Out. 16 "Invitación"

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—También me da gusto verte Chris —él nos dedicó una sonrisa.

Al ver a Zaizen, me sentí un poco feliz, era cierto que tal vez ellos no se llevarían tan bien como antes, pero seguían siendo mis dos mejores amigos, y que estuviéramos juntos los tres, a pesar de que fuera solo por unos instantes me hacía sentir realmente bien. Sin poder evitarlo corrí hasta él y le di un abrazo, sí, yo seguía sin medir mis distancias con los chicos.

—¡Zaizen! Es genial verte —el recibió el abrazo y acaricio mi cabello, para luego hacerle una mueca a Chris, quien tan solo lo observo con frialdad.

—Caminen, no es hora de hacer escenas en la calle.

—¡¿Estas celoso Chris?! —se burló el, haciendo especial énfasis en la “r” de su nombre.

—Claro que no —respondió este de inmediato, a lo que por alguna razón sentí una ligera punzada en el corazón.

—Bueno, vamos a mi casa, te invito Zaizen —rodee su brazo con el mío, y comenzamos a caminar juntos—. Chris si quieres puedes volver a los dormitorios.

—¿Qué? Pero… —él iba a refutar, pero de pronto pareció cambiar de opinión—. Bueno, supongo que ya no necesitas mi compañía, nos vemos mañana Nifuji…

¡Agh! Me había llamado asi, y con un tono de voz serio, solo lo hacía cuando estaba enfadado conmigo además que… ¡Yo también estaba enfadada! No me importa que se vaya. Aunque pensaba eso, sentía cierto dejo de incomodidad.

—¿Estas bien con eso, Aoi? El realmente se ha ido —Zaizen un poco ¿preocupado?

Tal vez estaba alucinando, él no se preocuparía por algo asi, más bien le había dado una ventaja, y seguro él lo veía de ese modo.

—Que haga lo que quiera, no importa.

—Creo que eso fue un poco tu culpa.

—¡¿Vamos a hablar de Chris?! Mejor cuéntame ¿Cómo estás? Aunque antes de eso… —sin avisar, me detuve y le clave un fuerte puñetazo en el estómago, ya que no se lo esperaba, lo hice perder el aire—. Eso es por molestar a Chris el otro día, eso no es lo que hacen los amigos.

—A..oi, estás loca… Como siempre —el comenzó a reír con dificultad.

Seguimos el camino hasta mi casa luego de que él se recuperara, me contaba de cómo le había ido en el hospital luego de su lesión, y todo aquello… Como habíamos perdido el contacto y cada quien estaba en lo suyo, solo lo vi casualmente un par de veces cuando fui a visitar a Yu por su lesión. Y el día que me intercepto en la entrada de la escuela, no habíamos tenido demasiado tiempo de conversar. Como a pesar de que tenía mi número no me escribía, no sabíamos mucho de nosotros.

Entre conversaciones llegamos a mi casa y le invite a pasar. Por lo menos el no hacia preguntas incomodas sobre papá a pesar de que conocía la situación a medias.

Luego de estar dentro, le ofrecí algo para beber, asi que llevé un refresco y ambos nos sentamos en el sofá.

—Aoi… —Me miró fijamente por unos instantes, luego continuo—. ¿No te incomoda estar a solas conmigo?

Esa pregunta me tomo por sorpresa, pero luego sonreí y le dediqué algunos golpecitos suaves en el cabello, como si de un cachorro se tratase.

—No, claro que no, eres Zaizen después de todo.

El abrió sus ojos un poco grandes, pero luego comenzó a reír muy fuerte.

—Eres la misma de siempre, o al menos aparentemente.

¿Aparentemente? No sabía a qué se refería con ello.

—¿Sabes por qué estoy aquí?

—¡Ni idea! —respondí de manera sincera.

—Quería saber cómo estabas, y, sobre todo, verte —el desvío la mirada, y por unos momentos me pareció ver que su rostro estaba sonrojado, pero fue solo por unos instantes—. Solo, se me hizo algo tarde porque no llegabas.

—¿Sabes dónde vivo?

—Algo asi.

—Acosador —reí dándole un golpecito en el brazo.

Parecía mentira, pero estar hablando con el de esa manera tan casual, y con abierta confianza, me había calmado bastante los ánimos, cualquiera podría decir por su apariencia que no era confiable, pero al menos para mí resultaba ser, un gran amigo.

Reímos un largo rato, hasta que parecimos agotar los temas de conversación, y ambos nos quedamos mirando fijamente. Él fue quien aparto la mirada primero.

—Bueno, creo que ya es hora de irme —se levantó— me alegra mucho verte bien.

—Te acompaño hasta la entrada, espera —fui a dejar las cosas que ensuciamos en el fregador, lo cual solo eran los vasos con refresco, y fui a acompañarlo.

Estando en la entrada, él se estiro un poco, y luego me miro de soslayo.

—Aoi, tu mirada ha cambiado, ya no ves a Chris, de la misma manera en que lo hacías —dicho esto se alejó despidiéndose.

¿Qué? ¡¡Espera!! ¡¡¿Qué había querido Zaizen decir con eso?!! Que se creía ¿Filosofo? Todo eso se había puesto muy raro de pronto. Y yo tan solo no conseguía terminar de discernir lo acontecido.

Al volver adentro, recordé ese msj que le había enviado por error a Miyuki, es cierto que al final, con todo lo que sucedió, no hablamos del tema. Me pregunte si el habría borrado eso.

Con todas esas cosas confusas en mi mente, pronto me quede dormida; es cierto que resultaban ser días difíciles para mí, pero poco a poco todo se había ido reponiendo. En especial me sentía mejor, por la visita de mi viejo amigo.

Al día siguiente, me la pase un poco distraída en clases, veía constantemente el asiento donde estaba Chris, y mis mejillas no habían dejado de mantenerse rojizas, me daba algo de vergüenza que me miraran asi, pero por suerte nadie me había preguntado nada hasta el momento.

Solo suspiraba y mi mente divagaba a cada instante, creo que es el peor día que he tenido en clases, varias veces me hicieron preguntas, pero no conseguí responderlas porque no tenía idea de que hablaban. Creo que hice enojar a más de un profesor esa vez.

A la hora del almuerzo me escabullí para que Chris no fuera a buscarme, y al parecer ni siquiera se molestó por hacerlo. Tal vez seguía enfadado por lo que ocurrió en la noche, entonces recordé las palabras de Zaizen… ¡Ah! Él tenía mucha razón, es mi culpa que este de esa manera.

La verdad lo había tratado un poco mal. Suspiré y fui a buscarlo, finalmente cuando lo encontré, estaba en el campo de béisbol, conversando con Miyuki, tuve que reunir una gran cantidad de valor para acercarme a ellos.

El atrapó mi CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora