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Lunes, 6:49 am.

Allan se despertó de golpe.

Era lunes, y ese día  tenía que dejar una nueva carta en el banco de Ranpo. Después de hacer todo lo que debía, tomo su mochila y salió de su pequeño departamento, estaba decidido a comprar unos cuantos dulces para Ranpo, ya que, recién se dio cuenta que a Ranpo le encantaban los dulces, se atrevía a decir que demasiado, quizá tenga una obsesión con ellos. Llego a una pequeña tienda de dulces y escogió unos cuantos, para ser precisos, los que le gustaban a Ranpo, obviamente. Al terminar de escogerlos, pago y salió corriendo a la escuela para llegar antes que Ranpo y así poder dejarle la nombrada cartita, y sorpresa! Esta vez si consiguió unos cuantos stickers de aninalitos, aún que la mayoría eran stickers de mapaches.

Llegó a la escuela y saludo a los maestros que pasaban. Entro a su aula y rápidamente se dirigió al banco de Ranpo para dejarle la cartita y los dulces, lo bueno de esto es que varios compañeros ya habían llegado pero se encontraban fuera del aula, eso era lógico porque en los bancos se encontraban sus mochilas, así que puso su mochila en su banco y salió del aula.

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Puta, quedo bien culero.
-Amon

Paper & glitter || RanpoeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora