-Desde otro punto de vista- (EndeHawks)

3.

Había transcurrido una semana completa desde que era un gato. Su paciencia y esperanzas de que todo volviera a la normalidad no podían estar peor. Entre rondar cerca de la puerta, esperando que una nota apareciera allí y rondar cerca de su pareja para asegurarse que no se atormentara de más, aunque él sabía que eso era imposible después de las cosas que había hecho su pareja a lo largo de la semana.

Hawks se había ocupado de comprarle todo lo necesario, comida para gatos, juguetes y lo más importante, una caja de arena, se había estado aguantado las ganas de ir al baño desde que era un gato pero ya no las podía aguantar más.

Aunque siempre usaba la caja de arena cuando Hawks dormía o estaba ocupado, ya que, por si solo era terriblemente bochornoso tener que usar una caja con arena artificial como si de verdad fuera un animal, para sumarle que él rubio estuviera presente cuando la fuera a usar.

También, cuando Hawks dejo la caja de arena en el suelo para que la usará por primera vez, Enji estuvo casi una hora completa en negación a ir al baño en esa cosa, luego cuando por fin se resignó a dejar de luchar con la naturaleza de un gato, paso una media hora más intentando averiguar cómo la tenía que usar con exactitud.

Enji se sentía cada vez más estúpido con todas las cosas que le pasaban últimamente.

Hawks también se había encargado de llamar a la agencia de Endeavor y dar la noticia de que se encontraba desaparecido y qué se encargarán ellos de informar a la policía, para que dieran con su paradero.

El rubio dudo mucho sobre esa decisión de dar por desaparecido a Endeavor debido a las numerosas noticias sobre su relación, lo que menos necesitaban eran más noticias sobre ellos pero eso era lo de menos, lo importante era que él pelirrojo apareciera.

Lo que Keigo no sabía era que él lindo gatito que había adoptado era él mismo Enji que tan preocupado lo tenía, por no saber dónde estaba.

Y lo que Enji no sabía era que todas sus esperanzas que creía pérdidas, regresarían al ver ese pedazo de papel que fue deslizado debajo de la puerta en la mañana.

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Cuando Enji leyó lo que decía la nota sintió que el alma le regresaba al cuerpo.

Nos vemos en el parque a las 3 de la tarde, espero poder regresarlo a la normalidad señor Endeavor.

Le hubiera gustado encontrar la nota más temprano, pues eran las 2 de la tarde, se habría despertado más temprano pero no durmió casi nada, en realidad no logró dormir nada. Y eso fue debido a cierto rubio que dormía plácidamente. Hawks se despertaba a cada rato en la noche como si tuviera pesadillas y se abrazaba a su felino cuerpo y no lo soltaba, como si buscará un poco de compañía y calor en esa grande y fría cama.

Gracias a eso, Enji no durmió en toda la noche, se la paso cuidando del sueño del rubio y cada vez que este se despertaba, él ronroneaba buscando que este fuera una especie de melodía que logrará que él alado pudiera dormir sin interrupciones y en total calma. Un aquí estoy contigo mudo, unas palabras y un sentimiento que no podía decir, pues no se le entendería, y que no estaba seguro si lograba expresar.

Era como ser prisionero de su propio cuerpo. Sus palabras eran silenciadas y sus acciones eran limitadas. Él mismo era su propio obstáculo.

Le daba paz que el rubio siguiera durmiendo tranquilo después de tener una mala noche. Ahora su problema era el como salir de allí lo más rápido posible, sólo le quedaba una hora para estar en el parque.