El pacto

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La mañana siguiente fue como cualquier otra. Mi alarma sonó a las 6.30, saqué mi nueva falda y la blusa antes de caminar penosamente por las escaleras y entrar a la cocina. Puse una rebanada de pan en la tostadora y preparé una taza de té, estaba poniendo el azúcar en mi taza cuando escuché algo detrás de mí. "no deberías ponerle azúcar", resonó la voz de mi mamá a través de la cocina, "Usa edulcorante, te ahorrarán esos kilos de más que tienes en la cintura".

"Lo recordaré la próxima vez", le dije con una sonrisa falsa y con un tono sarcástico. Era mi primer día en una nueva preparatoria y yo no estaba de humor para charlas sobre mis calificaciones o miradas pesadas, pero parecía que las iba a recibir de todos modos."Y puedes hacer algo con tu pelo? Se ve tan desordenado ", continuó mi madre en el fondo de la cocina. Unté mantequilla baja en grasa en mi tostada y le di un mordisco, pero al parecer ni siquiera eso era correcto. "¿De verdad tienes que comer, con tu uniforme?", Dijo mientras frenéticamente me limpiaba las migajas de mi blusa.

Salí rápidamente de la casa, dejando a mi madre con la chaqueta en la mano. Caminé en dirección opuesta a la de la noche anterior, pero mi mente estaba centrada en el puente. Suspiré y pensé que no me iba a hacer bien pensar en eso todo el día. ¿Quién sabe cuándo lo voy a intentar de nuevo, tal vez esta noche? Tal vez la semana que viene? Por ahora sólo estaba centrada en llegar a la escuela. Fue sólo un paseo de cinco minutos y antes de darme cuenta que estaba caminando a través de las puertas de entrada de mi nueva escuela. Había un profesor de pie junto a la entrada, entregando los horarios generales y un mapa de todos los pisos y salones que habían en la escuela, el alto parlante anunció: "Todos los estudiantes que empiezan el año a las 8am a la sala de orientación." Miré el calendario que mostraba todos los temas disponibles para cada período. Hoy no tendría ninguna lección, ya que tenía la orientación, pero mañana me tocaba literatura latina, inglés, Teatro y Estudios Religiosos, que eran los temas que se estudian en los primeros dos años (si lograba sobrevivir tanto tiempo).

Estudié el mapa y descubrí dónde tenía que ir antes de subir por las escaleras. Lo primero que me di cuenta es que esta escuela tenía un montón de escaleras. Me perdí en cuestión de minutos, y terminé pidiendo ayuda a un maestro para las direcciones. Cuando llegué a la sala noté que no eran tantos chicos, pero ninguno entablaba una conversación. En mi última escuela, todo el mundo hablaba con todo el mundo, pero aquí todas las sillas estaban en los círculos y parecía que nadie conocía a nadie, entonces mi única opción era quedarme sola, así que cogí una silla y fingí mirar mi teléfono. En lugar de enviar un mensaje de texto, eché un vistazo alrededor de la habitación para tratar de ver si algún grupo parecía remotamente acogedor. Estaba sola, cuando detuve mi vista a pocos metros de donde yo me encontraba, distinguí a Daniela. Tenía a Cinco chicas populares a su alrededor como si ella fuera reina. Yo no podría creer esto. Si ella me veía y me reconocía me podía arruinar, ella era obviamente popular y por lo tanto una palabra de ella sería creída por todo el año. Me levanté con la intención de salir por la puerta con la cabeza hacia abajo, pero justo cuando di un paso un profesor entró y llamó la atención de la gente.

"Bienvenidos, bienvenidos todos! Bienvenido a xxxxxxx, espero que todos ustedes estén bien? Yo soy Miss Belkin, profesora de este curso y por lo tanto cualquier pregunta, problema o consulta debe ser dirigido a mí. Hoy voy a designar puestos en grupos y pueden pasar el resto del día conociendo la escuela. "Ella empezó a leer los nombres de cada grupo, y escuché con atención el nombre de Daniela, rezando para que no me tocara en el mismo grupo que ella.

"El 3 grupo será Daniela Calle ..." Levanté mi cabeza para ver si Dani reaccionaba con este nombre, lo cual hizo. Crucé los dedos y recé en mi cabeza: "Por favor no me pongas en el 3 ... Por favor ..." Había quince estudiantes en cada grupo y Miss Belkin había destinado hasta el momento a diez. Las posibilidades de que yo esté en el mismo grupo con Daniela estaban siendo más y más, y me empecé a desesperar "Charlotte Jones, McDonald Harriet, y finalmente... María José Garzón." Mi corazón se calló suelo. Traté de no hacer caso, después de todo la profesora Belkin no me nombró como Poché, así Dani probablemente no se dio cuenta que yo estaba ahí. Los nombres fueron leídos por una vez más y luego nos dijo que encontramos al maestro para nuestro grupo, salimos de aquella sala, y nos encontramos con un hombre corpulento, de mediana edad que estaba de pie con un cartel que decía 3er grupo así que comencé a caminar hacia él. A medida que llegué a nuestro salón de clases me las arreglé para permanecer detrás de Daniela y que ella no me viera. ¿Cómo demonios iba a hacer esto por los próximos dos años? Tal vez podría cambiar de clase... o incluso cambiar de escuela.

Antes de entrar en el aula nuevamente después del receso, miré rápidamente para ver donde estaba Daniela. Se encontraba sentada en un escritorio justo en el medio de la habitación al lado de una chica con el pelo largo y de color rojo. Agaché la cabeza y fingí rascarme la frente con el fin de cubrir mi cara con la mano y me apresuré a tomar asiento en la parte de atrás de la clase. Justo cuando estaba a punto de sentarme el maestro dijo: "Si pudiéramos llenar el frente por favor señorita Garzón? Hay un asiento al otro lado de la señorita de Calle. "Ella estaba tomando un sorbo de agua y no se molestó en volverse. Mi corazón latía con fuerza en mi cabeza mientras caminaba lentamente hacia la silla. El profesor interrumpió mis pensamientos y me preguntó: "Lo siento cual es su primer nombre? María José, ¿verdad? "No tenía más remedio que responder:" Sí maestro respondí. "Calle miró hacía mi y tosió mientras se atragantaba con el agua. Se dio la vuelta para ver si era la misma persona de la noche anterior, que por supuesto era yo.

Tímidamente me puse mi bolsa en el suelo y me senté en la silla que estaba junto a Calle. Todo el mundo me miró, el maestro comenzó, "Busquen pareja con la persona a su lado y aprendan algo uno del otro. Quiero que todos salgan de aquí al menos con un nuevo amigo. "La chica con el pelo rojo se volvió para hablar con Dani, y parecía ofendida cuando Calle le dio la espalda para hablar conmigo, ella recogió su bolso y se dirigió a otro chico en la parte delantera de la clase. Estaba a punto de suplicar y rogar a Daniela no decir nada a nadie, pero ella se me adelantó. "No se puede decir nada", dijo ella con urgencia ", por favor. "No le diré a nadie que te vi, si no se lo dices a nadie que me viste".

"Ok", le dije inmediatamente. Pasamos la siguiente media hora hablando de todo. Ella estaba tomando Artes Escénicas, Música, Teatro, inglés y Literatura, así que teníamos dos clases juntas. Ella tiene una hermana mayor, y yo le hablé de mi hermana pequeña Valentina, que tiene cinco años. Su secreto culpable es que ella colecciona cómics, y la mía es que puedo resolver el cubo de Rubik. Yo estaba en lo cierto acerca de la perforación de la nariz de anoche, ahora lo podía ver con más claridad. Cuando nos quedamos sin datos personales que hablar nos sentamos allí en un silencio incómodo. Era evidente que las dos estábamos pensando en el puente. Daniela rápidamente miró a su alrededor para ver si alguien estaba lo suficientemente cerca para escuchar la conversación, pero por suerte todos estaban esparcidos alrededor de la habitación, así que ella dijo: "¿Vas a intentarlo otra vez?" Yo sabía que ella estaba hablando del suicidio. De alguna manera, sentía una conexión especial con Calle, asi que no tenía temor de decirle lo que pensaba: "Yo no voy a dejar de intentarlo hasta que me muera".

Daniela asintió con la cabeza y respondió: "Yo sé cómo se siente." Nos sentamos allí por un tiempo pensando las cosas. El silencio fue roto por Calle mientras decía: "Esto puede ser una locura, pero ¿has pensado alguna vez en un pacto?"

"¿Qué quieres decir?" Creo que sabía lo que quería decir, pero quería estar segura.

Ella calmó su voz, "Un pacto suicida".

Tomé una bocanada de aire mientras lo consideraba, y respondí: "Se me ocurrió una vez o dos veces, pero nunca he conocido a alguien en la misma situación que yo."

"Yo tampoco," dijo, "Anoche fue casi como el destino nos quisiera juntar, digo, por la forma en que ambas terminamos en el mismo lugar al mismo tiempo haciendo lo mismo. Y luego otra vez esta mañana estamos en la misma escuela. Si hacemos un pacto suicida, ¿y si nos fijamos una fecha, por ejemplo un mes a partir de ahora y todos los días hasta entonces hacemos todo lo que siempre has querido hacer?. Realmente vivir la vida al máximo?"

Dani miró ansiosa esperando mi respuesta. "Realmente me gusta el sonido de eso. Pero un mes es mucho tiempo. ¿Qué tal dos semanas? Dos semanas de vivir al extremo y luego a los quince días se completa el pacto. "Ahora yo estaba ansiosa. Pero Daniela aceptará tan poco tiempo?

Mi corazón dio un salto cuando ella me tendió la mano y yo se la estreché. Nos sentamos allí sonriendo como idiotas. Por lo menos, me alegré de que hoy me hubiera hecho una amiga. Calle escribió algo en un pedazo de papel y dijo: "Aquí está mi número y dirección."

"Perfecto", le dije a Dani con una sonrisa. Miré hacia abajo, el papel con la dirección, y me sorprendió al ver que ella vivía muy cerca de mí, estaba a sólo unos diez minutos a pie. Nos pusimos de acuerdo.

"Llámame loca, pero yo estaba muy emocionada de iniciar este pacto." – me dijo antes de salir de clase.

14 días de vida con Daniela Calle [Caché] Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora