| 11 | ¡Viva el amor!

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—¡Vamos!— la chica insistió.

—Lo lamento señorita, pero el no puede salir en este horario, lo hubiese pedido en la mañana.

—'Pero estaba solucionando cosas en la mañana'— pensó la chica mientras rodaba los ojos.

El guardia levantó una ceja al ver esa acción, se cruzó de brazos y le quitó importancia.

—Solo será por unos minutos.

El hombre negó.

—¡Por favor!.

—No. Además, ¿Para que lo necesita?.

—Es algo entre él y yo. No pienso contarle— Webby se cruzó de brazos.

—Entiendo. Yo tampoco puedo dejar al nieto del señor Scrooge sólo.

—¡Pero no estará sólo!.

—Aun así la respuesta sigue siendo, no.

La chica le dió la espalda. Se mordió ligeramente el labio y jaló un poco su cabello—'¡Por qué! ¡Diablos!'— se quejó mentalmente— 'No importa si lo saco a escondidas todos se darán cuenta, y además no puedo huir con una silla de ruedas en manos. Ésto ya no está funcionando...'— reflexiono mentalmente.

—Señorita Webby, señor guardia.

La nombrada salió de sus pensamientos, se dió vuelta y observo sorprendida a la recién llegada, casualmente era la doctora que la atendía.

—¿Que hace... aquí?.

—O nada realmente, solo quería hablar con usted.

—¿Conmigo?— la confusión era notoria en la cara de la adolescente.

—Si, solo será por unos momentos— la mujer se acercó a ella y la llevo por los hombros a una habitación cercana.

Ya allí hablaron.

—Yo lo distraigo y tú lo sacas.

—¿Qué?— Webby estaba aun más confundida.

—Yo distraigo al guardia y tú sacas a tu amigo Louie, ¿Si o no?.

—¿Sí? ¡Si! Oiga ¿Por qué me ayuda?.

—Porque aunque tú no me hayas contado nada, yo sé todo lo que sucede entre el paciente Duck y tú. Y quiero ayudarte a solucionar el problema que llevo a dejar que se comuniquen.

—¿Enserio? Wow, gracias yo-— la chica fue interrumpída.

—Ademas extraño verlos juntos, eran tan adorables, notaba sus sonrojos, sus coqueteos se oian suaves y-— la chica colocó sus brazos a la altura de la mujer y hacía movimientos pidiendo que parará.

—Si, si, ya— Webby se encontraba sonrojada.

—Tranquila, jaja. Ahora quédate aquí, le pedire al guardia que me ayude en mi oficina, cuando escuches que mencioné tu nombre, tu ve y buscas a tu amigo, te recomiendo que no vallan muy lejos.

—No será necesario que lo busque, compartimos habitación. Además el guardia solo espera en la entrada del lugar, no había tanto problema.

—Pero ya puse en marcha mi plan, ahora a seguirlo ¿Okey?— comentó la doctora.

—Entiendo, gracias otra vez por ayudarme.

—Denada. Ahora saldré y tú esperarás la señal.

—Si.

...

—¿Porque parece esto un robó?.

—¿Un robó? Yo no estoy robando nada.

Dulce Idiota |Ducktales| ✓•Loubby•✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora