El verano de Savannah

Salida de chicas.

Aquel día no prometía ser para nada especial. El cielo estaba un poco nublado, había nubes blancas en el cielo que ocultaban el brillo del sol. El motivo de aquel clima era Savannah.

Tan solo una hora antes, Alice le había mandado un mensaje para ir de compras juntas.

Savannah no tenía nada mejor que hacer así que tuvo que ducharse y vestirse con rapidez antes de que Alice llegará.

Cuando escuchó el claxon, Savannah dejo una nota para su familia y salió de casa casi corriendo. Fuera estaba el increíble coche de Alice, pero lo que en realidad sorprendió a Savannah fue encontrar a Bella en el asiento trasero y a Rosalie en el asiento del copiloto.

Era la primera vez que las veía juntas exceptuando el día que Edward la presentó a la familia.

-Hola chicas.

Bella solo la miró y sonrió antes de volver a su postura normal de molestia. Probablemente Alice la había obligado a ir.

-Hola Savannah, ¿lista para ir de compras? -la emoción de Alice era contagiosa.

-Por supuesto. ¿A dónde vamos?

-A Port Angeles, hay unas tiendas que tenemos que ver obligatoriamente.

-Genial -dijo Savannah con una sonrisa. Aunque en realidad deseaba que aquellas tiendas no fueran muy caras pues no tenía tanto dinero.

Por el camino, ni Rosalie ni Bella hablaron, Savannah se entretuvo mirando por la ventana y haciendo contacto visual con Alice cada cierto tiempo. Incómodo no era suficiente para describir aquella situación.

En cuanto Alice aparcó el coche, prácticamente agarró a Bella y la arrastró hacía una tienda. Savannah no quería reírse pero era realmente divertido. Bella se iba a convertir en la muñeca de Alice y como tal iba a probar mil conjuntos en ella.

Rosalie y Savannah se dedicaron a mirar ropa por su lado, ignorando las miradas de Bella, miradas que gritaban ayuda.

-Entonces... supongo que todo va bien con Tony ¿no?

Si pudiera Rosalie se hubiera sonrojado.

-Todo va de maravilla... Gracias Savannah...

-No me las des, a veces Tony necesita un empujón, pero esta clarisimo que te ama.

-Eso me recuerda que Tony mencionó lo poco que falta para tu cumpleaños...

-Por supuesto, Tony siempre es un bocazas.

-¿No tienes nada pensado?

-Aún no pero ya se me ocurrirá algo...

-¡Chicas! -grito Alice llamando la atención de ambas – ¿Os gusta? -pregunto mostrando un conjunto nuevo.

-¿Es para ti o para Bella? -preguntó Savannah.

-Obviamente es para mí.

-Se ve precioso -dijo Rosalie con una sonrisa.

Siguieron viendo algunas tiendas más hasta que Bella se rindió y pidió volver a casa. Sin embargo, antes de volver, Savannah propuso parar a comer algo. 

Estaban en la cafetería, Bella tenía mala cara, pero Savannah ni siquiera se dio cuenta pues estaba saboreando su sándwich. 

Savannah había conseguido ver ropa que le gustaba pero solo compro unas pocas prendas, ya que no llevaba dinero suficiente. Aún así Rosalie se quedó con el resto de las prendas, para regalárselas en su cumpleaños.