Domingo y me desperté con la peor resaca que he tenido en la vida, sentía que la cabeza me iba a explotar pero eso no fue excusa para llamar a Kyungsoo y pedirle el número de ____, necesitaba disculparme con ella.
Al principio no fue fácil, me recriminaba por la estupidéz que hice en su reunión pero de tanto rogarle me lo dió *Mierda tiene hasta su número*pensé, pero en estos momentos no tengo el derecho de ponerme así *Ayer tampoco*
Una, dos y tres timbradas para que contestara...
_Hola?- dijo.
_Hola- dije con el corazón en la boca- soy yo, Luhan- dije.
_Qué quieres?- dijo ahora con la voz fría, mi pecho se oprimió.
_Podemos hablar?-dije apenas audible.
_No, no podemos, no quiero verte nunca, estaba muy bien antes de que aparecieras en mi vida- dijo con odio en su voz y sin más, corto...
tuu tuu tuu, era el sonido de la línea cortada, una lagrima recorrió mi mejilla derecha y rápidamente la limpié *Estoy llorando por una chica?...Mierda*
Alejé el celular de mis manos y sentí las ganas de tirarlo pero no, no quería dejar las cosas de esta manera, volví a llamarla pero no había respuesta alguna...
una, dos, tres llamadas y no contestaba, cuatro, cinco y seis y nada *Por favor contesta*
En la Séptima llamada decidí dejarle un mensaje de voz.
_Por favor, perdóname ____-dije en un susurro y corté.
Volví a llamarla dos veces más pero nada, le deje otro mensaje de voz.
_Perdóname- dije y corté para no molestarla más.
Después del mediodía mi celular comenzó a sonar, estiré mi brazo para alcanzarlo ya que se encontraba en la mesita que estaba al costado de mi cama, me la había pasado echado durante todo el día, no había desayunado y menos almorzado, al ver el nombre en la pantalla decidí no contestar, era Sehun y no quería escuchar sus burlas.
Luego de tres llamadas, cansado de que esté llamando, contesté.
_Qué paso?- pregunté.
_Si no estuviera de tan buen humor, te hubiese mandado a la mierda- dijo riendose, haciendome sonreír.
_Ya sueltalo, qué pasó?- dije.
_Me vas a amar por esto hermano-dijo.
_Ya dilo!- dije exasperado.
_Tranquilo, tranquilo, estaba pensado en lo estúpido que te debes de sentir hoy por lo de ayer- dijo soltando una risa - y bueno te hice un gran favor...sabes de quién tengo la dirección?- me preguntó, y mi corazón despertó y comenzó a latir desenfrenadamente *la dirección de mi pervertida?*.
_No me digas que...-dije y no me dejo terminar.
_Si si de ella-dijo como si no tuviera importancia, pero siempre hacía eso cuando me hacia favores- te lo mando en un mensaje y ve a arreglar tu idiotes-dijo y cortó.
Dos minutos más tarde recibí la dirección y rápidamente me levanté de la cama y fui al baño a tomar una ducha, al terminar me cambié, me puse unos pantalones negros, una playera blanca y mis converse negras de siempre, no me ocupé de mi cabello solo lo revoloteé y ya estaba listo.
Diez minutos más tarde, me encontraba en el tercer piso de aquel edificio en donde vivía ella.
Me empezaba a sudar las manos, mi boca estaba seca y mi corazón seguía desenfrenado, aún asi, di dos golpes a la puerta y tras esperar unos minutos ésta se abrió, la vi y me sentí más culpable, sus ojos estaban hinchados, aunque trataba de aparentarlo al haberse arreglado. Ella al verme abrió más los ojos por la sorpresa y se quedó paralisada mirándome.
_Hola- dije.
_Qué haces aqui?- dijo, seguía con su tono frío.
_Quiero hablar contigo ____, se que me comporté como un idiota y quiero que me perdones...enserio- dije sinceramente, y vi como relajaba su rostro, aún asi no dijo nada y se quedó mirandome.
Segundos después cerró de un portazo, me quede como piedra, pero aún asi volví a tocar, nada, toque otra vez y nada.
_Abre por favor, se que me escuchas y en verdad lo siento-dije apegandome a la puerta.
_Vete! no te quiero escuchar! no molestes!-dijo enfadada.
*Mierda enserio la cague*...antes de dar media vuelta volví a disculparme y regresé por donde había venido.
