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Me disponía a mirar todo el ambiente y las calles floreadas de Corea. Llegué teniendo a la primavera a mi merced. Reiteradas veces apoyaba mi brazo en la ventana para presenciar la cálida brisa de los lugares pacíficos y rodeados de muchos árboles. Me acomodaba mis anteojos por la molestia del sol que daba perfectamente en el ángulo a mi cara, por lo que bajaba constantemente el parasol.
En efecto, la que estaba manejando era yo en mi auto nuevo color negro. Retomé las palabras de Taehyung cuando me dijo que sería mejor comprarme uno que pedirles a cientos de taxistas día a día. Así que me fui a aprender algunas cosas específicas sobre el manejo al conducir y en unos 5 días ya tenía licencia con esta belleza de auto.
A medida que iba avanzando en las calles mas transitadas de Seúl y me adentraba a esas interminables filas de vehículos con sus dueños apresurados a llegar a su destino, miraba a mi GPS porque aún no sabía con exactitud en dónde se encontraba mi casa. El aparato me aclaró que faltarían unos ocho minutos en llegar. Eso sin contar lo que me tardaria en salirme de este boche de vehículos llenando la calle.

Cuando finalmente salí de ese tránsito pesado, me tomaron sólo unos pocos minutos en llegar a mi paradero definitivo. Me estacioné enfrente de mi casa y al salir presioné el botón del maletero del auto para bajar todo mi equipaje. Eran cuatro sin contar mi mochila porque se me vio necesario comprar algunas cosas provenientes de mi país natal. Es obvio que esas comidas no las vas a encontrar nunca por acá.
Quise sonar silenciosa en cada cosa que hacía, más con el auto que hace un tremendo ruido al apagar su motor. Eso es porque me vine un poco antes de los dos meses que anuncié, es porque quise hacer sorpresa mi llegada. La primera en enterarse sería Yon. Después de desempacar todo iré a su casa a saludarla.

Mientras tanto...

Bajé una por una las cuatro maletas del maletero y de la misma manera las fui llevando hasta la puerta. Me tomé un instante para respirar y buscar en mi mochila la llave para abrir la puerta. Tardé un poco ya que se encontraba dispersa entre tantas cosas al fondo.
Introduje la llave en el ojo de la puerta y entré dejando la mochila a un lado en el piso para encargarme de meter las maletas.

De pronto un grito se escuchó.

¡¿Pero qué carajos...?!

─ Yon, ¿eres tú? Porque si es así, te daré una paliza por el susto.

Avancé lentamente con mis puños cerrados a la defensiva, no había recibido respuesta y eso me inquietaba.

Llegué a la sala, todo lo que podía ver eran unas cuantas cosas reflejadas por la luz que dejaban entrar las ventanas. Me daba miedo mirar al pasillo, porque era largo y oscuro, como esas escenas de películas de terror que aparecen cosas extrañas en el fondo.
Pero al girarme para ver el lado de la cocina, veo una figura poco visible al frente del horno.
La veo voltearse.

─ ¿M-mar? ¡¿Mar, eres tú?!

Corrí hacia ella.

Le di un golpe en su brazo.

─ ¡Au! Ey, ¿eso por qué?

─ He dicho que si eras tú, te pegaría por el susto del grito que pegaste. Agradece que no fue una paliza realmente─ tomé una bocanada de aire─ ¿Qué pasó? Porque veo que no te diste cuenta que llegué.

─ Sí, soy un poco descuidada. Pero es que estaba cocinando un poco de ramen instantáneo porque tenía hambre ya que no desayuné en la mañana y mi abuela aún dormía. Así que se me ocurrió venir un ratito a cocinar el ramen que compré hace poco, pero mientras lo hacía, me quemé con la olla y tuve que ponerme este trapo húmedo que acabé de mojar.

Suspiré por el cansancio.

─ ¿No podías haber cocinado en tu casa, que era prácticamente lo mismo?

─ Te dije que mi abuela estaba durmiendo, e ir a la cocina, prender la ornalla y después preparar las cosas... iban a hacer mucho ruido. ¿Cuántas veces debo decirte que mi abuela no es una cualquiera?

─ De a poco, Yon, de a poco. Hubieses dicho que te quemaste cocinando porque me andabas extrañandl y ya.

─ No es así─ frunció el ceño, haciéndola parecer enojada─ Y lo lamento, pero es que el hambre no me deja pensar y hablo como loro, y... ¡AH!─ hizo el mismo grito que antes.

─ ¿Te duele mucho?

─ No, no. Es que... ¡¿Cómo no me vas a avisar que llegarías en estas fechas?! ¿Por qué no me dijiste que venías antes, ah? Habían noches que las pasaba aquí porque te extrañaba y la casa ya tiene una esencia a ti que... llega a asustar.

Hablaba tan rápido que apenas pude escuchar las últimas palabras. Mi cabeza cansada no me dejaba pensar en estos momentos.

─ Yon, ¿sabes? Hoy fue un día muy agotador; tuve que manejar muchos kilómetros después de lle-

─ ¿Manejar? ¿Ma...nejar? ¡¿Tienes un auto?!─ sacó el trapo que tenía envuelto en su mano quemada y lo puso por encima de la mesada─ ¿Pero cómo si es que tenías que ir y venir por avión ya que tu país queda a, literalmente, otro lado del mundo?

Vaya manera de llegada...


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hola gentee! finalmente... ¡la segunda temporada de famous luv! quise hacer corta esta parte para introducción nada más, después se verá el desarrollo a lo largo de la lectura.
normalmente no van a haber palabras mías al final de los capítulos, así que dont worry.
y sí, la portada va a ser una kk hasta que me tome el tiempo de hacer una.

espero que esta segunda parte sea de su agrado. <3

famous luv 2 [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora