~Sugar Daddy~ -Jaeyong- {Taeyong x Jaehyun} NCT

24: Demasiada Tensión Para Jaehyun

Jaehyun suspiró cansado y abrió sus ojos estupefacto. No sabía que era pero cada vez que ocurrían esas cosas deseaba ir por más. Así que cuando terminaban y se separaban el uno del otro, solía surmergirse en lo más profundo de su mente preguntándose a sí mismo que estaba ocurriendo ahí.

A veces hasta quedaba hecho todo un desastre. Quedaba con el pelo totalmente desordenado, con su ropa arrugada, con sus mejillas tornadas en un suave color carmín (inconscientemente) y de vez en cuando hasta con los labios rojos. Solo tenía cuatro palabras que decir: Taeyong era un bruto.

Los labios podían quedar en ese color bien por dos razones: una; por el color del labial del pelirrojo, o bien por la segunda; como anteriormente dije, Taeyong era un bruto. Besaba aquellos labios con todo el deseo del mundo. Bueno mentira, todo el deseo no, eso seguramente no era ni la mitad.

Jaehyun había visto besos de todos los tipos, sabía que habían besos en los que hacían uso de la lengua, o como no, las típicas mordidas cuando estaban totalmente desesperados. El mayor no hacía ninguna de esas dos cosas (y menos mal) porque sino, Jae hubiera quedado con el labio totalmente destrozado.

Si ahora sus rosados labios estaban rojos y medio hinchados, no se imaginaba cuando se emplearan las lenguas y dientes. Con lo poco que conocía a Taeyong, sabía que le besaría como una fiera.

Si, cada vez que terminaban de besarse, el pelirrosa pensaba todo eso en su pequeña cabecita.

Sin embargo, en su interior sentía la necesidad de ir a más. No se refería a acostarse, aún no estaba preparado para eso, pero se sentía desesperado y necesitado. Si, necesitado.

Le costaba aceptarlo y admitirlo, pero si, el de hebras rojas le había provocado una semi-erección. No lo admitiría, por nada del mundo, pero para eso estoy yo, para deciros que fue así.

Justo en esos momentos el menor se preguntaba a si mismo como podía ser eso posible.
Es que ni él lo sabía.

Solo tenía una respuesta en mente, y era que aquella experiencia de la última vez fue la mejor. Aún recuerda cómo los días siguientes a ese no podía olvidar la sensación de placer, le era imposible. Estuvo necesitado, pero se aguantó. Simplemente su orgullo está por delante de todo.

Quizás no conseguía superar eso todavía.

"A quién quiero engañar... Fue increíble"

Comparado con él, el más alto se veía tranquilo y feliz. Lo dedujo por la amplia sonrisa que adornaba sus labios. Mientras que él era, un caos total.. Tanto como por fuera como por dentro. Sus entrañas se revolvían y su corazón latía muy rápido, sin olvidar el sudor que caía por su frente debido al nerviosismo.
Se le notaba tenso e inquieto.

¿Por qué? En serio, necesitaba que Lee le ayudara. Fue el único hasta ahora que pudo haberle satisfacido de tal manera.

Ahora se daba cuenta de que esa sensación la vivían las parejas cuando se besaban. Recordó haber visto películas en las que dos enamorados comenzaban con un beso lento y romántico, subian de nivel poco a poco hasta llegar al beso salvaje.. Después, de manera fugaz subian bruscamente el nivel y añadían sus lenguas y dientes. Y luego adivinen qué. El acostarse.

Entonces, lo que él estaba pasando en esos momentos era algo completamente normal. Parecido también. Nada del otro mundo.
Solo estaba viviendo la experiencia del "quiero más y más". Solo que en vez de acostarse solo quería ser masturbado por el mayor.

"Puto profesional de mierda"

-- Jaehyun ¿te encuentras bien? -- preguntó el mayor en cuanto notó la expresión en el rostro de Jaehyun.