CAP 20

3K 213 97
                                    

Estaba nervioso, no, nervioso no, ¡más que nervioso! ¡Me voy a casar con Bakugo!
Habían pasado unos meses desde que me pidió matrimonio, habíamos estado mirando sitios donde casarnos y todos los preparativos etc.
La hija de Mina y Sero había nacido hace un mes, Hanashi Sero se llamaba la pequeña hermosa.
La boda era dentro de una semana, y todo estaba listo.

Llegó el día tan esperado, el día en el que me casaba.

Hiba con un traje blanco, acompañado de Sero, el cual me llevó hasta el altar, donde estaba mi futuro esposo vestido de pies a cabeza de blanco con un traje que le marcaba perfectamente los músculos y sus curvaturas. Sero me dejó en el altar y volvió a su silla al lado de su preciosa novia vestida con un vestido precioso mientras tenía en brazos a Hanashi y a Yukine. Los pequeños aplaudían juntos.

Bakugo y yo nos miramos el uno al otro sonriendo con nervios y con alguna que otra risita nerviosa de por medio.

Cura: Bien, estamos aquí reunidos para juntar en sagrado matrimonio a Katsuki Bakugo y a Eijiro Kirishima.

Todo el mundo puso atención al hombre que hablaba.
El cura siguió diciendo pavadas de esas que se dicen en una boda, hasta que llegó el momento de decirnos el uno al otro lo que nos había enamorado.

Cura: Empieze usted joven- dijo mirandome a mí.

Kirishima: Katsuki Bakugo, has sido mi mejor amigo desde que entramos a la UA, pasaste de eso a ser mi acompañante en este camino tan precioso. Si me dijeran que me hiba a casar con el petardo enfadón de primero no me lo creería, pero estoy seguro de que siempre elegiría la misma ruta por siempre. Estar a tu lado estos últimos años ha sido una prueba más por la que debería casarme contigo, ya que yo te quiero, y aunque digan que eres un petardo, eres mí petardo, y eso lo amo -dije por acabar.

Katsuki tenía la mirada cristalina, le salían pequeñas lágrimas de los ojos.
La gente en los bancos aplaudía y algunos incluso ya estaban llorando.

Cura: Katsuki Bakugo, su turno.

Bakugo: Bien, siempre has sido un coñazo de persona, siempre sonriendo y gritando como señora en parto, tocando los cojones y después simplemente desaparecias -dijo pausando- ... Pero me he dado cuenta de que es éso lo que me gusta de ti, esa sonrisa que siempre tienes en la cara es una bendición poder verla todos los días, y los gritos que pegas sin razón alguna a veces en mis peores momentos son como rayos de sol iluminando el camino. Lo que quiero decir, es que eres la primera persona que me ha enseñado lo que es el amor, lo que es sonreir sin razón alguna, lo que es querer estar con esa persona toda tu vida y nunca soltarla, lo que es querer protegerla por siemrpre, por que Eijiro, tú me enseñaste a vivir, y si tuviera que reiniciar mi vida, te elegiría sin dudar, por que te amo -dijo por terminar.

Yo ya estaba sollozando, él me abrazó y coloqué mi cabeza en el hueco de su hombro. Me sequé las lágrimas rápido y seguimos con la boda.
El cura siguió dando el coñazo con sus mierdas, y el rubio y yo estábamos deseando poder comernos la boca el uno al otro.

Cura: Yo os declaro, marido y ma-

Y ahí el rubio no aguantó y me comió la boca.
La gente empezó a llorar y a aplaudir, estaban todos los de la clase, los profesores, algunos héroes profesionales, nuestros familiares y algunos amigos.

Cura: Como son las parejas de ahora... -dijo alejándose del altar dejando al nuevo matrimonio darse amor.

Dejamos la iglesia para irnos al sitio que habiamos reservado para comer, todo el mundo nos felicitaba, estaba mi madre haciendo fotos cada dos por tres, Kaminari jugando con los bebés, en fin, la mejor fiesta. Cuando sacaron la tarta decidimos que la cortara Yukine, la cortó torcida, pero la cortó, hijo de su padre tenía que ser. La fiesta al final terminó y volvimos a casa con Yukine, había sido el mejor día de mi vida sin duda.

Bakugo: ¡Ven con papi Yuki! -dijo con voz ñoña jugando con el pequeño.

Yukine se reía mientras Katsuki le daba besos y demás. Yo observaba la escena desde la cocina, ¿podía ser mi vida más perfecta? Lo dudo.

Kirishima: ¿Quien dijo hace unos años que odiaba a los niños?

Bakugo: Pero odio a los niños que son inútiles, Yukine les supera a todos -dijo orgulloso de su hijo.

Le dimos de cenar al pequeño y lo acostamos en su cuna. El pequeño se durmió, y el rubio y yo lo contemplabamos mientras nos abrazabamos.

Kirishima: Amo como tratas a Yukine -dije dándole besos.

Bakugo: <<Solo por tí>>

........................................................................

Holaa!
Han llegado al final de la historia...
¡Pero parad ahí! Este es el final de la historia contada por Kirishima, he decido subir una historia paralela sobre la vida de Yukine, así que la historia continúa :D

Tengo que daros muchísimas gracias por todo el apoyo que me habéis dado al largo de toda la historia, me habéis animado a seguir con ella, gracias a todos❤

¡Os veo dentro de poco!

😗❤

•~★Solo por tí★~•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora