54: Bajo Los Colores Del Atardecer

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Taeyong y Jaehyun ahora se encontraban en el piso de abajo, Taeyong desayunando para marcharse al trabajo y llevar al menor a su casa, y éste matando el tiempo escribiendo su tarea de matemáticas.

-- Jaehyun -- llamó el mayor, el contrario levantó su vista de su libro -- ¿Seguro que no te duele el culo?

-- Que no -- frunció su ceño cansado de escuchar aquello, era la tercera vez que le preguntaba.

-- Bueno, no quiero que llegues a casa y no puedas sentarte en el sofá, a saber qué pensaría tu madre si viera que no puedes sentarte -- apoyó su barbilla en su dedo índice

-- No me duele, por ahora -- masajeó sus muslos bajando su mirada para verlos -- Pero mis muslos sí, cabrón

-- ¿Los hombros y las clavículas no?

-- ¿Por qué me dole-? ¡TAEYONG! -- en seguida se dio cuenta del intenso rojo y púrpura de la que estaba cubierta su piel en el lugar donde se situaban las clavícula.

¡Taeyong estaba loco! ¿¡Como se le ocurría hacer eso?

-- ¡Voy a gastar la mitad de mi maquillaje en esta mierda! -- susurró no queriendo que la mujer de la cocina lo escuche

El pelirrojo solo sonrió soltando una baja risilla, Jaehyun estaba incrédulo.

-- Me vas a comprar maquillaje -- pareció decirlo demandantemente

-- Cualquier cosa bebe -- le miró con una ancha sonrisa, sacando del bajo un leve sonrojo

Éste último nombrado apartó su mirada en silencio. Al haber retomado su color natural volvió a hablar, no se quería demostrar tímido delante de su Sugar Daddy

-- Y otra cosa. Que ya lo hayamos hecho no significa que lo vayamos a hacer todos los días -- aseguró con firmeza

-- Mm... -- asintió indiferente cogiendo con el tenedor otro pedazo de su desayuno

Jae hubiera ignorado ese movimiento de su cabeza de no ser porque Lee lo había dicho con mucha indiferencia, como si estuviese diciendo "ya veremos"

-- Lo digo en serio

-- Sí sí -- rió y al fin levantó su vista de su plato

-- Eres tan molesto -- dijo entre dientes, apretando los mismos y también entrecerrando sus ojos

-- Cuidado con lo que dices

-- Pff, como si fueras a hacerme algo -- apartó su vista restándole importancia

-- No sabes lo que puedo hacer, ni sabes lo que tengo en la habitación -- apuntó a su Sugar Baby con el tenedor.

El menor se encogió de hombros. Ahora lo había asustado siendo honestos. Es verdad, no sabía lo que tenía en la habitación. Y siendo un hombre tan pervertido, prefería no saberlo.

Lo que hacía falta, Taeyong había vuelto a ser el mismo pervertido que era cuando nada más se habían conocido.
Bueno, ahora le tocaba aguantarse.

El alto terminó su desayuno y seguido de eso se levantó para ponerse el abrigo y salir. El pelirrosa hizo lo mismo y recogió sus libros y libretas.
Luego se sentaron en el coche y emprendieron su camino.

En mitad del camino a Jaehyun le surgió una pregunta, más bien tenía esa pregunta desde la mañana. Pero no se atrevía a formularla.
Estaba inseguro sobre sí mismo, y pensaba que lo hacía mal, o que al mayor no le gustaba.

Veía como él no decía ni una sola palabra durante todo el viaje, miraba al frente o a la ventana sin decir nada, ¿en qué estaría pensando?
Él estaba completamente calmado, todo lo contrario al de hebras rosas.

~Sugar Daddy~ -Jaeyong- {Taeyong x Jaehyun} NCT Donde viven las historias. Descúbrelo ahora