Capitulo 13: No puedo...

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Recuerdo que Slade siempre me decía, que cuando uno dispara un arma, todo a su alrededor se detiene por unos momentos y se siente como si esos segundos fueran eternos. Nunca había entendido bien esa frase, hasta ahora. Sera el hecho de por fin comprender este mundo, o será el hecho de a quien le he disparado, sea cual sea el caso, esta sensación no es nada agradable. Seguia apuntándole, ella me miraba totalmente shockeada, temiendo por su vida tal vez, aunque mi intención era mantenerla alejada de mi.

Rito: Da un paso mas y te prometo que el próximo tiro ira a tu cabeza-le dije fríamente, ella no reacciono, estaba completamente congelada.

Lala: Ritoo, po- porque hiciste eso???-dijo asustada

Rito: YA NO ME LLAMES RITO-grite para disparar hacia el cielo-Tu ni ninguna de ustedes tienen el derecho de llamarme así.

Haruna: Por favor Rito, solo escúchanos-decía sollozando

Rito: Escucharlas???-dije para apuntar en dirección a ella- Escucharlas como ustedes me escucharon aquel dia???

Kotegawa: Por favor, solo déjanos expli

Rito: YA CIERREN LA MALDITA BOCA, no tienen nada que explicarme, lo entiendo perfectamente, yo nunca fui nada para ustedes, solo fui un juguete para todas ustedes, un juguete que después tiraron a la basura. No se hacen idea de todo lo que hice y todo lo que sufrí por ustedes, yo las quería, a todas y cada una de ustedes, di todo de mi para que ustedes fueran felices, pero eso nunca les importo.

Mikan: Sabes que eso no es cierto onii-chan, todas siempre te quisimos y te seguiremos queriendo- dijo en llanto

Rito: Entonces explíquenme por que me abandonaron, por que me cambiaron de un dia para el otro. Yo era alguien en cierto sentido normal, nunca herí a nadie, nunca le hice daño a nadie, pero ustedes me transformaron en lo que soy ahora, Aquel muchacho débil, flacucho e inútil ya murió, murió hace dos años. Ustedes convirtieron mi vida en un calvario, yo nunca quise esto, nunca quise convertirme en un mercenario, pero era esto o morir. Gracias a ustedes y su egoísmo perdí todo, perdí a mis amigos, perdí mi hogar, perdí a mi familia, pero sobre todo, la perdí a Céline.-dije mientras soltaba una lagrima, ellas estaban sollozando mientras hablaba-Ya no tenia motivos para seguir viviendo, lo había perdido todo, toda mi vida se fue a la mierda, si no hubiera sido por mi maestro tal vez hoy no estaría aquí. Fue en ese momento que encontré un motivo para vivir, un motivo que me salvo de la oscuridad, me convertí en alguien nuevo, alguien distinto, me convertí en un mercenario. Pase dos años de entrenamiento intenso, sufriendo incontables veces, pero siempre salía adelante. Cuando pensé encontrar paz en mi vida, se dio el momento que mas espere por dos años.

Momo: Cual fue???-decía todavía con lagrimas

Rito: Matar a Takeda- Cuando dije eso todas quedaron en shock- Si, yo fui quien acabo con ese bastardo malparido, y les juro que disfrute cada segundo viendo como ese imbécil se retorcía de la desesperación.

Lala: Así que tu fuiste quien mato a Takeda???-dijo todavía en shock

Rito: Sii, yo fui el responsable de la muerte de su noviecito, y te digo algo???, hubiera deseado que ese momento durara para siempre-dije fríamente. Ellas no tenían palabras, estaban con la mirada perdida- Bien, ya fue suficiente palabrerío por hoy-empecé a guardar mi arma-Espero que nunca mas nos volvamos a ver-dije para voltearme y empezar a caminar, pero en eso otro rayo vuelve a caer.

Mea: Lo siento Rito-senpai-empezó a hablar-pero un puedo dejar que vuelva a irse, nos escuchara o por las buenas o por las malas-dijo apuntándome

Rito: Hmmp, entonces que asi sea-dije para lanzar una granada cegadora y en pleno aire dispararle provocando así una gran cortina de humo

Después de eso todo se volvió un caos total, escuchaba los gritos de las chicas, se preguntaban en donde estaba, use la granada para improvisar un plan de escape, pero no seria factible, ellas pueden volar y verme desde el aire, maldita anatomía alienígena, supongo que la única opción que tengo es acabar con ellas.

Yuuki rito: El nacimiento de un mercenarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora