Terminaba de revisar unos papeles, tenía algunas cosas que hacer, como alfa de una manda tenía una responsabilidad más grande que otros, muchos cambia-forma habían cambiado, muchos de ellos ya no vivían en manadas, decidieron irse de ahí, vivir en la ciudad, donde tenían un poco más de libertad.
El no negara que en algunas cosas eran verdad, aunque también era más duro que en una manada, en la ciudad ellos tenían que conseguir sus cosas por sí mismos.
Mientras que en la manada todos trabajaban en unión y tenían lo que necesitaban, y tenían un líder justo y honrado que los mantenía a salvo de cualquiera que los quisiera hacer daño.
Con los años muchos habían olvidado el peligro que vivían, había tantas leyes que ni siquiera estaban hechas para protegerlos, la prohibición de actos que no tenían nada de malo.
--Hijo que bueno que llegas—dice su madre –La doctora Lu les dio la cita hoy, en dos horas—agradeció para después subir a la habitación
--Hola—lo miro –Mi mama dijo que había hecho una cita...
--Ah, sí me dijo—se acercó a ella –Estoy nerviosa, ¿y si no hay nada?—sonrió mientras besaba su mejilla
--Ahí está mi cachorro—dijo acariciando su vientre –Y si no hay nada, podría poner uno—dijo mientras bajaba su mano hasta su trasero
--¡Anthony!—grito sonrojada
--¿Qué?—dijo besando su cuello –No me digas que no quieres—él sonríe divertido, le encantaba verla así
--A-Anthony, l-la c-cita e-es e-en p-poco, t-tengo q-que a-alistarme—el sonrió mientras dejaba una pequeña marca de sus dientes en su cuello --¿Es enserio?—él se encogió de hombros
--Ve—dijo dándole una nalgada
--¡Anthony!—grito indignada
(.......)
Ambos salieron de la casa, se despidieron de los padres del chico, estaban nerviosos por saber sobre si todo estaba bien con él bebe, la joven pareja, caminaban tranquilos por la manada, tomados de la mano, muchos los veían y sonreían.
Para nadie era un secreto que ellos tenían una relación, la chica era conocida, por su apellido, su familia era una de las más antiguas del mundo, sabían que eran muy poderosos, todos deseaban que ella se convirtiera en la esposa y luna del alfa.
Minutos después estaban en la clínica, sonrió al ver a una viaja amiga de su familia, la mujer mayor, había sido la responsable del cuidado de las lunas de la manada en sus embarazos, muchos sabían que ese trabajo era muy importante, ella era responsable de la salud de las lunas y los hijos del alfa.
--Mira nada más, hace ya casi veintitrés años que fui la que te recibió, y mi ahora—dijo mirando a la chica a su lado
--El tiempo pasa—dijo sonriendo --¿Cómo está su esposo?—el esposo de la mujer era uno de los guerreros de la manada, era el encargado de la seguridad
--Como siempre, celoso y posesivo—se encogió de hombros –Perdón por no presentarme, soy Lulú una vieja amiga de la familia—dijo sonriendo
--Eleonora—dijo tomando su mano
--Un gusto, ¿y dime como terminaste con él?—sonrió
--Bueno en un principio me caía mal, pero al final terminando ganándose mi corazón—la mujer sonrió
--Anthony tienes que cuidarla, es muy linda—ella soltó una risita, la mujer era muy simpática –Bien chicos, vamos a hacer esto, puedes recostarte en la camilla—dijo con dulzura, ella comenzó a preparó todo para revisarla –bien, vamos a ver—dijo cuándo la chica ya estaba recostada --¿Sabes cuánto tienes?—negó
--Hace unos días nos enteramos—la mujer asintió
--Lu, ¿Cuándo podremos saber qué es?—ella sonrió
--Eres igual a tu padre, ni siquiera habíamos empezado y ya estaba preguntando todo—niego divertida –Y podremos saberlo en unos dos meses más, como saben un embarazo de un lobo dura de cinco a seis meses, el bebe se desarrollara más rápido de lo que normalmente en un embarazo normal sería—todos sabían eso, sabían que no duraría mucho
Los minutos pasaron, ellos solo miraban la pantalla, no entendían que era eso, la mujer miraba la pantalla, movía de un lado el aparato por el vientre, ambos estaban preocupados porque algo malo pasara, el silencio no ayudaba en nada.
--Bien, aquí—apunto a una mancha –Esta su cachorro—el corazón de ambos latió rápido –Por lo que veo todo está bien, tiene alrededor de cinco semanas y medio, pero por el tiempo que tiene es más grande, pero está muy sano—ambos suspiraron –Te daré las vitaminas y te recomiendo que comas saludable—le dio una servilleta para que limpiara su vientre
Les dio la receta y una foto de la ecografía, ella miraba la foto sin creerlo, era tan pequeño, estaba tan metida en sus pensamientos, que no se dio cuenta de cuando llego a su lado.
--¿Nos vamos?—salió de sus pensamientos y asintió, se levantó y tomo su mano –Es asombroso la vida, como un ser tan pequeño como este, este dentro de tu cuerpo—ella sonrió
--Es lo más fascinante del cuerpo humano—dijo mirando la ecografía
--Sigo esperando el momento en el que nazca—ambos estaban emocionados
--Aún falta para eso, podremos disfrutar el momento—el sonrió y la beso
--Siempre disfrutar el momento—dijo sonriendo
--No puedo creer que esta cosita es mi nieto—todos estaban feliz, desde que llegaron no esperaron para contar todo --¿por cierto como esta Lu?—su esposo soltó un bufido
--Esa mujer es un fastidio, todas las citas siempre me molestaba, solo por querer saber sobre mis cachorros—negó
--Bueno dijo que me parecía a ti, que era igual de metiche—el hombre mayor soltó un bufido –pero no tiene nada de mala saber sobre mi cachorro—dijo negando
--Es lo mismo que me preguntaba yo—las mujeres negaron sonriendo, tanto padre e hijo, se parecían
--Creo que lo mejor es que vaya a descansar, mañana saldremos temprano—se despidieron de ella
--Creo que lo mejor es que tú también te vayas, mañana será un día estresante, conocerás a tu suegra—dijo su padre con burla –Así que ve a descansar—soltó un suspiro
--¿Seguro que puedes encargarte de la manda?—asiento
--Claro que puedo, antes era el alfa—el sonrió
--Pero ya estas viejo—el otro lo miro ofendido
--¡Mira este muchacho!, yo no estoy viejo, ¿verdad amor?—la mujer sonrió
--Amor, ya estas algo grande—el hombre estaba más que ofendido, habían herido su orgullo –Lo siento cariño, pero es la verdad—dijo encogiéndose de hombros
El hombre se levantó y salió indignado, sabía que ya está grande, pero viejo y que no pudiera hacerse cargo de la manda era una gran mentira, la mujer negó, mientras salía detrás suyo
El chico sonrió al verlo molesto, entro a su habitación, la vio dormida, no había pasado ni cinco minutos, pero sabía que estaba agotada, cuando una mujer está embarazada y siendo una cría de lobo, su cuerpo tendría cambios en su cuerpo como la mayoría, pero la diferencia, es que el crecimiento del cachorro es más rápida que otro, y gasta más energía de la madre.
Tomo una toalla y se metió al baño, al salir se colocó un bóxer, se acostó a su lado, después de haberse secado el cabello, no paso mucho cuando ella se removió hasta acostarse en su pecho
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Lazos
WerewolfMi familia siempre fue muy conservadora, no dejaban que otras especies estuvieran junto a la nuestra, siempre daban la espalda a aquellas que deshonraban el nombre de la familia, sabia que si yo hacia algo así, ellos se volverían locos. Pero apesar...