No todo lo que ves es lo que parece

Capítulo 51

-¡James!, escúchame- dijo Ela.

-Dime, te estoy escuchando.

-¿Qué fue lo último que escuchaste?

-Que me querías.

-Jamás dije eso, ew.

-¡Hey!

-Jajaja bueno, lo que dije fue que pensé que este caso iba a ser sencillo, pero después de todas esas preguntas lo dudo en verdad, y más porque ella respondió, ¿y si luego le vuelven a hacer las mismas preguntas y no las responde igual?, sabrán que hay algo más y querrán investigar, te dije que tenía un plan mejor, porque tenías que confiar en "Peter Pan".

-Ela, tienes que entender que él la conoce mejor que nosotros dos y por eso confié en él, además ella debía pasar por esto para que aprendiera su lección.

- ¿Qué lección?, ¡¿quedar en un hospital con heridas y que te llame la policía?!. ¡¿esa es una lección?!

-Esa no es la lección, su lección es para que vea que la venganza no es buena.

-Tienes que entender que ella está mal, y necesito que busques todos los exámenes con su psicólogo o cualquier examen que le hayan hecho, todo eso nos puede ayudar.

 -No recuerdo su nombre.

-¡Pues búscalo!

-Okey.

-¿Y dónde está el otro bobo que anda contigo?

-No lo sé.

-Pues búscalo a él también, él nos servirá después.  

-Ela, pero yo no quiero hablar con él.

-Deja de ser inmaduro y habla con él .

-Bieeeen.

-Ahora me voy a recopilar evidencia, además tengo que buscar uno de mis libros sobre si se condena a las personas que se intentan suicidar, tú sabes que en muchos países esto ocurre, pero no recuerdo si aquí lo hacen, esperemos que no...

-Muchas gracias por todo, Ela, te debo una.

Mientras Ela caminaba a la salida de aquel hospital se volteó y me dijo

-Me debes demasiadas cosas. por favor no intentes hacer una locura, no lo compliques más.

-Okeeeey.

Me fui a sentar a una de las bancas que habían en el pasillo y me puse a analizar si llamaba o no a Connor, me había comportado como un inmaduro frente a él, ¡qué vergüenza!, pero de los cobardes no se ha escrito nada; así que me levante de la banca y salí de ese horrible lugar llamado hospital, no me malinterpreten, sé que ayudan a personas, pero el ambiente es pesado, solo pensar en cuántas personas han muerto ahí o en todo lo que las familias pasan, eso es lo tenebroso para mí, me hace recordar el tiempo que pasaba con mi princesita ayudándole, alimentándola, eso me hacían sentir demasiado débil...

Para mi sorpresa, debajo de la lluvia estaba sentado Connor, sí, sí, lo sé, es un dramático, ¡rayos!, ahora le tendré que hablar.

-¿Connor? -pregunte como si tuviera veinte años sin verlo.

-El mismo -dijo siguiéndome el juego.

-¿Qué haces aquí?

-Pensando.

-¿En qué?

-En lo corta que es la vida, ahorita debería estar con mi novia, no aquí.

Su comentario me molestó demasiado, porque nadie le obligaba a estar aquí.