Lost |Ray y tu.

Capitulo 3

—Yo era el espía de mamá.–Ray confesó mirando a otro lado.

Emma se exaltó ante tan repentina confesión por lo que ______ se asustó ocultándose tras la espalda de Ray ya que era a quien mas apego tenía.

—Tranquila _______.—Norman le sonrió luego de que Emma se calmara.

—Está bien _______.—Ray la hizo ponerse al frente.—Emma nunca te haría daño.

—Lo siento.—La pelinaranja hizo una reverencia pidiendo perdón.

—No... te...—________ abrazó el brazo de Ray.—Preocupes, Emma.

—Que voz tan dulce.—Emma habló enternecida, muy pocas veces ______ hablaba ya que apenas aprendía.—Eres bueno enseñando Ray.

—Solo quería que aprendiera a comunicarse, no es como si importara.—Ray miró a otro lado con sus mejillas sonrojadas.

En la noche los cuatro volvieron a reunirse incluyendo ahora Gilda y Don los cuales escuchaban atentos cada cosa que sus amigos decían.

—Entonces mamá tiene un cuarto aquí en el cual se comunica con otras granjas.–Emma habló con seguridad.

—Hay que investigar que oculta.–Don propuso.

—Lo que sea que oculte no es nada bueno.—Ray se cruzó de brazo.—Si trajeron aquí a ______ sin saber hablar o decidir por si misma, lo qué hay ahí afuera no es nada bueno.

—Tal vez tengan información de Conny.—Don miró suplicante a los tres.—Tal vez la llevaron a otro orfanato, con tu familia ______.

Pero la antes nombrada tenía la mirada en blanco al recordar ese lugar, sin notarlo las lágrimas bajaron pero no tenía sentimiento alguno, nunca había experimentado el dolor, tristeza, ni amor.

—Ellos... son.—______ se cruzó de brazos.—Malos, Don.

—Entonces hay que sacarlos de ahí, si le hicieron eso a ______ no imagino lo que le pueden hacer a Conny.—Señaló la marca de número que se veía en la pierna.

—Don, no te arriesgues de esa manera.—Norman miró al antes nombrado.

Don y Gilda se miraron mutuamente y asintieron, ambos tenían un plan que iban a efectuar aunque los contrarios no lo quisieran.

—Tengo que ayudar en la cocina.—Don excusó marchándose.

—¡Y-Yo igual!—Gilda lo siguió.

Por su parte los que quedaron en la biblioteca prestaban atención a un libro, parecía tener código morse.

—Monstruos...—______ murmuró.—Hay... muchos monstruos... fuera.

—No volverás con ellos lo prometo.—Emma se acercó a abrazarla mientras los otros dos chicos resolvían el enigma del código.

—Minerva nos dejó un mensaje, hay humanos fuera de este lugar estoy seguro.—Norman asintió.

Mientras seguían investigando Don y Gilda entraron nuevamente nerviosos por lo que minutos atrás habían visto.

—Don, Gilda.—Norman habló.

—¡Ellos están muertos!—Don levantó la voz mientras Gilda intentaba no llorar.

—¡Muertos!—Repitió ______ pensando que era un juego de palabras.

Ray la atrajo a el tratando de que defenderla ante cualquier movimiento brusco de Don.

—Lo siento, lo siento mucho.—Emma hizo una reverencia.

—¿Entonces es verdad?—Gilda temblaba del miedo.

Emma asintió haciendo reír a Don de una forma exagerada mientras Gilda se secaba las pocas lágrimas que se le habían salido.

—Don.—Ray lo llamo haciéndolo reaccionar.

Con mucha furia Don se abalanzó contra los tres amigos golpeando a Norman y Emma, cuando el albino sintió el golpe solo viró un poco la cabeza sabía que se lo merecía.

Pero cuando Don iba a golpear a Ray, _______ reaccionó de forma rápida dándole el golpe haciéndolo dar dos pasos atrás, la miró disgustado y se marchó corriendo.

—Don no tiene... buenos juegos.—_______ hizo un puchero.

—Gracias ________.—Ray asintió con la cabeza, gracias a ella no había recibido ningún golpe.

Norman y Ray salieron del lugar en busca de Don, mientras Emma se quedaba con la de pelo bicolor;—________, hay algunas cosas que... no son juego, son malas.

—¿Hice algo... malo?—Pronunció con dificultad.

—No, realmente.—Emma rio, ambas fueron juntas a ver a Don.

El cual miraba a la luna mientras lloraba;—Realmente soy un inútil, soy una carga para ustedes.—La voz la tenía entrecortada.

—No lo eres.—Emma se acercó posando su mano en el hombro de Don dándole así ánimos.—Lo siento.

—Yo también.–Don agachó la cabeza volteando a ver a los demás.