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            Dariva y Acantilado Inui

                 † Narra Rhydius †
Ahora estábamos a las afueras de la cuidad de Siss. En el camino miraba a Gabilia de reojo. Ella tenía algo que me hacía que la mirara una y otra vez. Sin duda es una chica especial. Mientras cabalgamos recordé lo de aquel día en la posada en Runia, fue algo glorioso que fue detenido por cosas del destino. Aunque todo tiene su momento.

Admiraba demasiado a mi novia. Ella es una persona valiente, rebelde, libre pero sobretodo amable y tierna cosa que la hace especial. Me sorprendió mucho ver cómo tuvo las agallas para cortarle el brazo a jefe de los bandidos sin duda es una mujer de respeto y valiente como un guerrero.

Me enfurece que solo acepten hombres en el ejército. Se sabe que hay también mujeres que pueden dar el máximo en el ejército y mi novia es una de ellas. Esta cuestión es como el dejá vu de la princesa Rinali con su entrenamiento de arquería la misma cuestión solo que la diferencia es que una se desempeña en arquería y la otra en combate.

– ¿Que te pareció Siss es un lugar hermoso no? – me pregunta posando su mirada en mi

– Si, es un hermoso lugar amor con demasiada naturaleza – le contesté embelesado con su belleza rebelde

– Es muy pequeño para ser un lugar tan bello – me contesta con una sonrisa

– Hay cosas que te sorprenden de una manera u otra jeje – le dije riendo

– Eso es muy cierto – dice riendo de igual manera

– Por cierto, este estuviste increíble con lo que pasó horita me sorprendes – le respondí con una sonrisa de oreja a oreja

– Gracias no me lo esperaba ese suceso fue tan repentino – contesta con un suspiro

– Te viste increíble hasta Twinian dice que tienes un gran potencial para estas cosas verdad Twinian – le dije mirando hacia Twinian que iba al frente

– Por algo mencione que serviría de mucha ayuda en el ejército – contesto con tono vacilante

– Es un gran halago Twinian – le dice Gabilia con una sonrisa

– Solo digo lo que es verdad, mereces estar en el ejército; cuando acabe todo esto iré hablar con el rey para ver si de una manera u otra puedes estar en el ejército – dice deteniendo su caballo y mirando a Gabilia

– De verdad gracias Twinian – responde con gratitud

Me gustaba verla tan feliz como la veo ahora.

– Sigamos estamos cerca de la posada ya está empezando a oscurecer – menciona retomando el paso nuevamente

Solo nos limitamos a asentir y continuamos con el viaje. Estaba oscureciendo poco a poco cuando al fin llegamos a la posada entre Siss y Dariva.

– Pónganse cómodos a lo que rento las habitaciones – dice Twinian en la puerta

– Estaremos afueras mientras te encargas de rentar las habitaciones – dice Gabilia mirandome con una sonrisa

Que tendrá entre manos.

– Cuando termine los iré a buscar – contesta encaminando se al mostrador

– ¿Y bien en que estábamos? – le pregunté a Gabilia

Gabilia se aferró a mi y me besó apasionadamente. Yo tome su ritmo acelerado y me adapte sus besos salvajes, tiernos y desenfrenados.  Nos separamos para tomar bocanadas de aire. Luego nos miramos fijamente para después dedicarnos una sonrisa con cierto sonrojó.

Un Amanecer Oscuro ( El Ocaso )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora