|T R E S|

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Las horas faltantes habían pasado rápido y como si fuera en un abrir y cerrar de ojos ya habían tocado el timbre para finalizar las clases.

-Que tengan un feliz día chicos -apenas Jennie finalizó de hablar ya todos lo estudiantes comenzaron a guardar sus cosas para levantarse e irse a sus casa o a reunirse con sus amigos.

-Hasta mañana maestra Kim -decían los estudiantes mientras salían del aula.

Al ver que nadie quedaba tomo tu cartera y salió del aula, recordó que tenía que ir a detención y eso significaba dos horas más en la escuela.

No tenía planeado que en su primer día tenga que estar dos horas más de lo acordado y más si es en detención.

Camino directo a la sala y al entrar vio a Lalisa ya sentada al inicio de la fila.

Entro para caminar hacia el escritorio y tomo asiento y miro la hora, las 3 de la tarde, miro como Lalisa solo la observaba.

-Bueno, estaremos aquí las próximas dos horas, supongo que ya sabes que no tienes que hablar y solo mantenerte tranquila -hablo Jennie mientras sacaba su cuaderno y comenzaba a escribir la clase del día siguiente.

Lisa solo asintió con la cabeza cuando Jennie la miro, comenzó a jugar con su pulsera mientras para matar el tiempo.

-Disculpe, maestra Kim habló Lisa por lo bajo pero aún así logro captar la atención de la mayor quien solo soltó un "¿que pasa?" pero mantenía su mirada en su cuaderno-, de casualidad ¿Tendrá algo para no aburrirme tanto? -terminó de hablar para luego recibir una mirada incrédula de Jennie.

-¿Hablas en serio? -preguntó mirándola como si tuviera dos cabezas a los que Lisa solo bajo la mirada avergonzada, al no tener respuesta de Lisa continuo escribiendo en su cuaderno.

Mientras escribía recordó la sopa de letras de la pequeña Lía quien se lo entrego cuando se iba a la escuela.

Sacó la sopa de letras y tomo un lápiz para luego levantarse y caminar a dónde estaba Lisa.

-Toma -dijo al frente de ella logrando que ella la mirara para luego mirar lo que le entregaba.

-¡Gracias maestra Kim! -tomo la sopa de letras junto con el lápiz de la mano de Jennie con una sonrisa, al mirarlo bien soltó una pequeña risa-, ¿le gustan los muñequitos, maestra Kim? -preguntó al ver la portada de la sopa de letras, a simple vista se podía ver lo infantil que era.

-No, me lo dió Lía está mañana -dijo mientras caminaba de vuelta a su asiento.

-Pensé que no tenía hijos, como usted dijo que no era casada -dijo Lisa mientras comenzaba a llenar la sopa de letras.

-No tengo, Lía es mi sobrina, la estaba cuidando y cuando la dejé en la escuela me dio eso -respondió sin importancia para seguir escribiendo en su cuaderno.

-Oh ya veo, disculpe -hablo apenada Lisa, sentía como si estuviera incomodando a Jennie o metiéndose mucho en su vida privada.

-No tienes que disculparte -finalizó para seguir en lo que ella estaba.

Y así pasaron las dos horas, con Jennie adelantando la clase del día siguiente y con Lisa llenando el sopa de letras.

Cuando Jennie miro la hora vio que había tardado más de las dos horas, casi cumplían tres horas en la escuela.

Se levantó mientras recogía toda sus cosas, cosa que no pasó desapercibida por Lisa.

-Ya se acabó la hora de detención -dijo Jennie a lo que Lisa se levantó y camino directo a la mayor para entregarle la sopa de letras junto con el lápiz-, ¿lo llenaste todo? -pregunto mientras miraba como le entregaba la sopa de letras.

-No, creo que me quedé por la mitad -respondió Lisa aún con la mano alzada.

-Quédatelo -dijo para luego salir del salón y caminar hacia la salida seguida por Lisa quien guardaba la sopa de letras en su mochila.

Cuando llegó a la salida miro a Jennie quien comenzaba a abrir su sombrilla, cuando miro hacia afuera notó que estaba lloviendo.

-¿Tus padres pueden venir a buscarte? -preguntó Jennie mientras abría su sombrilla.

-No, suelo irme caminando -respondió Lisa sin importancia.

-¿Tienes dinero para el transporte? -volvió a pregunta Jennie quien ahora tenía su mirada puesta en ella.

-Nop, como dije, suelo irme caminando -volvió a repetir-. Hasta mañana, maestra Kim -se despidio para comenzar a salir, cosa que no logro ya que Jennie la agarro de la muñeca y la acerco a ella.

-Yo te llevo, te puedes enfermar -dijo para comenzar a caminar mientras se fijaba que la sombrilla podía cubrirla a ambas.

Sin decir ninguna palabra llegar al auto de Jennie, quien le abrió la puerta del copiloto.

-Entra -dijo o más bien, ordenó Jennie mientras miraba a Lisa, esta entro al auto sin chistar.

Jennie se aseguro de que podía cerrar bien la puerta sin golpearla y la cerro para caminar hasta la puerta del piloto y entro para luego cerrar la sombrilla y cerrar la puerta.

-¿Dónde vives? -peguntó Jennie encendiendo el carro, Lisa le dio la dirección de su casa y Jennie comenzó a manejar-, ¿en serio ibas a ir a tu casa caminando? son más de 10 minuto -hablo Jennie con la vista puesta en la calle.

-Ya estoy acostumbrada -dijo sin importancia Lisa mientras miraba por la ventana.

El resto del viaje fue en total silencio, no era incómodo, era un silencio agradable, cuando Lisa sintió como Jennie paraba el auto se dio cuenta que ya habían llegado a su casa.

Lisa suspiro mientras se aseguraba la mochila al hombro, vio como Jennie le pasaba su sombrilla y la miro extrañada.

-No te vayas a mojar -respondió Jennie mientras le pasaba la sombrilla.

-Gracias -hablo por lo bajo Lisa mientras tomaba la sombrilla-. Hasta mañana, maestra Kim.

Le sonrió y salió del auto mientras agarraba o más bien se aferraba a la sombrilla, soltando otro suspiro saco las llaves de su casa y entro a esta.

Jennie al ver que Lisa entro a su casa procedió a prender de nuevo su auto para ahora ir a su casa, necesitaba relajarse, necesitaba un buen baño y dormir.

Miro por última vez la casa de Lisa y comenzó a manejar directo a su casa.

Bueno, al menos había evitado a qué se enfermará, la había dejado a salvo en su casa, o eso es lo que creía Jennie.

¡Maestra Kim! ↝Jenlisa [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora