas, llévate las horas de platicas, llévate la tensión sexual que nunca pudimos desahogar, llévate cada foto que nos tomamos, llévate cada recuerdo, cada sentimiento.
Es tu turno de sufrirlo, yo ya no puedo más con esto. Ahora ya me dueles un poco menos que antes, solo te pido, llévate lo que me hace quererte todavía.
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Escribiendo con los dedos frios
CasualeEsta es una recopilación de una serie de escritos con el mero fin de desahogar pensamientos y emociones. No hay prologo, no hay personajes, no hay capítulos. No son más que mis ideales, sentimientos, miedos, alegrías, sueños, metas, traumas y trast...