IV

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Chapter IV: Chevy

⇁ Rubio, quiero mi cabello rubio ⇁Ji Min miró a la Beta a través del espejo viendo como esta alzaba una ceja con una leve sonrisa en sus labios

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⇁ Rubio, quiero mi cabello rubio ⇁Ji Min miró a la Beta a través del espejo viendo como esta alzaba una ceja con una leve sonrisa en sus labios.

⇁ ¿Rubio?, ¿De qué hablas, Ji Min? Tu cabello se quedará neg.... ⇁Mi Nah no logró terminar su frase de derrocamiento hacia su hijo por el interrumpido de la Beta que tenía como estilista Ji Min.

⇁ Ese color quedaría muy bien en su hijo si me permite opinar, señora Park, le dará un toque inocente a su persona, lo ideal para un Omega.

Mi Nah pareció reaccionar ante las palabras de la chica. Ji Min tenía que verse puro e inocente con un toque de sensualidad en su persona para atraer a un buen Alfa. Comenzó a imaginar a su hijo con el cabello rubio y del cómo este sería visto como un alma pura a la par que sensual.

Perfecto.

⇁ Bien, hazlo y procura cuidar el cabello ⇁Dicho eso la Omega fue a sentarse a una de las bancas de espera mientras leía una revista preguntándose internamente del por qué Ji Min había querido cambiar su aspecto de momento a otro. Aquello era muy extraño puesto que nunca había opinado sobre cómo quería su cabello. Siempre fue ella la que había dado órdenes sobre este, ¿Qué cambió ahora? No lo sabía. Le enojaba tener cabos sueltos en la ecuación.

Mi Nah cerró sus ojos unos instantes queriendo descansar un poco la vista, pero esto fue imposible cuando las imágenes de los días anteriores llegaron a sus ojos seguido de los gritos que se repetían una y otra vez en su mente.

‘‘⇁ ¡Por favor, mamá, dile que se detenga!, ¡Por amor a Dios, detenle! ⇁Sollozaba’’.

La Omega abrió lentamente sus ojos, su animal sollozaba dentro de ella, el instinto maternal salía a flote, pero ella era una buena mujer y no contradecía a su Alfa.

⇁ Gracias por ayudarme ⇁Ji Min miró a Ha Neul. La Beta siempre lo atendía cuando de su cabello se tratase y sabía lo que era su madre, la chica hasta cierto punto lo hacía sentir cómodo mientras arreglaba su cabello, eran como dos amigos hablando de la vida sin inmiscuirse en lo personal, era una persona cálida que le hacía sentir bien, pero no tan bien como Jae Hyun.

La vida de Ji Min en este momento era hermosa, había luz en sus ojos, reía siempre, se arreglaba en las mañanas con la esperanza de gustarle a Jae Hyun todos los días que lo viera… Esos tres meses a su lado habían sido lo mejor de su vida, el mayor pasaba atento a él, siempre se la pasaban texteando o en llamadas, pero lo que a Ji Min le llenaba el corazón era saber que el Alfa siempre estaba pensando en él como lo hacía el Omega.

Los mensajes de buenos días lo hacían levantarse con una sonrisa en sus labios y querer empezar el día, los regalos que Yun-O le hacía se sentían como una caricia al alma, sus escapadas al mirador que se basaban en risas y besos que repetía un sin fin de vece. ¿Cuándo sería la próxima vez que se verían y cómo repetirían cada beso?

Resilience  ||YoonMin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora