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Lombardo le había contado a Oliva todo lo que pasó. Debía admitir que se sintió más aliviado de haber podido soltar todo.
─Che. ─Llamó Duki, el contrario inmediatamente volteó a verlo. ─Gracias por escucharme aceite.
Valentín le sonrió y murmurro un pequeño de nada. Después de eso Mauro se fue para seguramente ir a fumar a un lugar por ahí, dejando así al de ojos azules completamente solo nuevamente. Pero al parecer eso no fue por mucho cuando este escuchó como alguien tocaba el timbre repetitivamente de manera desesperada.
Extrañado se acercó a ver por la ventana primero de quien se trataba. Una pequeña sonrisa hizo presencia en su rostro y rápidamente abrió la puerta.
─Pará, ¿ya te olvidaste de mi? ─Preguntó Daniel de manera juguetona, si bien sabía que habían estado ambos chateando por horas.
─Eso nunca gil. ─Respondió Valentín y casi de inmediato se le acercó a darle un chape hambriento y necesitado que no demoró en ser correspondido de la misma forma.
Semanas sin poderse ver y ahora lo único que querían era disfrutar el tiempo juntos. Rápidamente todo empezó a subirse de nivel, los besos se volvieron chupetones y la ropa empezaba a ser un estorbo.
─¿Escuchaste eso? ─Susurró Daniel con la respiración entrecortada. Lo que menos quería era interrumpir el momento, pero el sonido seco de unos golpes en la ventana se volvían cada vez más difíciles de ignorar.
Valentín se alejó unos centímentros de Ribba para poder intentar identificar de donde provenían esos sonidos.
─Arriba. ─Y apenas dijo eso Oliva subió las escaleras corriendo en busca de la persona que intentaba irrumpir en su casa.
Asustado tomó lo primero que encontró de su habitación, una tijiera nueva que estaba en su mesita de noche. Inhaló profundo y intento mantener la calma mientras buscaba sigilosamente por el intruso.
─¡Valentín! ─Exclamó Daniel desde otra habitación, Oliva asustado por lo que le pudo haber pasado corrió hasta la habitación de huéspedes con la esperanza que él estuviera ahí ileso.
Grande fue su sorpresa verlo junto con Khea y Seven Kayne. Estos últimos estaban riendo a carcajadas mientras sostenían una caja de cervezas.
─Me cago en la puta que los parió, ¿que mierda hacen aquí? ─Dijo el de ojos azules completamente enojado, por un momento pensó que iba a morir de verdad.
─Eh, veníamos a dejar estas cervezas aquí para brindar todos juntos por mi relación con Joaco. Y pensamos, ¿y si les damos un sustito primero? ─Explicó Ivo con una sonrisa de oreja a oreja.
─Fue idea de él. ─Dijo Joaquín señalando a su ahora novio.
Valen y Dani estaban en shock, sinceramente nunca notaron nada raro entre esos dos y les tomó verdaderamente de sorpresa.
─Felicidades hijos de puta. ─Dijo Oliva para luego abrazar a esos dos con fuerza. ─Pero no me vuelvan a romper las pelotas con sus bromitas eh.
Daniel no demoró tampoco en unirse al abrazo. Estaba feliz por sus dos amigos.
Ganó kaynea así que estén pendientes para el siguiente capítulo.👁👄👁
