Hoy era un día muy importante, al fin había llegado el momento que marcaría un antes y un después en la vida de ambos. Todo debía salir perfecto, hasta el más mínimo detalle debía serlo. Pero era algo que a ambos los traía nerviosos desde hace un par de meses, ni hablar de cómo estaban muriéndose en ese preciso momento.
Jungkook caminaba de un lado a otro comiéndose las uñas dentro de aquella habitación. Su cabeza maquinando miles y miles de escenarios en donde por alguna razón no todo terminaba como ellos querían. ¿Y si algo salía mal? ¿Y si Taehyung se arrepentía? ¿Y si se largaba a llover? ¿Y si se quedaba sin voz debido a los nervios? Estos y muchos más eran los pensamientos que abarcaban la cabeza del lindo azabache. No quería que nada arruinara un momento tan lindo e importante para ambos.
-Ya, Kookie. Todo saldrá bien -consoló Jin al menor-. Y quedate quieto de una vez, me estás mareando.
-Lo siento, Hyung, no puedo evitarlo. -Suspiró.- ¿Qué tal si algo sale mal?
-Nada saldrá mal Kookie, lo vienes planeando todo hace meses.
-Lo sé, pero...
-Nada de peros. Escucha a tu Hyung cuando te habla.
-Sí, Hyung. -Nuevamente suspiró, abultando sus labios en un tierno puchero.
-Aww... aún eres un bebé -dijo el mayor con una leve sonrisa.
-¡Claro que no, yo ya soy grande! -Se quejó cruzándose de brazos.
-Lo sé, lo sé y aún me cuesta asimilar cuánto haz crecido... apenas tenías seis añitos cuando te conocí. No puedo creer que hayan pasado veinte años desde eso -decía Jin con cierta nostalgia.
Jungkook ya tenía veintiséis años, ya era todo un hombre, a pesar de que para sus dos mayores aún era un lindo bebé. Con una leve sonrisa, se acercó a Jin y lo abrazó.
-No este triste, Hyung.
-No puedo evitarlo -susurró, la nostalgia podía sentirse en voz, los fedos de su mayor comenzaron a acariciar el cabello del menor.
Se quedaron así abrazados por unos largos minutos. Jin había estado con él siempre que lo necesitó, había sido la única persona aparte de Taehyung que no lo había abandonado. Sin duda alguna sentía un gran afecto hacia su mayor.
-Jungkookie, ya es hora de irnos -dijo Jin deshaciendo el abrazo.
El nombrado solo asintió y luego de terminar de arreglarse salió del lugar junto con Jin.
Por otro lado, Taehyung estaba igual de nervioso, pero intentaba no demostrarlo. Jimin estaba al frente suyo, acomodando su ropa, se veía tan elegante.
-Jiminnie~ tengo miedo -se quejó el castaño en un lloriqueo.
-¿De qué?
-De que algo salga mal. ¿Qué tal si Jungkookie se arrepiente a último minuto?
-Ay, por favor Taehyung, es más que obvio que Kookie no se arrepentirá. Lleva meses hablando de esto -dijo Jimin.
-Lo se, pero...
-¿Estás dudando, Taehyung? -preguntó el más bajo, cruzándose de brazos.
-Claro que no, pero tengo miedo...
Jimin suspiró y posó sus manos en los hombros de su amigo.
-Taehyung, Jeon Jungkook te ama con todo el alma, ese niño hará lo que sea para que éste sea el mejor día de tu vida. No tienes porqué sentir miedo.
Un suspiro abandonó los labios de Taehyung, sabía que Jimin tenía razón, pero es que estaba tan nervioso que no podía controlar sus pensamientos. Era increíble como un mocoso podía hacerlo sentir miles de nuevas emociones para él, en su larga vida nunca tuvo que pasar por un momento así y jamás se imaginó que la razón de su nerviosismo sea un humano.
-Ya es hora de irnos, ¿estás listo? -preguntó Jimin.
-Estoy listo -contestó con una leve sonrisa.
Salieron de la habitación con suma tranquilidad, comenzaron a caminar hacia donde Jungkook los esperaba. A cada paso que daba, Taehyung sentía undirse cada vez más en los nervios, estaba seguro de lo que haría, pero aún así le daba nervios y algo de miedo de lo que pudiese llegar a pasar.
Cuando las puertas se abrieron, Taehyung sintió que todo opresión desapareció de su cuerpo al fijar su vista en la persona que se encontraba parada al final de aquel camino. Sonrió ampliamente y mientras agarraba el brazo de Jimin, comenzó a caminar a paso lento y con un ramo de flores en mano hacia donde su amado se encontraba.
Al estar frente a él, pudo observar con suma claridad la hermosa sonrisa de su pequeño bebé, se veía tan hermoso de traje, sus ojitos se notaban tan brillosos por la emoción. Simplemente su bebé era hermoso y en unos escasos minutos sería solo suyo.
Taehyung le entregó el ramo a Jimin, quien fue a sentarse en su lugar. Jungkook tomó las manos de Tae y lo miró a los ojos sin dejar de sonreír en ningún momento. Se sentía tan emocionado, al fin su Hyung y él estarían juntos legalmente.
-Se ve hermoso -halagó Jungkook por lo bajo.
-Tu también. -Sonrió leve.
-¿Empezamos? -preguntó el señor que se encontraba al frente de ambos.
Ellos asintieron y en ese mismo instante comenzó la ceremonia.
Cuando la ceremonia estaba por acabar, las palabras que tanto ansiaban escuchar fueron finalmente dichas, el corazón de ambos se aceleraron y una cálida sensación se instaló en ellos. Se miraron frente a frente, los destellos de emoción y alegría podía notarse en ellos. Acortaron la distancia que los separaba y sus labios se unieron en un tierno y dulce beso lleno de amor. Los gritos y aplausos de los presentes no se hicieron esperar, festejando por la pareja de recién casados.
Al fin eran esposos, al fin podían decir que estaban en una relación, al fin se pertenecían completamente el uno al otro.
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Elimine el capítulo antes de este pq siento que estaba de más sisi, nomepeguen
Bueno, espero les haya gustado :3~
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Eternal Love •ᴷᵒᵒᵏᵛ•
FanficEl amor eterno no existe, el sentimiento hacía una persona va desapareciendo con el tiempo. El ser humano está capacitado para amar a más de una persona a la vez y de olvidar con el tiempo. Taehyung creía que las promesas que se hacían los humanos l...