Cartas para Lena (SUPERCORP)

NOSOTRAS

Tres años atrás

       La legión entrenaba en equipos de dos cuando no estaban demasiados ocupados, siempre intercambiando. Aquella semana a Lori se le había asignado a Imra Ardeen como compañera y tutora, un miembro importante de la Legión y alguien que le había brindo su mano desde que había llegado. Pero sabía que algo pasaba cuando aquella mañana Imra no llegó, tampoco en la tarde y no dio señales mucho menos en la noche y ni ninguna clase de estatus. Lori la buscó preocupada por toda New Metrópolis, a nadie parecía importarle su ausencia sin embargo Lori lo hacía, no era que a sus compañeros no les importara, pero no sería la primera vez que pasaba...aquel día se sentía diferente se dijo Lori.

Laraine no se sorprendió cuando la encontró afuera de la cuidad en medio de la oscuridad hablando en voz alta en su lengua natal. Escuchó Lori con su superoido que su corazón latía con calma y le dio paz saber que no le había sucedido nada, Imra no noto la presencia de ella de inmediato, solo unos minutos después mientras ella flotaba entre los árboles instalada como guardiana, mientras cuidaba de la burbuja en la que se hallaba, fue ahí cuando la hizo. Imra no hizo ningún gesto sola la observo en la lejanía por un tiempo, para luego romper en llanto; Lori no dijo nada ni preguntó que sucedía, solo fue a ella y le extendió sus brazos, la arrullo y la hizo sentir segura mientras su cuerpo le daba el calor en medio del frio.

***

No sabían que tres años después los papeles se invertirían, pero esta vez en una nave a miles de kilómetros de su hogar y en una habitación de igual de oscura y helada como aquella noche, pero ahí estaban ambas, Imra la consolaba sin reproches y la mantenía cerca de su pecho para que pudiera dormir.

Al otro lado de la nave estaba Kara, despierta y sentada en el piso con las piernas recogidas en su pecho intentando procesar todo que lo había sucedido tras su partida. Sus lágrimas se habían agotado desde que le había pedido a Lori que le diera algo de espacia para pensar. Solo había un dolor insoportable que la ahogaba instalado en su pecho, uno que no se marchaba y que no se marcharía.

Aun procesaba que Lena estuviera muerta, mucho menos por su culpa, era lo más doloroso de todo. En aquellos momentos solo deseaba estar muerta, deseaba que nadie hubiera llegado a su rescate y haber muerto, así Lena y ella se habrían encontrado junto a Rao en el eterno sol. Así quizá habrían terminado siendo felices.

Ahora tenía una hija, una hija biológica portadora de su antiguo manto y con la inteligencia de Lena. Pensó que era increíble, que Lori era igual de increíble que su madre, pero ahora era mayor, se había perdido cada uno de sus momentos.

Lo único que quedaba en la tierra para ella era Alex, pero sabía que tenía una familia y por lo que Lori había contado apenas había podido dejarla ir, apenas Alex después de quince años la había dejado ir. No pretendía ser la que arruinaría lo que había construido con lo sombría que se sentía su alama.

Entonces de pronto ya nada tenía sentido, nada tenía sentido más que Lori. Pero no sabía si era lo suficientemente fuerte como para tenerla junto a ella, era un gran reflejo y un recordatorio de Lena. Había perdido a suficientes personas en su vida, no era justo.

Sus ojos se terminaron posando en algún momento de la larga noche en el agujero negro que se veía en el horizonte teniendo pensamientos que parecían lo más lógicos para su situación. La única razón por la que no había viajado era porque el trasportador de salto estaba en mantenimiento, pero pronto estaría listo, y tendría que estar lista para volver a un mundo sin Lena. Creyó que jamás estaría lista para ir a un mundo si ella, al final de cuentas, Lena era su mundo.

***

La mañana siguiente si podían llamara así, todos respetaron la privacidad de Kara y nadie toco a su puerta, ni siquiera Lori quien había estado tentado hacerlo.

Algunos estaban en la sala de máquinas y otros en la cocina, el ambiente estaba menos pesado que los días anteriores. Al comienzo de medio día todos estaban en los controladores hablando sobre lo que harían al regresar a la tierra, ya que habían estado en el espacio por más de un mes.

- ¿Y al fin ustedes se mudarán juntas? Imra no ha dejado de hablar sobre lo genial que es la nueva casa, y realmente quiero dormir en su piscina pronto- Comentó Garth sentados junto a Brainy. Lori y Imra se dieron una mirada y asistieron, era algo que habían planeado mucho antes de su viaje.

-Hay un sesenta por cierto de que tengas graves quemaduras por el sol si decides hacer eso Gar, te recomiendo no hacerlo- Le recomendó Brainy rápidamente a lo que todos rieron, incluso Lori que se hallaba reclinada en el espaldar en la silla de Imra.

-Se refiere a que se quiere meter en ella muy pronto- Aclaró Rokk.

-Exacto- concordó Imra con media sonrisa a su viejo amigo- ¿Cierto Gar? Porque no pienses que dormirás allí-

-Si porque o sino tendré que sacarte y no te gustaría ser lanzado por una Kriptoniana- Comento Lori divertida.

-Hay que aclara, eres mitad alien así que por favor Lena no alardes tanto – Respondió en broma el chico pelirrojo haciéndole un gesto a Lori con el brazo.

-Ella podría patearte el trasero muy fuerte de todas formas- Defendió Imra y siguieron riendo.

Nadie se percató de Kara en el fondo ya levantada observando con media sonrisa a su vida, como todo se miraban con cariño y como ella parecía encargar tan bien, supo que en medio de todo el dolor que la abrumaba podía haber encontrado su felicidad, aunque no es su tiempo ¿Pero eso realmente importaba?

Aun no sabía si volvería a su siglo o si se quedaría en el futuro, amabas ideas eran tan malas de todas formas pensó, no había un lugar para ella, nada era en absoluto como lo había dejado hacia un tiempo y el futuro solo era un recordatorio constante de lo que fue, tampoco le pediría a Lori que volviera asu tiempo ¿Con que derecho le pediría a ella eso? ¿Cuándo parecía poner en orden su vida incluso tan joven?

Kara se dijo así misma que era fuerte, que podría soportar todo por Lori, no la conocía bien, pero ya la amaba ¿Cómo no hacerlo? Pero no sabía si realmente iba hacer lo suficientemente fuerte. Era algo que debía averiguar pronto porque no le quedaba mucho tiempo en medio de la nada.