Salto de tiburón · parte 3 (final) // AU

468 56 7
                                    

Sehnsucht es un concepto proveniente del romanticismo alemán. Suele traducirse al deseo hacia algo aparentemente inalcanzable, ese anhelo arde y te impulsa a vivir en su búsqueda. Samantha encontró esta palabra en un poemario hacía unas semanas, y de seguida la relacionó con la música. Así es como la hacía sentir, viva y tan necesaria como el aire de sus pulmones.

Que la llamen dramática, pero está segura de que hay una parte de su amor hacia su vecino que se basa en justamente eso. Sin esforzarse demasiado había pasado a ser parte de su viaje musical, y como todas las otras personas que conoce a través de este arte, su conexión se beneficiaba de ello.

A veces le entraban ganas de mandarlo todo a la mierda e ir hasta su apartamento. Tampoco es como si después quisiera volver al suyo, cada vez estaba más segura de ello. Sin embargo, entendía la importancia de las medidas y no se atrevería a contradecirlas. Le tocaba esperar un tiempo más, aunque la situación parecía alargarse de manera interminable.

El mundo parecía cada vez más loco, y siempre volvía a releer aquello que había escrito al principio del confinamiento. Definitivamente su mundo parecía escrito por guionistas sin ideas de series innecesariamente alargadas, y cada vez se le hacía más pesado el Salto de Tiburón. Parecían querer competir con algunas de aquellas que había estado compartiendo con el murciano estos últimos meses.

Perdida en sus pensamientos, no se había percatado del paso del tiempo hasta que su teléfono empezó a vibrar. Cada vez le ocurría más, las líneas del tiempo difuminándose al caer en la monotonía. Una sonrisa adornó sus labios en cuanto vio quien era. Su hermana y ella siempre habían estado muy unidas, y no haberse visto en tanto tiempo empezaba a dolerles.

Solían hacer videollamada dos o tres veces a la semana con sus padres, por ello era una sorpresa que la llamara así de la nada. La preocupación llenó su mente por un momento hasta que pudo ver a su hermana y comprobó que estaba feliz, entonces se relajó. Se notaba que quería contarle algo, pero empezó por preguntas irrelevantes.

Tras veinte minutos de una conversación que evitaba lo importante, Samantha perdió la paciencia y le preguntó directamente qué había pasado para que la llamara entonces. Soltó una pequeña broma de "no poder trucar la seua germana a qualsevol hora perquè estava molt ocupada", pero no podía contenerse más y lo soltó todo. Estaba embarazada, y Samantha creyó que le iba a explotar el pecho de la ilusión.

Siguieron conversando por prácticamente una hora más sobre todo lo que ya habían descubierto después de ir al médico, ambas demasiado pletóricas como para querer finalizar la videollamada. Para cuando se despidieron, la luz solar había dado paso a la lunar.

Samantha solo podía pensar en las nuevas noticias, seguía eufórica. Sin parar a pensarlo, buscó a Flavio entre sus contactos e inició una videollamada. En cuanto se la cogió, empezó a soltar todo lo que le había explicado su hermana, de un tirón, casi sin respirar.

Al acabar su apresurado relato, escuchó una carcajada des del otro lado de la pantalla. Debido a su impaciencia, no se había dado cuenta de que Flavio parecía acabado de despertar. Sin camiseta, con el pelo revuelto y los ojos nublados por el sueño. Y con lo rápido que había hablado seguro que ni siquiera había podido entenderla. La risa del chico no aflojaba, y Samantha no tuvo otra opción que unirse a él.

—A ver, ¿qué te ha puesto a ti tan feliz? —preguntó el chico, aun un poco ahogado.

—Mi hermana está embarazada. —su sonrisa amenazaba con salir de su cara—. Me lo acaba de contar, llevamos toda la tarde hablando.

—Eso es increíble. ¡Felicidades!

Procedió a volver a contarle, esta vez más calmada, la información que hacía recibido de su hermana. Ni siquiera se acordó hasta después de haber terminado que él no la conocía, sabía poco más de ella que las historias que le había explicado de cuando eran más pequeñas.

Forelsket {flamantha}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora