Capítulo 5

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Una noche cualquiera como cualquiera, Jungkook se encontraba recostado sobre las piernas de su mayor mirando la televisión. El mayor acariciaba con total suavidad su cabello azabache, mientras leía uno de esos tantos libros que se hallaban en su biblioteca. Con sus quince años Jungkook estaba bastante alto, su cuerpo comenzaba a tonificarse debido a los constantes ejercicios que el menor hacia y su lindo rostro comenzaba a presentar cambios, pero ante los ojos de su Hyung, él seguía siendo un lindo y tierno bebé. Por más que creciera, Jungkook seguía siendo igual de mimado por Taehyung.

-Hyung -lo llamó sin despegar su mirada de la televisión.

-¿Mhm?

-Estoy aburrido.

-¿Y qué quieres que haga?

-No lo sé. -Se acomodó boca arriba para mirarlo directamente.- Pero me aburro, Hyung -se quejó una vez más, abultando sus labios en un tierno puchero.

Taehyung despegó sus ojos del libro y bajó su mirada par verlo por unos cuantos segundos, para después suspirar ligeramente. ¿Por qué ese niño siempre lo podía convencer con una simple mirada?

-Bien. Levántate y ve a buscar un abrigo.

-¿Para qué?

-Hyung va a mostrarte algo muy bonito.

Jungkook un poco confundido y un poco curioso se levantó del sofá, caminó hasta las escaleras y subió al segundo piso para luego ir hasta su habitación, donde se acercó a su armario para buscar su campera. Una vez listo, corrió nuevamente al primer piso, donde su Hyung se encontraba esperándolo junto a la puerta que daba al patio trasero.

-¿Vamos a salir? -Taehyung asintió.

Salieron de la casa al patio trasero, en ese lugar sus vecinos no podrían verlos, pues ahí había una gran cantidad de árboles que rodeaban la mansión y hacia imposible que algún chismoso pudiese ver al interior. Era un punto ciego de la casa. Ahí Taehyung podía ser quien era sin tener que preocuparse por que alguno de sus vecinos lo viera.

-Ven, Kookie, súbete a mi espalda -dicho esto, se volteó.

Jungkook, como niño obediente, se acercó a su mayor y se subió encima de su espalda. Cuando estuvo bien aferrado a su mayor, Taehyung dejó desplegar sus alas, las cuales se asemejaban a las de los murciélagos.

El menor al verlas quedó impresionado, era la primera vez en toda su vida que veía esas alas sobresalir de la espalda de Taehyung.

De un momento a otro, las alas comenzaron a agitarse, haciendo que ambos se despegasen del suelo. Jungkook por miedo se sostuvo con más fuerza al cuerpo del mayor y este soltó una pequeña risita. Generalmente Jungkook se mostraba serio y sin miedo a nada, era divertido verlo de esa manera.

De a poco fueron elevándose cientos de metros en el cielo. La temperatura parecía ser más fría cuanto más arriba llegaban.

Jungkook admiró con fascinación aquel hermoso panorama ante sus ojos. El cielo oscuro, con tonalidades negras azules. Las estrellas parecían brillar aún más que cuando en tierra permanecía. Las nubes parecían más transparentes, desde abajo parecían ser más sólidas a como realmente eran.

El viento golpeaba como una suave brisa en el rostro del menor, una sonrisa se dejó ver en sus labios, esa sonrisa que Taehyung amaba tanto, pues lo hacía ver como un tierno conejito.

Jungkook no podía describir lo hermoso que era aquella experiencia. Estiró una de sus manos hacia arriba, sabía que para tocar una estrella eran miles de kilómetros de distancia, pero él se sentía tan cerca de ellas en ese momento, se sentía tan cerca de aquello que los humanos describían como cielo o paraíso.

Taehyung lo miró, el lindo rostro de su pequeño era iluminado por la hermosa luz de luna, este aún mantenía su brazo y mirada hacia arriba como si quiera alcanzar algo. Podía jurar que esa hermosa sonrisa iluminaba aún más el cielo nocturno de lo que la luna lo hacía. Daría todo de sí mismo para poder mantener esa sonrisa.

Cuando Taehyung sintió la necesidad de descansar, se posaron en la copa más alta de uno de los grandes pinos que en el bosque se encontraban. Taehyung se mantenía parado, sosteniéndose con una mano de lo que sería el final del tronco de aquel árbol y la otra mano se mantenía acariciando la espalda del menor mientras este lo abrazaba por la cintura y su cabeza reposaba en el pecho de su Hyung admirando la luna.

-Hyung... esto es hermoso -dijo con una pequeña sonrisa.

-Lo sé, Jungkookie, la vista que se obtiene desde tan altas alturas no todos pueden apreciarlas.

-Hyung, ¿puedo darle un regalo de agradecimiento por mostrarme una de las cosas más hermosas que podré ver en mi vida? -preguntó con timidez.

-Kookie, no es necesario.

-Por favor, Hyung... acéptelo. -El mayor suspiró.

-Está bien, Kookie, lo aceptaré.

Jungkook se separó ligeramente de él, levantó su cabeza y lo miró a los ojos. Taehyung pudo notar que las mejillas del menor adoptaban un tono rosaseo, aunque no estaba cien por ciento seguro debido a la escasa luz que había. Recién ahí notó que su pequeño estaba más alto, no le faltaba mucho para llegar a su misma altura, de hecho ahora solo lo pasaba por unos centímetros.

Jungkook respiró profundo, intentando relajarse. Con miedo y nerviosismo acercó su rostro al de su Hyung. Pudo sentir como el mayor se tesaba entre sus brazos. Los labios de ambos quedaron a escasos centímetros. Taehyung sintió que su cuerpo se congelaba al sentir el roce de los suaves labios de su menor contra los suyos. Finalmente Jungkook acortó esa escasa distancia que aún los separaba y pegó sus labios a los del mayor en un tierno e inocente beso.

Al separarse ambos estaban completamente rojos, pero a Jungkook se le notaba aún más debido a que el tono de su piel era más blanca. Por vergüenza, ocultó su rostro en el cuello del mayor, aferrándose aún más fuerte a su cintura.

Taehyung no salía de la sorpresa, su pequeño Jungkookie había compartido su primer beso con él. No sabía qué sentir, pero ver la reacción tan adorable que tuvo el menor le causó mucha ternura. Sonrió levemente y acarició el oscuro cabello de su menor, depositando un pequeño beso en su cabeza.

Sin duda alguna, no importaba cuánto se esforzase para hacer algo lindo para el menor, Jungkook siempre encontraba la forma de hacer la situación mil veces mejor. Con su sola presencia Taehyung podía decir que no quería otra cosa en su vida que o sea estar al lado de su pequeño Jungkook.




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HOLAAA :'D

Sorry por tardar tanto T-T pero he estado ocupada ;-;

En fin, bellxs niñxs, vengo a invitarlos a ser parte de una editorial dedicada a BTS. Si quieren ser parte, puedes pasarte por el siguiente perfil: Bangtan_Editorial

En fin, ¡nos vemos! ><

Eternal Love •ᴷᵒᵒᵏᵛ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora