-Justicia-

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Pasaron los días sin noticias de Slade o alguna mejoría por parte de Selina.
Helena estaba estresada, pero no había tiempo de sentarse a pensar.
Quedaba poco antes de qué Slade pudiera intentar atracar de nuevo.
Mia y Helena consiguieron acceso a un gimnasio abandonado cerca de la casa de Helena.
Ahí empezaron a entrenar mas duro para que Helena pudiera hacerle frente a Slade la próxima vez que intentase atacar 

_¿Que haz aprendido de no bajar la guardia?_ Preguntó Mia mientras ambas entrenaban.

_Bajar la guardia es malo_ Respondió Helena.

_Exacto.

Mia lanzó un izquierdazo y Helena lo evito, acto seguido, Mia intentó regresar el golpe, cosa qué Helena detuvo con una patada para rematar con otra en el aire tras un giro.
Mia cayó y logro reincorporarse tras el golpe en el pecho.

_Muy bien niña murciélago, estas casi lista, pero si quieres enfrentar a Deathstroke necesitarás mas que solo buenos pasos de baile_ Dijo Mia dándole una toalla a Helena para secar su sudor, Mia hizo lo mismo con una toalla aparte.

_¿Éstas hablando de armas?_Preguntó Helena.

_Sí_ Mia se acercó a una mochila con la cual entró y tenía varias armas en ella.
Espadas, un stick, arco y flechas, una ballesta y cuchillos.

_¿Por qué no trajiste algo con pólvora?_Preguntó Helena.

_Querida, con la mitad de estas armas se expandieron muchos imperios el Milenio pasado, es un insulto que prefieras algo pesado y sin chiste como una pistola_ Respondía mientras sacaba un arco y tomaba varias flechas.

_Estamos hablando de matar a Deathstroke y lo quieres atacar con flechas y un palo de metal.

_Batman lo vencía con menos.

_Sí, vi los videos pero Batman era un demente peleando, además tenía el doble de nuestra edad y experiencia.

_Robin también lo venció, está en tu sangre, babosa.

_Hasta qué mi madre despierte no sabré si es mi sangre.

_Todo apunta a qué sí, hablando de tú madre. ¿Apareció su novio?

_No, no hay nada de el.

_Raro, en fín, yo no mataré a Deathstroke, si tu quieres matarlo adelante, pero quiero qué sepas qué no lo enfrentare directamente, atacare y me escondere, si me seguirás en ese plan adelante, pero ten en cuenta qué dolerá si no.

_Es justo, entonces, ¿Tomo la ballesta o el arco?

_El arco es mío, quisiera ver como te desenvuelves con las flechas_Dijo Mia mientras lanzaba una flecha a un muro.
Poco después otra flecha atravesó y partió la flecha de Mia.
Al volverse hacia Helena, Mia la miro con asombro, Helena con ballesta y flechas en mano disparó y dio en el blanco.

_¿Cómo...?

_Siempre e tenido buena puntería, herencia de mi madre supongo, de niña y adolescente me enseñó a defenderme.

_Pero no a subir la guardia.

_Era muy errática, me ayudaba a concentrarme disparar con balines.

_Te lo dije.

_¿Que cosa?

_Está en la sangre.

Ambas se sonrieron y Mia se preparo de un momento a otro, tomando su arco y un carcaj caminando hacia la mochila por mas flechas y recogiendo un antifaz.

_¿Que haces?

_No te lo dije, pero tengo un contacto que me llevará con Slade.

_¿Qué? Entonces debemos ir.

HUNTRESSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora