20: truth

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Luke llego a su hogar y abrió la puerta dejando que el olor a pavo y pan recién sacado del horno entrara por sus fosas nasales.

"Hey, crei que no vendrías"

Luke no le miro y camino hacia su habitación y detrás de el, Ashton.

"¿Y bien?" Dijo recargándose sobre el marco de la puerta. "¿Porque vienes asi?"

Luke le miró, aun tenia los ojos hinchados y rojos por las lágrimas.

"Me ha dicho que deje de creerme el centro del universo, y que hay personas que la están pasando peor que yo" Luke se quito los zapatos y se dirigió hacia la cocina por un vaso con agua y píldoras en sus manos temblorosas.

Ashton quien le había seguido saco platos de la alacena y coloco la mesa para que después se sentaran a cenar.

"Vaya" dijo poniendo cubiertos sobre las servilletas "Un adolescente de tan solo 19 años puso en su sitio a un chico de 22"

Luke lo miró mientras terminaba el vaso de agua.

"¿Que?"

"Que creo que tiene razón" se encogió de hombros " Si yo no puedo hacer que dejes toda esta actitud de «soy el ser mas miserable del planeta, ténganme lastima» tal vez Mike lo haga... Ahora siéntate a cenar, sin peros"

Luke se sentó a cenar junto con Ashton. Luke amaba la navidad, era uno de esos dias en los que podía quedarse en casa y relajarse, escribir y platicar con Ashton de lo que sea. sin embargo, esta navidad era diferente.

Ashton estaba ahora con Calum y Luke tenia esa enfermedad de mierda que lo consumia dia con dia.

Comieron en silencio, Luke miro hacia todos lados y se centró en el árbol de navidad. Ashton y el lo habían puesto desde que el mes había iniciado.

Desde que Luke se fue a vivir con Ashton a los 18, el chico de cabellos rizados siempre le había dejado escoger los adornos y este año no era la excepción. Hasta ahora, adornar el árbol de navidad era la única cosa que lo relajaba (junto con escribir en su maquina)

Michael tenia razón, Luke estaba hundido en sus pensamientos sobre la enfermedad, estaba dejando que la enfermedad lo consumiera antes de tiempo. Le estaba dejando ganar y la frustración que eso le hacia sentir provocaba que fuese de esa manera, no era que no pudiese dejar a Michael entrar, la verdadera razón es que no quería que se cansara de su actitud pero lamentablemente lo estaba logrando.

Terminó su cena y se dirigió a su habitación, tomo el regalo que Michael le había dado y lo abrió.

Una pintura al óleo.

Luke reconoció el lugar al instante.

En la pintura se podía ver una ventana y una pared de ladrillos color crema fuera de la ventana se veía un edificio y nieve por todos lados, luces de navidad y dentro de la ventana una mesa con dos sillas y dos cafés sobre ella.

Era el lugar donde Luke y Michael se habían hecho amigos (por decirlo de algúna manera)

Luke toco el cuadro, regresando al recuerdo de aquel dia y fue ahí cuando se dio cuenta de la verdad.

Michael valia toda la pena del mundo y no estaba dispuesto a dejarlo ir.

Thursday ✨ MukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora