Alicia Bane, una universitaria con daddy issues (21)
Alexander Kunold, el especialista en traumas del hospital más famoso del país.(27)
Prólogo:
Alicia miró al oji azul y susurró :
"Todo era tan monótono hasta que llegaste a llenarlo de colores"
...
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Pov's Alicia.
12:00 pm
Hoy se cumplía un año desde que vivo con Alex. Gire mi rostro y vi a Alex dormir abrazando mi torzo.
-Te amo *susurré para después besar su frente y dormir junto a él*
8 am
-Bebeeeeeeé! *Beso mi frente* despierta *susurró en mi oído*
-¿Um?
-Vamos bebé, abre tus precioso ojitos. *Suplicó* Hoy es nuestro aniversario y te hice el desayuno.
Abrí mis ojos lentamente para acostumbrarme a la luz.
Cuando por fin mi vista fue clara pude ver una charola que traía hotcakes, un café, agua de jamaica, yogurt natural con frutas arriba y miel.
Sonreí feliz, el me conocía perfectamente como para saber que esos son mis desayunos favoritos.
- Desperté desde muy temprano pensado en que podía hacerte de desayunar en un día tan especial. *Hablo llamando mi atención* Pensé demasiado en qué hacer, quería que no fuera algo normal, pero luego recordé que son tus favoritos y decidí complacerte. *Sonrió tomando mi mano para después dejar un tierno beso en ella*
-Te amo *lo dije sin persar y porque lo sentía*
-*sonrió* Yo también *se inclino a mi para besarme.
Después de varias sesiones de besos terminamos de desayunar y bajamos juntos los platos sucios.
Días antes pensamos mucho que hacer pero no podíamos decidirnos así que decidimos cada quien hacerle una sorpresa al otro. Por lo que mi plan consistía en ir a un parque de diversiones.
Nunca fuí a uno y la verdad es que me encantaría subirme a la montaña rusa.
-Y, ¿Cuál es tu plan? *dijo Daddy mirando me*
Sonreí
-Es sorpresa, *conteste caminado hacia el coquetamente* pero si me das algo bueno a cambio podría dejar de serlo.
El río vacilante, pero aún así se acerco para tomar mi cintura y darme un lento beso.
-Entonces.... Supongo que debo darte algo bueno. *Sonrió con picardía*
-Sorpréndeme .
El sin pensarlo tomo mis piernas para hacerme enrrollar estás en su cadera.
Comenzamos a subir las escaleras entre jugosos besos.
Llegamos a mi habitación y me recostó sobre la cama.
-Muy bonito tu pijama la verdad, pero se vería mejor en el piso. *Dijo para comenzar a quitármela*
