En busca de aliados,la promesa de Madara

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No podía ser, hacia ya una hora en la que se vieron obligados a ver a la tortura permanente que tuvieron hacia Kagome durante toda su vida, como la trataban como un simple objeto, en estos momentos incluso Sai vio que él tuvo una infancia más feliz que ella, incluso estando en raíz, por lo menos él supo lo que era ser amado, tener familia por mucho que no fuesen familia de sangre, supo en ese momento que el tan solo había bloqueado sus emociones y sentimientos, pero que ella se vio obligada a no tenerlos directamente.

-.-.- (Kagome POV)

No podía más, sabia que al empezar a tener sentimientos no sabría como manejarlos, pero al notar el aura cargada de rabia de mi hijo, mis hermanos (entre ellos Naruto) y de Kakashi hizo me sintiera mal, quise hacer que se fueran, que no vieran todo por lo que pasé, pero lo más importante que no se sintieran culpables. No podía entender mis propias emociones, quería pedir ayuda, quería gritar que los necesitaba, que no podía vivir sin ellos, pero al hacer eso pondría en peligro las vidas de los que me importaban, de los que me trataron como una persona más, de los que creían en mí.

-.-.- (Kakashi POV)

Al ver por todo por lo que mi pequeña princesa pasó no lo pude evitar, me odié, en ese mismo momento no me extrañó que ella huyera de mi lado, no la supe proteger, aun sabiendo que sus padres no le tenían cariño la dejé a merced de esos demonios que decían ser su familia, viendo como cada herida que hacían a mi princesa durante una misión los de su propio clan la torturaban por ser lo suficientemente "débil" como para dejarse herir sentí como se oprimía mi corazón.

Recordé como fue nuestra relación durante las dos semanas que pasemos 500 años en el pasado.

FB

(Kakashi POV)

Poco a poco fui despertando y recordando los acontecimientos del día anterior.

Estuvo apunto de chocar con ella de no ser por sus reflejos, se paró de golpe y se giró hacia él bruscamente, le miraba a los ojos y se sorprendió al ver dolor en sus ojos, la única emoción que pasó a través de su mascara de frialdad, esa emoción que vio tantas veces por culpa del clan Uchiha, sin esperar a que hablase le dio un fuerte abrazo intentándola tranquilizar, de repente notó como sus hombros temblaban y su camisa se mojaba ligeramente, al notar eso estuvo apunto de entrar en pánico cuando Kagome alzó la cabeza para mirarle directamente a los ojos.

- Kakashi… - dijo intentando no llorar frente a él, odiaba las pocas veces en las que no podía controlar su cuerpo ni ese sentimiento que no sabia describir, ese sentimiento que le hacia llorar, como cuando vio a Souta, o como cuando pensó que sus hermanos la odiarían por haber desaparecido de sus vidas – Y-yo creo que te amo. – dijo casi susurrando y derramando inmediatamente más lagrimas, si no llega a ser porque estaban tan cerca Kakashi no podría haberlo escuchado, pero él lo escuchó, dentro de él sintió algo muy cálido, su pequeña princesa sentía lo mismo, y lo más importante, pese a no saber mucho sobre sentimientos y emociones se lo había dicho.

Sin poder contenerse más se bajó la mascara y besó lentamente, con mucha ternura, temiendo que fuese un sueño, y si lo era no quería despertar de él, con su lengua intentaba memorizar el dulce gusto de su boca, y explorar cada rincón de ella, al separarse por falta de aire y abrir sus ojos vio a la mujer más hermosa del mundo delante de él, tenía un muy leve sonrojo haciéndola ver como más tierna de lo que él podía recordar, vio como abría la boca para hablar, pero sin esperar a dejarla hablar volvió a besarla, esta vez con mas furia, más pasión, le intentaba transmitir todos esos sentimientos que estuvo guardando durante años, dándole todo ese amor que no le pudo dar, la acercó más a su cuerpo colocando, Kagome tenía la espalda apoyada en el árbol de dios, con las piernas envueltas alrededor de Kakashi, Kakashi tenía un brazo en su cintura mientras con el otro empezó a acariciarle los muslos, Kagome mientras tanto tenía una mano en su duro pecho y otra enredada en el suave pelo plateado, se separaron una vez más por falta de aire mientras seguían con sus caricias y mientras Kakashi daba suaves besos por todo el cuello de la joven sacerdotisa. Poco a poco Kagome fue bajando de Kakashi, mientras intentaba poner nombre a todos esos sentimientos y emociones que parecía querer correr por todo su cuerpo, estaba preparada para lo peor, para que el dijese que solamente la quería usar, que tan solo la veía como a un simple objeto, pero cuando escuchó un suave: "Siempre te he amado" salir de los labios de Kakashi sintió algo en su estomago, parecía como si tuviese miles de mariposas en dentro de su estomago, queriendo disfrutar de esa tranquilidad y esa sensación decidieron quedarse durante un rato en ese lugar.

¡Hermana!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora