Por un sueño

Sueño o imaginación - Segunda parte [Cuento #05]

Nos fuimos a informar junto a su mamá a los días siguiente sobre la beca. Todo era como esperábamos, todo era real: la inscripción, las calificaciones, los premios... Solo que luego nos enteramos que los exámenes no iniciarían este año, sino a finales del año entrante, y es que anunciaron que iniciaban desde tan tempranas fechas porque era un precedente que cubriría a todo el globo; nos dimos cuenta entonces, a las próximas semanas que las sospechas de falsos avisos se borraron de las mentes de toda la población, y los jóvenes tuvieron que hacer interminables colas para inscribirse. Dichos módulos no se dieron abasto y se expandieron en otras zonas para así cubrir a más personas.

Mi portadora siguió estudiando el resto del año. Todo se tornó de paciencia al saber que ya solo faltaba esperar a que la fecha llegue y así acudir a los exámenes. Un dato curioso de todo esto es que el año entrante es el último año de escuela de ella, y finalizando el año acudiría a los exámenes, como si de un remate oportunista se tratase.

Y así ocurriría. Llegando su cumpleaños en marzo, manteniendo con dieciséis temporadas de vida; cargando continuamente unos meses más y tratando de no llevar problemas que no le convenían escuchar. Y es que nunca se le hiso ajeno prestarse de unas imágenes que esperaba no recordar, entrecerrando los ojos para distorsionar memorias pasadas y quizás futuras, manteniendo su constante perseverancia ante prejuicios que otras manos señalaban, confrontando así el poema que le mostraba una neutralidad infinita, pero pasajera para mí, algo que espero que nunca se entere. Y es que no pretendo ser la imaginación que en sus sueños evoca.

Qué es la noche sin el llanto de mi niña.
Qué sentiría la piel que no se presentó nunca.
Qué reclamarían los labios rojos del dolor.
Qué se sospecharía si la duda nunca se plantó.

Y aunque todo aquí este roto, a oscuras.
Erosionando la mente que lo sostiene,
manteniendo el canto desgarrado del amanecer.
Preguntando en el camino de si el sentimiento cambiará.

¿Dando oportunidad desde lejos para seguir?
Sin lograr nada en vida, qué podrá hacer desde el suelo.
Sabiendo que sus ojos están ya cerrados,
y aun diciendo: si tan solo fueras un recuerdo.

—Todo es imperdonable cuando se trata de ti hija mía —se escuchó una voz en lo profundo de la mente de la niña mientras dormía.

Eres la única y única para mí.
¿Por qué nunca voltee a mirarte?
¿Por qué el mundo me tentó tan vilmente?
La primera y la última entre mis bellezas.

Y si mis lágrimas no curan mi pasado,
aun cuando ni brotan desde el suelo.
Enterrado, escondido, sin acción y ni consuelo.
Y si tu futuro sigue sin cambiar...
Recuerda que aun sin ti, te sigo amando.