El auto se detuvo, salió de ahí, camino hasta la puerta donde estaba por abrir, pero antes de poder hacerlo esta se abrió y unos brazos lo recibieron, el correspondió más que feliz, aspiro su olor antes de separarse para mirarla
Sonrió como idiota, cuando la miro por completo, su vientre estaba más hinchado, sus caderas un poco más anchas, algunas partes de su cuerpo habían crecido, una de ellas era vientre y pechos
--Te extrañe mucho—dijo mientras lo arrastraba a la sala
--Yo también los extrañe—dijo, miro la casa, pero no vio a su hermana
--Salió, dijo que quería dar una vuelta en su forma lobuna—el asiento mentiras se sentaba y la tomaba para sentarla en sus regazo
--¿Cómo te has sentido?—dijo mientras acariciaba su vientre, donde sintió un pequeño movimiento
--Bien, pero por las noches te extraño—dijo abrazándose a él, escondiendo su cabeza en su cuello –A veces creo que es un niño—frunció su ceño
--¿Por qué crees eso?—suspiro
--Porque siempre se mueve, es muy inquieto, y en la noche ni se diga—suspiro
--Yo aún sigo creyendo que será niña—dijo el seguro, mentiras acaricia su vientre
--Tu hermana me contó, que los hombre de la manada en ocasiones pueden saber que son, ¿y tú como estas seguro que será una niña?—el sonrió mientras besaba su frente
--Bueno, lo que te dijo mi hermana es cierto, hay algunos hombres de la manda, que pueden saber cuándo su pareja están en espera y hasta pueden saber que es—ella asiento, esperando que continuará –En mi caso no fue diferente, días antes de enterarnos, había tenido sueños, donde veía una pequeña niña, no entendía quien era, pero sentía la necesidad de protegerla, fueron varios días, en los que siempre estaba ahí, hasta el día que descubrirnos que estabas embarazada, comprendí que esa pequeña era nuestra hija—dijo mirando el vientre
--¿Hay posibilidad de que falles?—el sonrió mientras la besaba
--No, nunca escuche sobre alguien que fallara—se encogió de hombros
--Entonces es niña—dijo sonrió
Unas horas después, su hermana volvió, ambos tuvieron una conversación, ella se iría, él se quedaría por unos días, cambiaron lugares, así había sido en el tiempo que tenían en ese lugar
La cabaña le pertenecía a él, sus abuelos se la habían obsequiado como cumpleaños, hace años, él y su familia en ocasiones iban de vacaciones, pero como fueron creciendo, les era más difícil, pero aun así trataban de reunirse
--¿Segura que no quieres?—le mostró un vaso, ella como tercera vez volvió a negar
--No gracias—ella sabía que le costaba mucho compartir en ocasiones la comida, la cual había sido uno de sus antojos, pero por educación invitaba a los demás
Ella asiento y tomo del vaso, el cual contenía pequeños frutos, que hace unos minutos antes había tenido antojo, miro a la mujer enfrente a ella, ella negó sabiendo su intención, miro a su novio, quien solo sonrió mientras negaba
Ella sin más comenzó a comer, no se quejaba que el padre de su bebe tocara su vientre mientras ella comía, miro a la gemela, Mina era muy diferente a Mía, Mina era más seria cuando tenía que hacer algo, mientras que Mía era más alegre, pero siempre analizaba todo, antes de decir algo
Aún recuerda que las conoció días después de haber llegado, y en un principio se asustó, porque primero conoció a Mía, quien fue muy amable, pero después a Mina, quien se comportó lo contrario, no entendía el cambio, hasta que las vio juntas
--Cuídate—dijo abrazando a su hermana –Recuérdele que tiene que volver el lunes—ella rodó sus ojos
--Martes—suspiro
--Bien mejor para mí—dijo sonriendo
--No la agotes mucho—la miro mal –Adiós hermosa—dijo abrazándola
--Adiós, me saludas a los demás—dijo y asiento
--Claro, mama estará feliz de saber que la recuerdas—soltó una risita
(.....)
--No hagas eso—dice sonriendo –Lo arruinaras—pero fue demasiado tarde –Te dije—niega riendo
--¿Por qué es tan difícil hacer una pizza?—dice bufando, mientras miraba la mezcla, la cual tiene demasiada sal
--No sería tan difícil si hubieras seguido las instrucciones—niega divertida --¿Ahora que comeremos?—dice mirando el refrigerados
--¿Salimos?—frunce su ceño
--No podemos salir, ¿no lo recuerdas?—el bufa
--Puedo salir y cazar algún animal—hace cara de horror –O salgo y compro alguna comida—ella asiente
--Puedes traer unos taquitos—el sonrió
--¿Nada más unos taquitos, no quieres una pizcita o una hamburguesita?—ella lo miro mal
--No quiero comer mucho, pero si insistes—comenzó a reír
--Lo que mi mujer quiera—dijo besando su cuello mientras la abraza --¿No quieres algo más?—dijo mientras comenzaba a bajar la mano hasta su vientre
--No, ¿Tu que vas a querer?—dijo mirándolo
--A ti—dijo para después besarla
--En verdad tengo hambre—el bufo
--Bien, iré rápido, no abras a nadie—asiento
Miro impaciente como se iba, se sentó en el sofá mientras esperaba, pero el hambre le estaba ganando, así que pensó que lo mejor era limpiar el desastre que había hecho hace unos minutos
Entro a la cocina, hizo una mueca al ver aquello, tendría mucho trabajo, fui por las cosas para limpiar, la cabaña era algo amplia, ahí cabían como máximo unas veinte a veinticinco personas, había como cinco o seis habitaciones, no había visto mucho la cabaña
Ya que se la pasaba en su habitación o en la cocina, casi siempre se sentía cansada, pero aun así, trataba de ayudar en la casa, aunque la gemela no quería, decía que no hiciera mucho esfuerzo, pero al final terminaron haciendo un trato.
Ella cocinaría, y se encargaría de limpiar la cocina, mentiras que la gemela haría lo demás, para ella no era justo, pero siempre terminaba perdiendo en la discusión, así que termino rindiéndose
Tomo el molde donde estaba la mezcla, por curiosidad, paso su dedo por esa cosa y la metió a su boca, hizo una mueca, estaba demasiado salado, tiro eso a la basura, se sintió mal de haber desperdiciado la comida
Cuando termino de limpiar, se sentó en el sofá esperando a que regresara, mentiras acariciaba su vientre, su otra mano estaba recargada en el sofá, soltó un suspiro cuando sintió su estómago gruñir
--Bebe, espera un poco, papa llegara pronto, te traerá esos taquitos—dice mirando su vientre
Mientras esperaba, cerró sus ojos, sintió la energía de las Adesso, pudo sentir que algo pasaba, lo descubrió abrió sus ojos de golpe, mientras sentía sus lágrimas bajar
--Amor encontré todo.... ¿Cariño que pasa?—dijo una vez que estaba a su lado
--Una Adesso murió—susurro
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Lazos
Manusia SerigalaMi familia siempre fue muy conservadora, no dejaban que otras especies estuvieran junto a la nuestra, siempre daban la espalda a aquellas que deshonraban el nombre de la familia, sabia que si yo hacia algo así, ellos se volverían locos. Pero apesar...