Una Madre Para Ciel

Capítulo 7

Mientras yo terminaba de escurrir mi cabello rojo y secaba mis orejas, Sebastián acomoda a el pelaje de mi cola para luego colocar la venda con cuidado.

-Y...se puede saber cómo su cola terminó así.?- preguntó mientras seguía en lo suyo.

-Pues andaba por ahí, cuando me encontré con dos personas ayudando a gente de la calle, en eso me percaté de que uno de ellos estaba enfermo, jajaja- me reí- Me haces cosquillas Sebastián- volví a reír.

- Lo siento Lady, entonces... que pasó al final- dijo queriendo escuchar el relato hasta el final.

-Pues creo que fue mi culpa o algo, pero al momento que me acerqué, su amigo pensó de que les iba a atacar o algo, lo que lo llevó a empujarme y caí  safando mi cola.- dije mientras lo miraba de reojo.- Si te soy sincera me impresionó su fuerza, para ser humano.- dije volteandome.

- Así que eso pasó, pero eso no da el derecho de golpear a una dama, eso no es de caballeros.- dijo mientras acariciaba una de mis orejas, provocandome un ronroneo.

A él, parecia fascinante el que yo hiciera ese tipo de sonido, pero no duró mucho ya que mis piernas me fallaron otra vez y hubiera caído de no ser por Sebastián.

-Gracias, supongo que ya es la hora, Sebastián... necesito que me lleves con tu amo y también coloques una cubeta.- dije mientras trataba de tomar el bolso y llevarlo a la mesita en la habitación sin que me temblaban las piernas, pero todo se interrumpió cuando Sebastián me arrebata el bolso y me toma en brazos.

- Lady lamento informarle que al parecer usted también tiene fiebre, acaso se ha contagiado de mi amo? - pregunto mientras colocaba el bolso en la mesa y me bajaba con cuidado.

-Deja de decir tonterías Sebastián, un doctor no sería doctor si no pudiera evitar contagiarse, esta fiebre fue provocada a propósito.- dije mientras sacaba unas hojas y las empezaba a moler.

-Necesita algo más lady?- preguntó Sebastián al ver que sabaca muchos más frascos y empezaba a leer las etiquetas.

-Mmmm necesito medio vaso con agua, también un poco de miel.- dije mientras sacaba una pluma y tinta del bolso y empezaba a escribir las indicaciones que deberían seguir mientras estaba dormida.

Justo cuando había terminado, entra Sebastián con lo pedido anteriormente y con otras cosas más.

- Lady me he tomado la molestia de traerle un poco de leche tibia.- dijo Sebastián.

-Gracias Sebastián, pero primero terminemos con el tratamiento de hoy. - dije mientras le dos pequeños frascos con contenidos de diferentes colores.

-Aquí hay dos frascos que vas a tener que usar en caso de que no pueda estar consciente la mayor parte de tiempo,  en la hoja de la mesa te dejo las indicaciones a detalle.- dije mientras le enseñaba la hoja que le había mencionado.

- Como es la primera vez, te mostraré que hay que hacer.- dije mientras tomaba el frasquito de contenido transparente.

-Primero que nada debes calentar este  frasco con una vela.- dije mientras le mostraba como colocar el frasco en la vela que tenía cerca de mi niño, lo retiré cuando el contenido del frasco burbujeaba.

- Una vez esté listo, tienes que hacer que tu amo aspire la esencia y luego frotas su pecho y espalda con el aceite,  este aceite es de alcanfor y ayuda con los problemas respiratorios.- dije mientras regresaba a la mesita

- Lo entiendo lady, y que hago con este frasco de contenido azul?- dijo mientras me lo enseñaba.

- Es fácil, vierte 10 gotas en un vaso mediano con agua y luego lo endulzas con miel, cuando lo hagas se lo das de beber al niño.- dije mientras guardaba las otras cosas.

Una vez terminé de guardar todo me fui a la cama y vi a Sebastián algo irritado.

-Señorita, al parecer el amo no quiere tomar el medicamento.- dijo

Cuando me dijo eso, por instinto me detuve y luego me dirigí directamente a mi bolso a sacar una pequeña linterna. Una ves estando frente a él, le dije a Sebastián que me diera espacio, lo cual sin dudar se apartó, por último examiné la boca de mi niño.

-Al parecer mi...quiero decir tu amo, tiene las amígdalas demasiado inflamadas, además de su bajas defensas se encuentra demaciado débil.-  diga mientras tomaba el vaso que aún tenía en sus manos y por último me subí en el.

- No te va a gustar nada pequeño pero es por tu bien- dije y creo que Sebastián me iba a preguntar que es lo que iba a hacer pero se quedó callado cuando tomé el líquido del vaso y se lo di de boca a boca a mí hijo.

Al ver que ésta vez si lo tragaba, procedí a repetir el proceso hasta que ya no quedaba medicamento, por suerte esta es la única vez que voy a tener que hacer esto.

-Bien. Todo listo, Sebas....Sebastián.?- pregunté algo congelada, puesto que nunca había visto a un demonio actuar así.

Sebastián se encontraba como en una especie de trance, su unas negras tomaron forma de una garras largas y negras, sus ojos dd un raro fusia se habían convertido en un rojo escarlatacon tonos negros y sus colmillos eran algo largos.

-Mmm...Sebastián- dije mientras lo movía y al parecer bastó para que saliera del trance, al darse cuenta de su forma, rápidamente vuelve a cambiar.

- Mis disculpas Lady.- dijo haciendo una reverencia.

-No te preocupes Sebastián, creiste que atacaría a tu amo, pero ves que nada pasó.- dije de forma natural.- ahora me puedes dar leche?- pregunté de forma ansiosa.

-Claro Lady- dijo de forma ya natural y me alcanzó la taza con leche tibia, mientras yo la empezaba a tomar bien ansiosa.

Una vez terminada la leche, Sebastián trajo la cubeta y la colocó al lado de la cama, mientras tanto yo me coloqué al lado de mi niño y lo subí a mi regazo.

-Su ropa lo más seguro es que esté mañana señorita- dijo Sebastián.

-Gracias Sebastián, en estos días puede de que yo no despierte, y en las ocasiones en que esté despierta tal vez será por alguna emergencia o para tomar otro baño con agua fría, para mantener mi temperatura alta.- dije algo ya cansada, le hice una seña a Sebastián para que acercara.

-Pues si me necesita solo llámeme y llegaré muy rápido- dijo Sebastián mientras se acercaba y acariciaba mis orejas.

-Para la alimentación de mi niño, debes preparar sopas con bastante ajo, para la hora en la que empiece a pedir té, que es cuando se levante debe darle té de canela con unas flores azules que hay en el frasco grande de la mesa. Por último debes acariciar mis orejas antes de tomar al niño para que yo lo suelte y así lo alimentes, aunque no esté despierto siempre comerá. - dije y Sebastián solo asintió.

-Para cuando mi amo estará sin riesgo de que se roben su alma?- preguntó algo desconfiado.

-Para mañana en la tarde debe estar con su temperatura normal, si es así para mañana podremos ir a ver a Grell.- dije  ya somnolienta.

-Buenas noches señorita.- dijo el mayordomo

-Buenas noches Sebastián.- dije mientras subía la temperatura de mi cuerpo.

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Hola A todos !!!

Se que he desaparecido por un tiempo, pero he estado recibiendo clases en línea, que por obvias razones me ha retrasado en este trabajo y aparte de eso no tengo teléfono propio y mi computadora está hecha pedazos.

Pero al poder hacer unos ajustes he podido hacer algo al respecto, así que espero que no me dejen de apoyar, gracias a tod@s.

Y gracias a @FloradelaJasmin.

Por siempre darme su apoyo y comentar.