You Condemnend Us The Promised Neverland

XI

09-05-2053

—Vamos! Ariel juguemos—decia la niña de cabellos naranjas y ojos azules jalando al niño emo para que jugase—siempre lo hacia y nunca lo lograba convencer.—

—Ya te dije que no ,tonta—decia quitando su mano bruscamente haciendo que la pelinaranja cayera en él césped sentada.—

—Auch!.—decia la pelinaranja sobandose su trasero.

—Que es lo que pasa aqui?—decia Emma junto con Gilda y Anna acercándose al trio de niños.—

—Ariel no quiere jugar con nosotras!—decian ambas con claro disgusto haciendo un puchero.—

  Emma sonriendo radiante—era la misma actitud que tenia su hermano Ray no le sorprende que sea hijo de Anna— agachandose a la misma altura que sus niños

—Por que mejor no les contamos una historia, niños—decia Emma amablemente a sus niños. 

  Las dos niñas sonríen radiante y el chico de cabellos oscuros solo asiente—las dos niñas ya lo dejarían de molestar y eso lo alivia.— y corren a avisarles a sus hermanos que su madre contara una historia. En menos de un minuto todos los niños se encuentran sentados en el césped verde, Emma sentada en el suelo al igual que sus niños ,Gilda apoyara en el arbol donde estaba Ariel sentado y Anna cargando a un bebe—era agradable para todos ese día nada podia salir mal— Y Emma prosigue a contar la historia.

—Hace tiempo en un orfanato como este, vivían tres niñas la primera una chica valiente y que nunca se rendía la segunda una chica que se preocupaba por su familia y la tercera quien era alguien amable y de buen corazón las tres se querían al igual que querían a sus hermanos, un dia una familia decidió adoptar a una de sus hermanas, él día de su adopción todos sus hermanos se despidieron de ella, algunos lloraron y otros solo se mantenían en silencio, la niña se fue con su nueva familia.

—Nuestros demas hermanos deben de tener una bonita familia me siento alegre!— Decia Edith con clara emocion— sus familias deben de ser muy buenas ¿verdad mama?.

«Pobre y triste realidad que no es cierta»

—Si Edith—decia Emma con una sonrisa que hace sonreir a su propia hija.

«No debes decirles por ningún motivo él secreto, aunque quieras decircelos no se los digas»

—Los meses pasaron y todo eran y juegos hasta que un día una familia decidió adoptar a uno de los mejores amigos de la primera chica todos lloraron por eso, y ella quedo totalmente destrozada por dentro ya no lo volvería a ver, dos meses pasaron desde su adopción y en él orfanato ocurrió una catástrofe, se empezó a incendiar y personas malas empezaron a secuestrar a todos niños para experimentar con ellos y hacerlos sufrir—ante esa mencion los niños se abrazan entre si provocando una leve sonrisa en Gilda y Anna— él orfanato fue consumido por las llamas y solo las tres niñas lograron sobrevivir a esa catástrofe.—finaliza viendo como sus niños tiemblan y una sonrisa nerviosa se forma en él rostro de Emma.

—Por eso niños les decimos que no pasen la valla—decia Gilda tranquilamente— no se sabe que peligros pueden encontrarse tras ella.

—Entendieron niños, no pasen la valla por ningún motivo.—decia Anna amablemente y los niños asentían y sonreían.

—Bien! ¿Quien quiere jugar a las traes?—preguntaba Edith junto con Isabel animadas todos los niños se emocionan y empiezan a preguntar quien contara—.