Cosas de Familia

CAPÍTULO 3 - ACERCAMIENTO

Bruce sabía que no podía retrasarlo más, por lo cual en ese momento Dick estaba en una sala de juntas especial, en la cual Jason Todd, hermano menor de Clark Kent, entraba.

-Buenos días - Saludo el alfa con galantería al lindo omega que estaba sentado en la mesa con las piernas cruzadas, este le sonrió coqueto

-Hola - Ronroneó Richard Wayne, un escalofrío le paso a Jason por toda la columna vertebral - ¿Tú eres Jason?

-Sí - Contestó acercándose y dándole la mano, Dick río tomándola suavemente - Tú debes ser Richard

-Llámame Dick, así me dicen los cercanos a mí - Contestó coqueto y risueño, Jason podría jurar que esa risa le estaba provocando una erección

El silencio quedó en el aire mientras que Dick sonreía y Jason no tenía idea de que hacer, iba a ver a Bruce Wayne, pero la secretaría le informó que el señor estaba muy ocupado y lo atendería su hijo, el bellísimo Dick.

-¿Y entonces vienes a hablar o solo a mirarme? - Preguntó Dick estirando las piernas para después llevar una hacía arriba totalmente estirada y prácticamente dejarla vertical con su cuerpo, Jason solo pudo tragar fuerte, el ambiente se había llenado de feromonas de omega en estado de celo.

-Que flexible – Fue lo único que pudo decir, Dick río y se levantó, alargó unos papeles hacia Jason y le entregó una pluma que el alfa tomó al instante

-Soy mucho más flexible – Murmuró y apoyándose en una silla, elevó sus piernas, solo sostenido de sus brazos, en esa posición abrió las piernas hasta quedar casi como una T, Jason tenía la boca seca ante el espectáculo – Vienes a firmar

-Cierto – Jason tomó el bolígrafo y miró los papeles.

-Despierta idiota, te está seduciendo – Jason paro el movimiento ante la voz

-¿Qué? - Jason miró hacia Dick y abrió grande los ojos – Oh por todos los cielos, ¿cuánto cobras por hora?

-¿Qué? - Dick frunció el ceño ante lo dicho por el alfa

-Me ibas a hacer firmar sin leer, muy listo - Contestó Jason al omega que lo miraba con la boca abierta – No me malinterpretes, eres hermoso y no dudo que todos caigan a tus pies, pero debo decirte que aunque consigas mi firma, la que vale es la de mi hermano

-¿Cómo? - Preguntó Dick parándose derecho con indignación, Jason soltó un resoplido de risa

-Pues eso - Contestó el alfa con diversión - Mi firma no vale nada sin la firma de Clark, pero debo decirte que te doy crédito, me llevaré esto y lo leeré con calma con mi hermano, te llegará mi contra propuesta

Dick se había quedado con la boca abierta, no sabía qué demonios había pasado en ese lugar, él había entrenado mucho para lograr manejar a su antojo tanto su cuerpo como sus feromonas. Jason iba saliendo, pero se devolvió y lo miró de arriba abajo

-Y otra cosa – Le dijo con una sonrisa torcida - Disfruté mucho el espectáculo

Jason salió del lugar ante la estupefacción del omega que dejó en la sala de juntas, se despidió de la secretaría y se subió al ascensor

-Bien hecho hermanos – La voz que lo había sacado de la ensoñación de ese cuerpo y esas feromonas, volvió a hablarle

-Clark me salvaste – Aunque era cierto, se podía evidenciar cierta ira en el timbre del alfa menor, este soltó la carcajada hacienda resoplar a Jason

-Por suerte escuche todo, sino serías propiedad de los Wayne – Fue lo que dijo con aire divertido, Jason volvió a resoplar - ¿Ahora si lo quieres de esposo?