❝Un hilo invisible conecta a aquellos que estás destinados a encontrarse sin importar el momento, el lugar o las circunstancias. El hilo puede alargarse o enredarse, pero nunca se romperá❞
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Todo desde la perspectiva...
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⌜ᴠɪᴇʀɴᴇs 10 ᴅᴇ ᴀɢᴏsᴛᴏ⌟
Mark nuevamente se encontraba en un aeropuerto. Comenzaba a odiar este estupido viaje solo para una cena con viejos amigos de sus padres.
¿Por qué tenían que vivir en Chicago? ¿Por qué no se quedaron una semana más en Vancouver y cenaron en la comodidad de su casa?.
No conocía a los amigos de sus padres, y mucho menos a su hijo, ¿Que pasaba si se empezaba aburrir?. Ese era el verdadero problema, si se aburría no se podría ir a encerrar a su cuarto a escuchar musica con sus auriculares.
Se acercaron hasta la puerta de embarque y por unos segundos su cabeza armó un plan de escape. Ninguna lograba tener sentido, y no quería tener problemas con sus papás.
Pero él era muy tímido como para hacer amigos, y no sabía cómo empezar una conversación, Mark realmente era malo cuando se trataba de socializar. A este punto de su vida no sabía cómo es que había logrado hacerse amigo de Haechan, su único amigo de Seúl.
Se acomodo en su asiento -siempre entre medio de sus padres- y coloco sus auriculares para posteriormente poner música que lo relaje.
➤ "Si te aburres en la cena de tus padres háblame, yo nunca hago nada así que no tardaré en contestarte" ✓✓
Río ante el mensaje que su amigo le había enviado.
Haechan era su mejor amigo, era como su hermano.
Él había sido el primer y único niño que se le acercó en su primer día de clases. Mark no era muy bueno hablando en coreano, aún así el pequeño Donghyuk se quedó a su lado y lo ayudo muchísimo con su pronunciación.
Cuando terminaron el primario ambos amigos se encargaron de convencer a sus padres para que los llevarán al mismo secundario, algo a lo cual no se negaron, ellos eran muy unidos.
La emoción se terminó el día que Mark le dijo a Hyuk que volvería a Vancouver. Mark recuerda haber visto a su amigo llorar mucho, incluso se arrodilló frente a él pidiéndole que por favor no se vaya -acto que lo hizo reir demasiado- su amigo no tenía vergüenza de nada, todo lo contrario a él.
Siempre estuvo agradecido de haberlo conocido, también agradecía que sea una niño sin vergüenza alguna y se acercara a él para formar una amistad, siempre aseguro que si hubiera sido por él hubiera estado solo todo su primario y secundario.
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El avión aterrizó luego de unas tres horas y media.
Mark sintió un cosquilleo en su muñeca, pero estaba tan enojado y nervioso por la cena que trato de no prestarle atención.
-Mark, cariño, por favor, cambia esa cara- Dijo su madre.
Mark suspiro e inflo sus cachetes. No le gustaba que su mamá le llame la atención pero no tenía ánimos para ir a una cena que no era obligatorio ir, él se podría haber quedado en su casa.
-Mamá, yo podría haberme quedado en casa- Dijo siguiendo a sus padres fuera del aeropuerto.
-Mark, levanta tus pies al caminar- Dijo llamándole la atención. -Además es solo un fin de semana, podemos salir a recorrer las calles, Chicago es hermoso- Dijo tratando de convencerlo.
Mark saco una sonrisita y asintió. A sus 16 años era una persona fácil de convencer.
Pero es que Mark no se podía negar a eso. Amaba conocer lugares nuevos y recorrer las hermosas calles de las hermosas ciudades que visitaba.
Subieron sus bolsos a un taxi y se dirigieron hacía la casa de los Suh.
Su madre no mentia, Chicago tenía un atardecer hermoso, las calles estaban repletas de parejas, familias y amigos disfrutando de lo que quedaba del hermoso día que la ciudad les había regalado.
Mañana se levantaría temprano y aprovecharía del día para recorrer ese lindo parque que acababa de ver.
-¿Te gusta?- Pregunto su padre viendo a Mark admirar cada lugar por el que pasaban.
-Me encanta- Contesto sin quitar su vista de los grandes edificios.
➤"Chicago es aún más hermoso de lo que imaginaba"✓
Levanto su vista de su celular luego de contestarle a su amigo y se dio cuenta que el vehículo había estacionado frente a una enorme casa blanca.
Bajo del auto y ayudo a sus padres a sacar sus bolsos. Pudo ver como la pareja Suh salían de su hogar para recibirlos con un fuerte abrazo.
Los ayudaron a entrar las pocas cosas que habían traído de Vancouver y se sentaron todos a merendar.
-¿Cómo te fue en Seúl? Mark- Pregunto la señora Suh.
-Oh, me fue bien, hice un amigo, él me ayudó con mi pronunciación- Soltó una risita.
-Que bueno cariño- Contesto ella. -¿Y como vas en la escuela?-
-Tenia uno de los mejores promedios en la escuela a la que iba en Seúl, ahora estamos en busca de un colegio nuevo en Vancouver- Contesto Mark tímido de tantas preguntas.
➤"¿Ya te aburriste?"✓✓
Mark soltó una risa al ver el masaje de su amigo. Su mamá se volteo a verlo con rareza.
-Es Hyuk, mami- Dijo sin la necesidad de recibir una pregunta de parte de ella.
➤"No, aún no, me incluyeron en sus conversaciones"✓✓
➤"Aunque no dudo que me aburra en unos pocos segundos cuando llegue su hijo"✓
Contesto Mark para posteriormente guardar su celular.
Comenzaron a hablar sobre diversos temas, Mark no paraba de reírse y sentirse un poco tímido cada vez que la señora Suh hacía algunos comentarios acerca lo lindo que era.
Mark se levantó para así ayudar a levantar la mesa. En el momento en el que dejó las tazas sobre la mesada, su muñeca comenzó a picar, volvió a pasar suavemente sus cortas uñas sobre está mientras se dirigía de vuelta hacia el living.
Se quedó en su lugar al ver al hijo de los Suh en la entrada, y luego observo su muñeca.
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Una corriente eléctrica paso por todo su cuerpo y una lágrima se escapó de sus ojos.
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