❝𝐎𝐧𝐞-𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 ℛ𝒶𝓎ℰ𝓂𝓂𝒶❞ ❪𝑇𝘩𝑒 𝑃𝑟𝑜𝑚𝑖𝑠𝑒𝑑 𝑁𝑒𝑣𝑒𝑟𝑙𝑎𝑛𝑑❫

•𝙱𝚘𝚢𝚜 𝙻𝚘𝚟𝚎•

Los dos chicos estaban en un paseo por quinto aniversario, el paisaje era digno de ser plasmado en una fotografía y era Ray el encargado de hacerlo, aunque tal vez exageró un poco mucho. Fueron tantas que su cámara se quedó sin memoria para más. 

—Emmil, ¿Cuánto me amas? —el chico que segundos antes estaba mirando el paisaje, lo observó extrañado.

—Así... —extendió sus brazos al cielo— de grande, ¡Tan grande como el firmamento! —el azabache sonrió enternecido— ¿Y tú, Ray? ¿Cuánto me amas? —le preguntó inocentemente.

—Yo... —cambio su sonrisa por una sádica y aterradora que hizo temblar al peli-naranja— Mataría a cualquier persona que se atreviera a lastimarte...

—Si el lago frente a nosotros me ahoga ¿Eres capaz de matarlo? —Preguntó con seriedad.

Sobre la frente del azabache apareció el circulito de "cargando" y permaneció en ese estado por unos largos minutos, intentado buscar una respuesta.

Créditos por el chiste a: "Mi secreto más íntimo" xd

Emmil estaba más que divertido por la situación, intentado aguantarse las ganas de reírse por la cara de concentración de su novio.

—Me pongo romántico y te pones mamón —dijo finalmente.

El oji-verde soltó la carcajada que estuvo reteniendo, algo que molestó al azabache, el cual se cruzó de brazos fingiendo molestia. 

—¡Joder ya! —gritó sonrojado al ver que su amante no paraba de reírse.

—¡Perdón! Es que... —apretó sus labios en un intento de parar, pero eso solo aumentó sus ganas de reír.

Y Ray terminó por contagiarse de la risa de su novio.

[ . . . ]

Era el cuarto orfanato por el que pasaban, el azabache estaba a un rechazo más de golpear al encargado.

—No, lo lamento, no podemos dejar a un niño...—los observó con asco— a su cuidado.

—Hijo de tu pe... —estuvo a tres doritos de abalanzarse sobre el hombre pero fue detenido por Emmil, el cual le pedía con la mirada que no hiera nada— Tienes, razón, no vale la pena...

Después de un poco de pelea verbal, ambos salieron. 

—Ray, tranquilízate —intentó calmarlo.

—¡¿Cómo quieres que me tranquilice?! —elevó la voz, llamando la atención de algunos transeúntes— Me rindo, no creo que nos dejen adoptar un niño —su expresión de enojo fue sustituido por uno de tristeza.

—¡Yo también quiero golpear a esos hijos de puta! —gritó sorprendiendo a su amante— ¿Qué creen que somos? ¡También tenemos derecho a formar una familia! —finalmente rompió en llanto y Ray se acercó a él para rodearlo con sus brazos.

Estuvieron así un largo tiempo, hasta que una mujer de piel morena se acercó. El oji-onix se puso a la defensiva tan rápido como la vio, pero la señora le mostró una sonrisa tranquilizadora.

—Perdón si soy grosera, pero, escuche que quieren adoptar un niño.

—¡Sí! —respondió Emmil secándose las lágrimas.

—Soy Krone, directora del orfanato Grace Field, son bienvenidos a visitar a mis pequeños cuando gusten. —les entregó una tarjetita con una sonrisa.

—¡Por favor! ¿Podríamos ir ahora? —el azabache elevó la voz por la emoción.

—Claro que si, síganme —empezó a caminar.

Ambos se miraron sonrientes, al fin, una persona que entendía sus deseos.

Terminaron adoptando a dos mellizos, Yuugo e Isabella, tardaron casi un mes, pero después del papeleo, pudieron finalmente llevárselos a casa. 

Pudieron ser una familia feliz 

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:D 

Después de exprimir todo lo que podía con la historia anterior, esto es lo que salió...

Mis neuronas ya no daban para más xd

Aunque estoy satisfecha con esta parte ya que pude escribir yaoi ùwú 

algúndíalomejoraré

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